Definición de ejercicio físico
Antes de entrar de lleno en el significado del término ejercicio físico, se hace necesario conocer el origen etimológico de las dos palabras que lo conforman:
-Ejercicio deriva del latín, exactamente de “exercitium”, que puede traducirse como “práctica” o “ejercicio”.
-Físico, por su parte, también procede del latín, en concreto de “physica”, que derivaba, a su vez, del término griego “physikos”, que se usa para indicar “relativo a la naturaleza”.
El término ejercicio se emplea para nombrar a la acción y el resultado de ejercitarse o de ejercitar: practicar algo o utilizar una facultad mental o un sector corporal de manera reiterada con el objetivo de estimular su actividad. La idea de físico, por su parte, puede aludir a lo corporal o corpóreo.
Se conoce como ejercicio físico, en este marco, a la actividad que se lleva a cabo para conservar u optimizar el estado físico. Por lo general se trata de una serie de movimientos que se repiten periódicamente.
Por ejemplo: “El médico me recomendó que realice ejercicio físico todos los días para combatir el sobrepeso”, “Me gustaría hacer más ejercicio físico, pero no tengo tiempo”, “Desde que empecé a realizar ejercicio físico más seguido, me siento mucho mejor”.
El ejercicio físico ayuda a cuidar y mejorar la salud, brindando bienestar al individuo. Entre sus bondades, permite fortalecer los músculos, eliminar grasa, proteger el sistema cardiovascular y fomentar diversas habilidades. Además sirve como recreación y contribuye a minimizar el estrés.
Además de todas las ventajas indicadas, no hay que pasar por alto que se considera que el ejercicio físico también trae consigo otras igualmente importantes como son las siguientes:
-Consigue mejorar la autoestima de la persona que lo lleva a cabo.
-Le permite reducir sus niveles de estrés.
-Le aporta felicidad, pues al ejercitarse libera endorfinas, las llamadas hormonas de la felicidad.
-Se convierte en una herramienta muy útil para prevenir enfermedades tales como la osteoporosis, el colesterol o la hipertensión.
-Mantiene o fortalece lo que es la densidad ósea.
-El ejercicio físico contribuye también a que la persona pueda hacerle frente a la depresión.
-Ni que decir tiene que consigue que quien lo practique no solo tenga una mayor sensación de bienestar sino que pueda reducir de forma contundente la ira, la rabia, la angustia o la agresividad que tenga.
Asimismo, consigue mejorar lo que es la memoria e incrementa lo que es la energía al tiempo que logra favorecer valores como son la disciplina y la capacidad de esfuerzo.
De acuerdo a los movimientos realizados, el ejercicio físico posibilita ganar fuerza, elasticidad, resistencia, flexibilidad, coordinación y/o velocidad. Antes de comenzar a hacer ejercicio con frecuencia, es necesario acudir a un médico para que determine qué tipo de esfuerzos y con qué intensidad puede realizar la persona sin poner en riesgo su salud. Esto se debe a que un esfuerzo excesivo o ciertos movimientos pueden terminar provocando un daño.
Caminar, trotar y nadar son algunos de los ejercicios físicos más habituales. La práctica de deportes, por otro lado, también constituye un ejercicio físico importante.