Definición de energía química
La energía es un recurso natural con distintos elementos asociados que permiten hacer una utilización industrial del mismo. El concepto refiere a la capacidad de poner en movimiento o transformar algo.
La química, por su parte, hace referencia la composición, la estructura y las propiedades de la materia. El término también permite nombrar a la ciencia que estudia estos aspectos junto a las modificaciones que experimenta la materia durante las denominadas reacciones químicas.
La energía química, por lo tanto, es aquella producida por reacciones químicas. Un ejemplo de energía química es la que desprende el carbón al quemarse. Las pilas y las baterías también poseen energía química.
El calor que se genera o la violencia de la reacción química producen movimiento o permiten desarrollar un trabajo. Es importante destacar que los alimentos también son fuente de energía química ya que, al ser procesados por el organismo, ofrecen calor (calorías), proteínas y vitaminas.
La energía química, en definitiva, es una de las tantas manifestaciones de la energía. Si bien este tipo de energía está siempre presente en la materia, sólo se manifiesta cuando se registra una alteración de ésta.
Cuando hablamos de energía química es inevitable que, además de determinar qué es y para qué se utiliza, hagamos referencia al conjunto de ventajas que ofrece. Se trata de los beneficios que aporta y que son los que han motivado que en distintas áreas se apueste de manera contundente por ella:
• Cuenta con un elevado rendimiento.
• Ofrece un mínimo nivel de emisiones de carácter contaminante.
• Gracias a ella se lleva a cabo la creación de una gran diversidad de productos importantes para nuestro día a día. Entre ellos destacaríamos los artículos de limpieza para el hogar o incluso para lo que es la higiene personal.
• De la misma manera, no hay que pasar por alto que la energía química está permitiendo en estos momentos la investigación y desarrollo de nuevos medicamentos, gracias a los cuales se puede hacer frente de manera contundente a ciertas enfermedades.
• Todo ello sin olvidar que también a través de ella se están acometiendo nuevos proyectos y dispositivos que tienen como claro objetivo el lograr purificar el agua.
• Está permitiendo que se descubran novedosos materiales.
No obstante, los detractores de la energía química, frente a ese conjunto de ventajas citadas, no dudan en exponer también los contras que tiene hacer uso de aquella. En concreto, habitualmente señalan que causa un grave daño al medio ambiente pues lo contamina y que algunos de los componentes que utiliza son tóxicos. Es decir, la muestra como una forma de energía nada ecológica, sino todo lo contrario.
Los automóviles, los aviones y millones de máquinas se movilizan gracias a la energía química desprendida durante la combustión del carbón o del petróleo. La configuración de los motores, con sus cilindros y otros elementos, resulta clave en todo el proceso.
Este tipo de energía incluso es la que posibilita los viajes al espacio exterior, lo que demuestra su importancia en diversos ámbitos del accionar humano.