Definición de feriado
Para poder conocer el significado del término feriado se hace necesario, en primer lugar, descubrir su origen etimológico. En este caso, podemos exponer que deriva del latín, exactamente es fruto de la suma de dos componentes de dicha lengua: el sustantivo “feria”, que puede traducirse como “días festivos”, y el sufijo “-ado”, que se usa para indicar “que ha recibido la acción”.
El concepto de feriado alude a aquello vinculado a la feria, en el sentido de la interrupción y el descanso del trabajo. El término suele referirse específicamente al día que no es laborable.
Un feriado, también llamado día festivo, es una jornada en la cual se suspenden las obligaciones laborales y académicas. Dicho de otra forma: en un feriado no se trabaja ni hay clases. Existen, de todos modos, numerosas excepciones ya que muchas personas tienen que trabajar incluso en un feriado, recibiendo un pago adicional o extra por eso.
Puede afirmarse que un feriado es un día que no es hábil. Por lo general, el único día de la semana que se considera no laborable es el domingo, aunque diversas actividades también se interrumpen los sábados. De lunes a viernes, en cambio, rigen las obligaciones y las responsabilidades cotidianas. Sin embargo, cuando es feriado, se interrumpen las actividades por más que sea lunes, martes, miércoles, jueves o viernes.
Los feriados suelen ser establecidos por leyes o decretos. Las autoridades, al considerar que un determinado acontecimiento debe conmemorarse o celebrarse, fijan que una fecha sea feriado para permitir que la gente se sume a la conmemoración, festeje en familia, etc.
El día de Navidad, por citar un caso, es feriado en los países católicos. En los 25 de diciembre, de esta manera, no se trabaja y solamente funcionan los servicios públicos esenciales.
Dentro del conjunto de días feriados hay que destacar que existen, además de los expuestos, los que se establecen de modo local en una ciudad o pueblo, como pueden ser fiestas municipales en honor a sus patrones. De la misma manera, están los días feriados que hacen referencia a fiestas de las comunidades autónomas. Así, por ejemplo, el 28 de febrero es el Día de Andalucía y, por lo tanto, es una jornada feriada para quienes viven y trabajan en ese territorio mientras que en el resto de España sí es una jornada laboral más.
De la misma manera, no podemos pasar por alto que, en ocasiones, se establece que cuando un feriado cae en un sábado, lo habitual es trasladar esa jornada no lectiva al lunes siguiente. Así, lo que se logra es que los trabajadores cuenten con un puente que pueden aprovechar para descansar simplemente, para pasar tiempo con su familia o incluso para realizar una escapada.
Cuando un feriado se junta con un fin de semana, se genera un fin de semana largo: al descanso habitual de sábado y domingo se le suma el feriado del viernes o del lunes, haciendo que queden tres días no laborables consecutivos.
Además, también son feriados la mayoría de días de lo que se conoce como Semana Santa, que es la semana que viene a conmemorar la vida y muerte de Jesucristo.