Definición de jerarquía
En el griego es donde encontramos el origen etimológico de la palabra jerarquía. Así podemos ver, de manera exacta, que emana del vocablo hierarquía, que es fruto de la suma de dos términos: hieros, que puede traducirse como “sagrado”, y arkhei, que es sinónimo de “orden”.
Jerarquía es un orden de elementos de acuerdo a su valor. Se trata de la gradación de personas, animales u objetos según criterios de clase, tipología, categoría u otro tópico que permita desarrollar un sistema de clasificación.
Una jerarquía es un orden que implica una gradación.
Un orden
La jerarquía, por lo tanto, supone un orden descendente o ascendente. El concepto suele estar asociado al poder, que es la facultad para hacer algo o el dominio para mandar. Quien ocupa las posiciones más altas de la escala jerárquica, tiene poder sobre los demás.
Las empresas son organizaciones jerárquicas. En una estructura simplificada, el dueño es quien ocupa el lugar más alto de la jerarquía: nadie toma decisiones sin su consentimiento. Detrás se ubican los gerentes, los jefes de divisiones y finalmente los empleados sin nadie a cargo. Estas divisiones jerárquicas suponen que quienes se encuentran en las categorías inferiores deben obedecer a sus superiores.
En un organigrama es posible apreciar la jerarquía interna de una empresa o entidad.
Tipos de jerarquía
Existen muchos tipos diferentes de jerarquías. Por ejemplo, está lo que se conoce como jerarquía eclesiástica que es aquella que viene a establecer cuál es el orden en lo que respecta a cargos que existen en el seno de la Iglesia. Así, en el caso de la católica nos encontramos que dicha jerarquía se compone de los siguientes grados: papa, cardenal, arzobispo, obispo, vicario, monseñor, canónigo, párroco…
En este sentido, nos encontraríamos también con la conocida como jerarquía angelical. Un término este que, en concreto, viene a determinar el orden que, según los pasajes de la Biblia, ocupan los diversos coros de ángeles que existen.
De la misma manera, también existe la llamada jerarquía militar, que es la que deja patente el orden e importancia de los rangos que existen en el ámbito castrense. Eso supone que podamos hablar de capitanes, generales, tenientes, coronel, comandante, capitán, alférez, suboficial, sargento, brigada, cabo o soldado, entre otros muchos más ejemplos.
En esta línea, también podríamos dejar patente la existencia de lo que se conoce como jerarquía de tripulación que es aquella que determina el escalafón y poder de las distintas personas que navegan en un barco determinado. Entre las mismas nos encontraríamos con los marineros u oficiales, entre otros.
El concepto en el Estado, la zoología y el lenguaje cotidiano
El gobierno de un Estado también tiene una organización jerárquica, aunque matizada por la obligación de respetar diversas normativas y procedimientos constitucionales. En una república presidencialista, el presidente es quien ordena a los ministros; estos, a su vez, pueden mandar a los secretarios.
En el mundo animal, la jerarquía se suele establecer a través de la fuerza y las agresiones. Los animales más fuertes logran establecer un orden de dominación sobre otros individuos de la misma especie, quienes acatan esta jerarquización de las relaciones.
Jerarquía, por último, se utiliza como sinónimo de valor en el lenguaje cotidiano: “Todos los equipos necesitan jugadores de esa jerarquía”, “Un pintor de esta jerarquía no puede exponer cada tres o cuatro años”.