Definición de diacronía
El primer paso que vamos a dar es conocer el origen etimológico de la palabra diacronía que ahora nos ocupa. En este caso, podemos exponer que se trata de un término que deriva del griego, pues es fruto de la unión de varios componentes de dicha lengua:
-El prefijo “dia-”, que puede traducirse como “a través”.
-El sustantivo “kronos”, que es sinónimo de “tiempo”.
-El sufijo “-ia”, que se utiliza para indicar “cualidad”.
El concepto alude a la sucesión de acontecimientos a lo largo del tiempo.
Muchas veces se vincula la diacronía al análisis de los fenómenos sociales según sus distintas fases históricas. De este modo se estudian los hechos en su continuidad cronológica.
Partiendo de ese significado, podemos establecer, por tanto, que las distintas épocas de la humanidad son un claro ejemplo de diacronía. Así, a la Edad Antigua le sigue la Edad Media y a esta la Edad Moderna, por ejemplo.
Se puede diferenciar entre la diacronía y la sincronía. Mientras que lo diacrónico se relaciona a un desarrollo en una secuencia temporal, lo sincrónico alude a la observación de los fenómenos en el momento específico de su evolución. Dicho de otro modo: la diacronía hace mención a considerar un mismo acontecimiento en distintos momentos, mientras que la sincronía está asociada a distintos acontecimientos en un mismo tiempo.
Una perspectiva diacrónica de la historia argentina, por ejemplo, puede iniciar su recorrido a comienzos del siglo XIX con la lucha por la independencia, continuar con los conflictos internos entre unitarios y federales, repasar el proceso de organización constitucional, analizar la alternancia entre gobiernos militares y democráticos, estudiar la última dictadura militar que se desarrolló entre 1976 y 1983 y llegar hasta la etapa democrática que sigue vigente y en desarrollo.
Los diferentes enfoques temporales también aparecen en el terreno de la lingüística. La diacronía, en este ámbito, implicar estudiar la evolución histórica de la lengua, considerando los cambios que experimentó desde su surgimiento hasta la actualidad. La sincronía, en cambio, se centra en un momento preciso del desarrollo de la lengua.
En el ámbito lingüístico podemos destacar que una figura fundamental en el estudio de la Lengua así como en el establecimiento de los términos diacronía y sincronía es el académico suizo Ferdinand de Saussure (1857 – 1913), que está considerado el padre del estudio de la lengua moderna. Ese habló de esos conceptos en su obra “Curso de Lingüística General”.
Los trabajos, ideas y principios de aquel sirvieron para otros muchos estudiosos, entre los que se encontró el lingüista británico John Lyons (1932), un referente dentro del campo de la semántica, que dio un paso más. Así, vino a establecer, entre otras cosas, que era realmente complicado el establecer una diferenciación clara y precisa entre lo que era el cambio sincrónico de la lengua y el cambio diacrónico de la misma.