Definición de inadmisible
Inadmisible es un término que hace mención a aquello que no resulta admisible: es decir, que no puede admitirse, tolerarse o aceptarse. Lo inadmisible, por lo tanto, es inaceptable.
Por ejemplo. “¡Es inadmisible que el gobierno quiera recortar las jubilaciones!”, “El nivel de violencia de esta ciudad es inadmisible: todos los partidos políticos deberían trabajar en conjunto para hallar una solución”, “Me resulta inadmisible que un empresario multimillonario no les pague a sus empleados lo que les corresponde”.
En la mayoría de los casos, las acciones del gobierno son cuestionadas por alguna parte del pueblo: no es posible que todos los ciudadanos estén de acuerdo, y esto conduce a que siempre haya un porcentaje de personas disconformes con las medidas oficiales. Sin embargo, muchas veces las decisiones parecen tener intenciones retorcidas: aunque parezca inadmisible, son comunes los azotes a las personas extranjeras, a los ancianos, a las clases trabajadoras y a los homosexuales.
Cuando algo es calificado de inadmisible, se alude que no puede aprobarse o permitirse. Supongamos que, en una discoteca, se incita a los jóvenes a consumir bebidas alcohólicas en exceso para que se embriaguen. Esta actitud de los responsables del club nocturno resulta inadmisible para la mayoría de adultos, sobre todo para los padres de los muchachos que acuden a dicho local, quienes les advierten sobre los daños a la salud que causa el alcoholismo. Por eso protestan ante las autoridades, exigiendo que el lugar sea clausurado.
El uso de determinadas palabras, por otra parte, es inadmisible en una sociedad plural, diversa e inclusiva. Hay conceptos que son hirientes y discriminatorios, por lo cual pueden causarle un daño al receptor. Utilizar la idea de “indio” para referirse a una persona grosera, inculta o violenta, por citar un caso, es inadmisible ya que asocia a los indígenas o aborígenes con dichas cualidades negativas. Lo mismo ocurre con la noción de “negro” cuando se usa de manera peyorativa.
En la sociedad nos encontramos a diario con actitudes inadmisibles, como ser situaciones de maltrato verbal o físico, falta de compasión por parte del gobierno hacia los ciudadanos más necesitados, actitudes carentes de ética por parte de los cuerpos de seguridad y la negación deliberada de ciertas personas a respetar el cuidado del medio ambiente.
Todos estos ejemplos pueden parecer fáciles de detectar y calificar de este modo; sin embargo, algunos consiguen camuflarse tras el velo de las costumbres y las tradiciones. La discriminación que sufren las personas de la comunidad LGBTQ+ es inadmisible para muchos, pero merecida para otros muchos. ¿Cómo justificar el maltrato a seres inocentes, la violencia física o verbal a alguien simplemente porque no lleve una vida determinada? La respuesta, tan arcaica como absurda, es que todo lo que se aleje de la norma y de las costumbres no es correcto.
Con respecto a la orientación sexual, por ejemplo, hay millones de detractores que se organizan de diferentes maneras con el objetivo de «normalizar» a todo aquel que no sea heterosexual. Aunque cueste creerlo, existen terapias que pretenden tratar la homosexualidad como si fuera una enfermedad, para convertir a los «pacientes» en heterosexuales. Resulta inadmisible que alguien juzgue negativamente la sexualidad de los demás, que las autoridades de ciertos países puedan condenar a alguien por no ser heterosexual, que tantos sean perseguidos, abusados y asesinados por esta razón; sin embargo, desde el punto de vista de quienes ejercitan estas leyes, su accionar es admisible y justo.
En el terreno del derecho, por último, se dice que un pedido, un recurso o una demanda son inadmisibles cuando no cuentan con las condiciones formales necesarias para ser tenidos en cuenta.