Definición de ojear

El verbo ojear refiere a la acción de observar hacia a algún lado. Por lo general, el término está vinculado a una mirada superficial o un vistazo, sin que la persona en cuestión concentre su atención en aquello que está observando.

Por ejemplo: “Voy a ojear un rato el diario y después prepararé la merienda”, “Al ojear el jardín, la mujer se sorprendió ante la presencia de una ardilla”, “¿Qué haces ojeando mi agenda?”.

La idea de ojear también se utiliza como sinónimo de aojar: realizar un mal de ojo a una persona. La superstición indica que el mal del ojo es aquel que un sujeto puede producir a otro a través de la mirada. Al ojear a una persona, por lo tanto, se le podría provocar algún tipo de daño.

Cada cultura tiene diferentes métodos para evitar o curar el mal de ojo. Los amuletos, los talismanes o los rituales suelen apuntar a proteger a las personas de la envidia, que suele ser señalada como el origen del mal de ojo.

En el mundo del deporte, es habitual hablar de ojeadores. Estos pertenecen a clubes de distintas disciplinas y lo que hacen es asistir a partidos de otros equipos con el claro propósito de descubrir a jugadores de gran potencial para así ficharlos.

Los jóvenes se convierten así en el objetivo de muchos ojeadores que no dudan en informarse de quiénes son, de su trayectoria y de ver las cualidades que tienen. Sólo de esta manera, recomendarán a los equipos para los que trabajan que merece la pena contratar a esas futuras promesas.

En el ámbito de fútbol, por ejemplo, es fundamental la figura de esos profesionales que trabajan tanto para conseguir dotar a la cantera de jóvenes con mucho futuro como de encontrar jugadores que sean muy valiosos para que formen parte de los primeros equipos.

Ojear también puede emplearse con otros sentidos, según se acepta en el diccionario de la Real Academia Española (RAE). Cuando el término procede del árabe hispánico, ojear consiste en hacer ruidos para lograr que, en el marco de una cacería, una presa se asuste y se desplace hasta un lugar en el que el cazador pueda atraparla con mayor facilidad.

En relación con ese significado, se encuentra la palabra ojeador. Este es una persona que se encuentra participando en las cacerías y que tiene como función espantar con voces a las presas para que así a los cazadores les sea más fácil poder abatirlas.

Por extensión, se le dice ojear a la acción que se lleva a cabo con el fin de ahuyentar a un animal o a un ser humano.

Hay que decir que este verbo, a veces, lleva a la confusión a muchas personas y es que tienen dudas de si se escribe con h o no. En este sentido, hay que decir que hojear es otro verbo, que se utiliza para indicar que una persona se encuentra pasando las hojas de un libro o cuaderno de manera rápida y leyendo deprisa alguno de los párrafos o fragmentos que posee.

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