Definición de ocultismo
El grupo de pseudo-ciencias, doctrinas y actividades vinculadas a la magia y al misterio se conoce como ocultismo. Dedicarse a estas cuestiones que pretenden controlar el mundo natural y acercarse a universos ocultos también se denomina ocultismo.
Se supone que estas prácticas buscan que el ser humano logre dominar ciertos poderes que permanecen ocultos, ya sea dentro de su ser o en el entorno. En muchos casos, las prácticas ocultistas se vinculan con la religión, en especial con los movimientos que adoran al diablo.
El catolicismo, ante esta realidad y conciente de que el ocultismo puede alejar a los hombres de la fe cristiana, ha combatido al ocultismo a lo largo de la historia, condenando sus prácticas y postulados.
La manera que tuvo la Iglesia Católica de atacar el ocultismo, por considerarlo cosa del Diablo, fue haciendo empleo de la Santa Inquisición que mandó a la hoguera a miles de hombres y mujeres.
Para la ciencia tradicional, el ocultismo se vincula a lo supersticioso y a creencias mágicas. Suele reconocerse, de todos modos, que el ocultismo sirvió para generar conocimientos válidos en la antigüedad, cuando el método científico aún no había sido desarrollado.
Aunque la definición de ocultismo es poco precisa, varias disciplinas populares suelen enmarcarse dentro de su ámbito. La astrología y la adivinación, en este sentido, forman parte del ocultismo ya que sus postulados no pueden sostenerse desde la razón. Pensar que la fecha de nacimiento de una persona puede marcar su destino o que una carta está en condiciones de indicar qué sucederá en el futuro alude a la acción de alguna fuerza oculta, inaccesible para la ciencia.
Este nos lleva a hablar, por tanto, de ciencias ocultas. Estas existen desde prácticamente los orígenes del mundo y tienen como finalidad desentrañar los misterios de la naturaleza y potenciar los poderes humanos.
Partiendo de esa acepción, podríamos decir que son numerosos los ejemplos que de ellas existen. Entre estos merece la pena destacar los siguientes:
• Cartomancia. Esta viene a ser una forma de predicción del futuro o adivinación que se realiza a través de unos naipes. Estos pueden ser tanto los de la baraja española como los de la inglesa, por ejemplo.
• Alquimia. Una de las ciencias ocultas más antiguas, sin lugar a dudas, es esta otra pues nació ya en Mesopotamia. Desde entonces hasta nuestros días ha existido la misma, que viene a ser una mezcla entre medicina, arte, química o metalurgia, entre otras disciplinas. Sus objetivos son la transmutación de su alma, la conversión del metal en oro o la obtención de la piedra filosofal, la de la vida eterna.
• Numerología. Se trata de otra práctica adivinatoria que, como su propio nombre indica, se basa en la utilización de los números.
• Herbolaria. Las plantas medicinales son las que se convierten en la herramienta, base y esencia de esta otra ciencia oculta que las emplea de manera extractiva para prevenir y curar enfermedades de todo tipo.
En la era moderna, por lo tanto, el ocultismo no siempre está asociado a lo oscuro o a lo satánico, sino que puede vincularse a prácticas espirituales o creencias místicas que gozan de un cierto reconocimiento social.