Definición de maldad
Para poder conocer el significado del término maldad que ahora nos ocupa, vamos a proceder a descubrir su origen etimológico. En este caso, hay que subrayar que deriva del latín, exactamente de “malitas”. Palabra esta que es el resultado de la suma de dos componentes léxicos de dicha lengua bien diferenciados:
-El adjetivo “malus”, que es sinónimo de “malo”.
-El sufijo “-dad”, que se usa para indicar “cualidad”.
A la condición de malo se la denomina maldad.
Entre las palabras que pueden funcionar como sinónimos de maldad podemos destacar términos tales como perversidad, maldad, satanismo o protervia. Por el contrario, entre sus antónimos nos topamos con palabras como perfección o bondad.
La noción también hace referencia al acto injusto o dañino. Por ejemplo: “¿No te cansas de hacer maldades? Deberías avergonzarte”, “Creo que el jugador no tuvo maldad, solamente fue a disputar el balón y terminó lesionando a su rival por accidente”, “Solo un hombre lleno de maldad puede maltratar a su hijo de ese modo”.
La maldad, por lo tanto, se asocia a aquello que constituye un mal. Una acción que se realiza con maldad busca generar un perjuicio o, al menos, a su ejecutor no le interesan sus consecuencias, por más negativas que sean.
Supongamos que dos jóvenes ingresan a una humilde capilla y destrozan el lugar, rompiendo las figuras religiosas y el altar. Estos muchachos no tenían ningún objetivo más que destruir el templo por diversión. Frente a este panorama, puede decirse que los vándalos actuaron con maldad, provocando dolor y angustia en todos los fieles que acudían a dicho lugar.
En ocasiones, la maldad está implícita en el accionar, aun cuando la conducta en cuestión tenga un objetivo. Si un ladrón intercepta a un anciano en la calle y lo golpea para robarle la billetera, en su acto hay una gran dosis de maldad: aprovechó la vulnerabilidad de un hombre de edad avanzada, lo lastimó físicamente y le sustrajo el dinero que seguramente la víctima necesitaba para subsistir. Por supuesto, más allá de la consideración que se haga respecto a la maldad y a la cuestión moral, el robo es un delito que está penado por la ley.
De la misma manera, no podemos pasar por alto que en Hispanoamérica hubo una serie que se llamó “Índice de maldad”. Se trata, en concreto, de una serie documental estadounidense llamada originariamente “Most Evil”.
El psiquiatra forense Michael Stone es el que está al frente de ese espacio y en el mismo viene a realizar una clasificación de los homicidas en base a lo que es su nivel de maldad. Durante cuatro episodios llevó a cabo dicha clasificación en la que se encuentran asesinos conocidos como Jack el Destripador, el Asesino de Zodíaco, Charles Manson o el asesino de Golden State.
Exactamente los clasificó en una lista donde se venían a indicar un total de 22 niveles de maldad. En el primero se encuentran los que mataron en legítima defensa y en el último están los llamados asesinos psicopáticos y los torturadores extremos.