Definición de bregar
El verbo bregar procede de brĭkan, un vocablo de la lengua gótica que puede traducirse como “romper”. La primera acepción mencionada en el diccionario de la Real Academia Española (RAE) refiere a una determinada forma de amasar el pan.
En este sentido, tenemos que exponer que existe lo que se conoce como pan bregao. Este se caracteriza porque cuenta con una miga que es tierna y prieta al mismo tiempo. No obstante, tampoco hay que pasar por alto que se puede adquirir en una gran variedad de formas (hogaza, barra…) y que posee una corteza con una textura diferente a otros tipos de panes.
Por regla general, se suele hacer con masa madre, aunque no podemos pasar por alto que, en plan casero y para comenzar a convertirse en expertos en la fabricación de esa clase de alimento, se puede elaborar usando simplemente levadura.
La acción también alude a la lucha, la disputa, la defensa y el esfuerzo que se lleva a cabo para conseguir algo. Por ejemplo: “Voy a bregar para que el gobierno escuche el reclamo de los trabajadores”, “Tenemos que bregar por una caída del abandono escolar”, “El anciano no estaba dispuesto a bregar con la documentación, así que prefirió desistir de la operación”.
Bregar implica realizar un cierto esfuerzo o sacrificio con la intención de alcanzar un objetivo. Un hombre puede bregar por el bienestar de su familia: por eso se esfuerza todos los días en su trabajo para obtener el dinero que le permite comprar alimentos para sus hijos, solventar su educación, pagar el alquiler de la casa, etc. Si el sujeto atraviesa un mal momento laboral, seguirá esforzándose para que a su familia no le falte nada. Además bregará por dicho bienestar también en el hogar, realizando reparaciones o simplemente acompañando a sus hijos en diferentes actividades.
En ocasiones bregar se asocia a la protección y la promoción de ciertos intereses. Un dirigente político que se compromete a bregar por los derechos de los jubilados, por citar un caso, está asumiendo el compromiso de ejercer una firme defensa de los beneficios que goza este grupo social y de trabajar en los lugares correspondientes para obtener nuevas conquistas que mejoren la calidad de vida de todas las personas que se encuentran jubiladas.
De la misma manera, no podemos pasar por alto que el verbo bregar que ahora nos ocupa también es muy usado dentro del mundo de la tauromaquia. Así se establece, por ejemplo, que el capote es el elemento que usa el torero para bregar, es decir, para poder conseguir que el toro pueda colocarse de manera fija donde él desea.
En esa labor juega un papel fundamental el subalterno. Y es que, cuando así lo solicite el torero, deberá proceder a bregar al toro. En su caso, debe tener maestría para, con el capote y usando solo una mano, conseguir que el animal pueda seguir la punta del capote hasta el lugar que se desee. En concreto, tenemos que exponer que esa acción se acomete, sobre todo, para conseguir que el toro vaya de un tercio a otro.