Definición de custodia
En el latín es donde se encuentra el origen etimológico del término custodia que ahora nos ocupa. En concreto, podemos decir que emana de “custodia”, que significa “guarda” y que, a su vez, emana, de “custos”, que puede traducirse como “guardián”.
Custodia se trata de la acción y efecto de custodiar (guardar con cuidado y vigilancia). Por ejemplo: “El acusado fue puesto bajo custodia de la Policía Federal”, “Un guardia se encarga de la custodia del edificio”, “¿Puedo dejar a mi perro bajo tu custodia durante unos días? Es que tengo que viajar por trabajo y no lo puedo llevar conmigo”.
La persona que se encarga de custodiar a un preso, un edificio o un objeto valioso también se conoce como custodia: “El prófugo asesinó a su custodia y escapó del vehículo que lo trasladaba hacia la cárcel”, “La custodia del palacio fue reducida por los secuestradores, quienes ingresaron por la puerta delantera”, “Los investigadores creen que la custodia de la joya fue sobornado”.
Cuando una pareja con hijos decide ponerle fin a su matrimonio es cuando empieza a utilizarse, por aquella y por sus abogados, la palabra custodia. Es decir, comienzan los acuerdos o los juicios, según se llegue a buen puerto o no, para intentar determinar claramente quién de los dos integrantes de la relación será el que se encargue de vivir diariamente con los vástagos.
En muchos casos lo que se establece por parte del juez es lo que se da en llamar custodia compartida, es decir, ambos padres tendrán la posibilidad de vivir durante el periodo correspondiente al mes con los hijos. No obstante, hay que tener claro que ese tipo de custodia el juez no lo otorgará cuando perciba que uno de los adultos se encuentra inmerso en un proceso penal que ha tenido como víctima a su ex pareja o hijos.
Un psicólogo, un trabajador social, un informe de tipo pericial, las entrevistas con los propios padres e incluso con los hijos, si así se estima oportuno, son las fuentes que utilizará la autoridad judicial para determinar al final si concede la custodia compartida o si sólo una de las dos partes es la que tendrá la misma. En este sentido, siempre establecerá como prioridad máxima que los menores estén bien en todos los aspectos de su vida.
En el ámbito de la religión católica, la custodia es la pieza de oro donde se coloca la hostia después de su consagración para la adoración de los fieles. Este elemento, que también puede estar confeccionado con otro material precioso, puede conocerse además como ostensorio u ostensorium.
Las custodias surgieron a mediados del siglo XIII en la fiesta del Corpus Christi, donde se celebra la Eucaristía. Sin embargo, estas piezas recién se hicieron más comunes en el siglo XV. En un principio se destinaban relicarios, cruces o imágenes que se adecuaban a un nuevo uso. A mediados del siglo XV, sin embargo, comenzó a definirse la forma habitual de la custodia. Actualmente la forma más frecuente es la de un sol radiante.