Definición de estático
El término estático puede emplearse para aludir a aquello vinculado a la estática: la rama de la mecánica que se centra en el análisis de las leyes del equilibrio. En el lenguaje coloquial, de todos modos, el concepto suele emplearse para referirse a aquel o aquello que está quieto.
Por ejemplo: “Necesito que te quedes estático como un maniquí mientras realizo el retrato, ¿de acuerdo?”, “El niño permaneció estático mientras su padre lo regañaba”, “Intenté acelerar pero el automóvil se quedó estático: no sé qué le ocurre”.
Se afirma que un individuo se encuentra estático cuando está recostado o sentado, o cuando se mueve menos de lo habitual o de lo necesario. En el terreno del deporte, en este marco, si un jugador muestra pasividad o poca actividad se lo suele calificar como estático: “El joven delantero fue reemplazado al finalizar la primera etapa ya que el entrenador lo notó demasiado estático”, “El alero estadounidense estuvo muy estático y no logró gravitar en la ofensiva de su equipo”, “Si el tenista español sigue tan estático, perderá el encuentro”.
También se califica como estático a lo que se desarrolla sin cambios o en un estado invariable. Supongamos que un periodista especializado en temas agrícolas informa que la producción de soja de una determinada región se mantiene estática desde hace cinco años. Esto quiere decir que, en el lustro, se produjo la misma cantidad de soja año tras año, sin aumentos ni retrocesos. En un sentido similar, si el gasto de una empresa permaneció estático en el último año, se puede sostener que no registró variaciones.
Se conoce con el nombre de sistema estático a ése en el cual las salidas dependen solamente de las entradas; en otras palabras, se trata de un sistema en el cual los efectos actuales están enteramente ligados a las causas actuales. De acuerdo con esta definición, un sistema con una salida que se modifica en el tiempo entra en la categoría de estático siempre que las entradas también cambien.
El concepto opuesto es el sistema dinámico, ya que se trata de uno en el que las salidas (o efectos actuales) se consideran resultantes de las entradas (o causas actuales). Aquí entra en juego la dinámica de causa y efecto, que por lo general se usa para hablar de fenómenos del ámbito de la ingeniería, por ejemplo.
Cabe mencionar que si tomamos cualquier sistema, incluso uno estático, y escogemos una medición de tiempo suficientemente corta como para que entre la entrada y la salida exista un retardo que podamos apreciar, es muy probable que a simple vista parezca ser dinámico. Por esta razón, antes de escoger una escala de tiempo debemos tomar en cuenta las metas de la investigación.
Podemos entender este término de forma literal, para hacer referencia a la ausencia de movimiento físico, o bien de manera figurada, para describir la quietud simbólica de una persona, de una empresa, por ejemplo, ante la falta de decisiones que las impulse a avanzar y crecer. También puede servir para hacer referencia a una situación, por lo general negativa, que no cambia, que se mantiene en el tiempo y que genera un efecto imposible de ignorar.
Veamos algunas oraciones de ejemplo en las cuales se puede apreciar este sentido menos literal: «Mi día a día es estático, paso del sofá a la cama y de la cama al sofá, y no sé cómo encontrar la salida«, «El proyecto se encuentra estático a causa de la falta de motivación del equipo», «Nuestro matrimonio lleva años estático pero ya no sabemos qué hacer para revivir el interés en el otro».