Definición de electroforesis
La etimología de electroforesis nos lleva al vocablo francés électrophorèse. Este término, a su vez, se forma con la unión de électro- (es decir, el prefijo electro-) y el griego phórēsis (que puede traducirse como “transporte”).
Antes de proseguir con la definición de electroforesis, hay que destacar que el elemento compositivo electro- alude a lo vinculado con lo eléctrico o la electricidad. Se llama electricidad a la fuerza manifestada por el rechazo o la atracción entre partículas cargadas y a la forma de energía que se basa en esta fuerza.
La electroforesis es un fenómeno que implica el movimiento de partículas por la influencia que ejerce un campo eléctrico.
Qué es la electroforesis
El diccionario de la Real Academia Española (RAE) indica que la electroforesis es un fenómeno que consiste en el movimiento de sustancias debido a la influencia que ejerce un campo eléctrico. La noción además refiere a una técnica de separación de elementos que se lleva a cabo aprovechando el mencionado desplazamiento.
Para que se produzca la electroforesis como fenómeno, tiene que haber un campo eléctrico: es decir, una región espacial en cuyos puntos se define la intensidad de una fuerza eléctrica (la fuerza que se genera entre cargas eléctricas). La aplicación de un campo eléctrico hace que las partículas cargadas negativamente se muevan hacia el electrodo positivo, mientras que las partículas cargadas positivamente se dirigen hacia el electrodo negativo.
La electroforesis, pues, es la migración que desarrollan las partículas cargadas que se encuentran en el interior de un campo eléctrico. Dicho de otro modo, el campo eléctrico induce a la movilidad de las partículas. Esta movilidad puede aprovecharse para la ejecución de una técnica que ayuda a separar las moléculas, también llamada electroforesis.
Gracias a la electroforesis, es posible separar sustancias.
Una técnica de separación
Como técnica, la electroforesis consiste en explotar el fenómeno mencionado para separar moléculas y sustancias. Esta separación se puede llevar a cabo de distintos modos, como apelando a una matriz porosa, recurriendo a la superficie hidratada de un sólido o empleando una disolución.
Según el método escogido, la separación estará vinculada a la masa o a la carga eléctrica de las moléculas. Por eso, de acuerdo a cómo se manipulan las condiciones usadas en la electroforesis, se pueden apartar moléculas en función del rango de tamaño deseado.
Con la electroforesis se separan proteínas, el ácido ribonucleico (ARN) o el ácido desoxirribonucleico (ADN), por ejemplo. Uno de los recursos más habituales consiste en utilizar un gel para que, con el movimiento de las moléculas motivado por el campo eléctrico, los poros funcionen como un colador.
Factores que influyen en la electroforesis
A nivel general se puede afirmar que la electroforesis depende del campo eléctrico. Lo que es importante tener en cuenta es que el campo eléctrico, por su parte, adquiere sus características particulares a partir de múltiples parámetros.
Si nos centramos en el desarrollo de la electroforesis, podemos sostener que la movilidad y la velocidad de las moléculas están asociadas a la resistencia, la intensidad y la diferencia de potencial del campo eléctrico. El calor es otra variable que modifica las propiedades de la electroforesis, con lo cual el control de la temperatura resulta imprescindible.