Definición de hagiografía
Una hagiografía es un documento biográfico centrado en la vida de un santo. Por lo tanto, se trata de un texto que cuenta la historia de una persona que ha sido santificada.
A quien crea una hagiografía se lo conoce como hagiógrafo. Este término también se aplica para nombrar a los autores de los libros que componen la Biblia.
A partir del siglo II, la hagiografía se asoció al desarrollo de martirologios: catálogos de los santos y de los mártires. Más adelante se multiplicaron las biografías de santos, que eran objeto de lectura a la manera de sermones y formaban parte de calendarios.
Cabe resaltar que la hagiografía suele dividirse en dos grandes categorías. La hagiografía práctica es aquella desarrollada por una necesidad religiosa o de manera espontánea a partir del culto a los santos. Luego comenzaron a surgir estudios científicos de dichas obras, irrumpiendo la hagiografía crítica.
Sulpicio Severo (a quien se le atribuye la primera biografía de San Martín de Tours), Prudencio (responsable de textos sobre San Emeterio y San Acisclo, entre otros) y Alban Butler (responsable de un trabajo monumental que recoge la vida de casi mil quinientos santos) son algunos exponentes históricos de la hagiografía.
Es importante señalar que, en la actualidad, el concepto de hagiografía suele utilizarse para aludir a la biografía de cualquier clase de personalidad que presenta elogios desmedidos. Una hagiografía, en este sentido, es un texto biográfico que carece de pretensión de objetividad y solamente hace hincapié en aspectos positivos y sobresalientes del protagonista.
Volviendo al plano técnico, dentro de la hagiografía es posible encontrar más de un género literario. Esta variedad responde a los modelos de santidad que hayan conseguido más popularidad entre los creyentes; por ejemplo, la figura del mártir, la del monje y la del obispo, cada una de las cuales tuvieron su momento de mayor atención.
Otro aspecto que influye en la elección de un género literario por sobre los demás a la hora de escribir una hagiografía es la intención del autor. De esta manera, un acta de mártir (definida más abajo) realizada a lo largo de la época de las persecuciones tenía como objetivo empujar a los cristianos a dar sus vidas si los ponían a prueba. Las actas escritas a partir del siglo IV, por otra parte, exhiben un carácter más apologético.
Veamos a continuación algunos de los géneros literarios más comunes de la hagiografía:
* acta de mártir: toda obra que reproduzca las actas procesales por medio de las cuales algunos cristianos fueron condenados. En este grupo también entran las narraciones del momento del juicio, las cuales tienen varios niveles de elaboración. Por lo general, el autor es contemporáneo a los sucesos relatados en una hagiografía de este tipo;
* escrito apócrifo: es sobre todo un texto que se relacione con la vida de Jesucristo y los cristianos más relevantes del Nuevo Testamento. El objetivo suele ser agregar datos a los proporcionados por los textos canónicos;
* pasión: esta clase de hagiografía relata tanto el juicio como el momento de la muerte de los mártires del cristianismo. A diferencia del acta de mártir, los autores suelen ser muy posteriores a la época del martirio que describen;
* vida: abarca la vida completa del santo, con la intención de describir un personaje modélico. Autores como Suetonio y Sulpicio son puntos de referencia para este tipo de hagiografía;
* martirologio: es una lista ordenada de acuerdo con el calendario, donde se recuerda el día de nacimiento de los santos y, en algunos casos, ciertas noticias relevantes de sus vidas;
* leyenda: el relato edificante de la biografía de un santo que se leía en el oficio divino, una serie de oraciones que se rezan en torno a la misa.