Definición de estridente
El primer paso que vamos a dar antes de conocer el significado del término estridente es descubrir su origen etimológico. En este caso, podemos señalar que se trata de una palabra que deriva del latín, exactamente de “stridens, stridentis”, que puede traducirse como “sonido chirriante”. De la misma manera, hay que señalar que aquella deriva del verbo “stridere”, que es sinónimo de “producir un sonido agudo”.
El término se emplea para calificar a aquel o aquello que provoca estruendo o bullicio. Por ejemplo: “¿Quién es ese hombre tan estridente? Es insoportable”, “Tengo una banda de rock estridente: nos gusta tocar a todo volumen”, “Una máquina muy estridente no me dejó dormir la siesta”.
Cuando algo genera un ruido molesto, se lo puede mencionar como estridente. Una puerta que provoca un chirrido cuando se abre, por citar un caso, puede ser señalada como estridente. También puede nombrarse de este modo al vehículo cuyo motor emite sonidos muy fuertes.
El adjetivo incluso puede usarse respecto al sonido en sí mismo cuando es desapacible y causa malestar. A nivel general, se puede decir que los sonidos estridentes dificultan el descanso y hasta perjudican la concentración.
Entre los sinónimos de estridente nos encontramos, por tanto, con agudo, chillón, retumbante, estruendoso, chillón o estrepitoso, entre otros. Por el contrario, entre sus antónimos podemos destacar a armonioso, apacible, cadencioso, melodioso, dulce o suave, por ejemplo.
Alguien estridente, por otro lado, resulta fastidioso o poco confiable por su conducta agresiva, sus gestos exagerados o sus dichos escandalosos y polémicos: “El periodista, un crítico estridente de la administración, presentará un nuevo libro en el cual denuncia supuestos hechos de corrupción”, “Una persona estridente en el público generó tensión entre los artistas que estaban arriba del escenario”, “No me gustaría trabajar con un compañero estridente que solamente quiera hacerse notar y llamar la atención”.
“Estridente y dulce”, por último, es el título de una novela escrita por el inglés Adam Thirlwell. La historia comienza cuando el protagonista se despierta en un hotel y encuentra en su cama a una mujer que no es su esposa y cuya cabeza reposa sobre una mancha de sangre.
Asimismo, tampoco hay que olvidarse del libro “Una nota estridente”, que se trata de un conjunto de poemas escritos entre 1968 y 1972 por el artista Enrique Lihn con los que acerca al lector a la realidad social de la época, a los problemas que le agobian y a los cambios que ha experimentado el mundo.
De la misma manera, no podemos pasar por alto la existencia de una iniciativa que lleva por título Cinema estridente. En concreto, se trata de un proyecto de origen mexicano que persigue que los espectadores vean el cine de otra manera. Así, lo que propone es que vivan una auténtica experiencia interactiva con cada película. Para eso, en cada proyección y acorde a la temática del filme, la sala se transforma en los ambientes de aquel, se hacen uso de efectos especiales…