Definición de efecto invernadero
El efecto invernadero es un fenómeno por el cual ciertos gases retienen parte de la energía emitida por el suelo tras haber sido calentado por la radiación solar. Se produce, por lo tanto, un efecto de calentamiento similar al que ocurre en un invernadero, con una elevación de la temperatura.
Aunque el efecto invernadero se produce por la acción de varios componentes de la atmósfera planetaria, el proceso de calentamiento ha sido acentuado en las últimas décadas por la acción del hombre, con la emisión de dióxido de carbono, metano y otros gases.
Así, además de esos dos citados gases también se encuentran el vapor de agua, el óxido de nitrógeno, el clorofluorocarbono y el ozono. Elementos todos ellos que son naturales pero que, a raíz de la conocida Revolución Industrial en la que comenzó una intensa actividad en materia del uso de lo que son combustibles fósiles, han visto incrementar su presencia en la atmósfera y eso origina la situación de efecto invernadero que ahora nos ocupa.
Es importante tener en cuenta que el efecto invernadero es esencial para el clima de la Tierra. El problema radica en la contaminación ya que, en una situación de equilibrio, la cantidad de energía que llega al planeta por la radiación solar se compensa con la cantidad de energía radiada al espacio; por lo tanto, la temperatura terrestre se mantiene constante.
Entre ese conjunto de importantes cambios que el citado fenómeno origina en el clima y, por tanto, en nuestro entorno se encuentran algunos tan relevantes e importantes como es el deshielo de los casquetes polares. Un hecho este que lo que trae consigo es un notable aumento del nivel del mar que podría llevar a inundar ciudades y poblaciones.
Asimismo otra de las consecuencias más relevantes del efecto invernadero es el aumento de la desertización, gracias a esas altas temperaturas y a la escasez de lluvias. Sin olvidar tampoco que aquel también origina y puede originar en mayor medida que esos citados cambios metereológicos afecten notablemente al sector de la agricultura, y a sus cosechas. Esto supone no sólo un varapalo para el mencionado ámbito sino también un perjuicio para todos, en general.
La cuarta gran consecuencia del citado efecto invernadero es que el hecho de que se produzcan esa serie de modificaciones en las distintas estaciones del año también trae consigo cambios en lo que son los procesos de migraciones de aves e incluso en la reproducción de las mismas.
El efecto invernadero es una de las causas del calentamiento global, la teoría que sostiene que la temperatura terrestre ha aumentado en los últimos tiempos y que, de no cambiar la conducta humana, seguirá aumentando. En caso que la temperatura aumente fuera de los niveles normales, aumentará el nivel del océano y se inundarán grandes regiones habitadas.
Para evitar estos problemas, varios gobiernos promueven el Protocolo de Kioto, un convenio internacional que busca limitar las emisiones de gases de efecto invernadero. Sin embargo, hay países que se niegan a aceptar el protocolo ya que consideran que puede ser perjudicial para sus economías.