Definición de biocombustible
Antes de entrar de lleno en la definición del término biocombustible, es necesario comenzar dando a conocer su origen etimológico. En este caso, podemos determinar que se trata de un neologismo que se compone de las siguientes partes:
-La palabra griega “bios”, que puede traducirse como “vida”.
-El sustantivo latino “combustio”, que se utiliza para indicar la acción y el efecto de quemar. En concreto, deriva del verbo “comburere”, que es sinónimo de “quemar por entero”.
Un biocombustible es un tipo de combustible cuya producción se desarrolla a través del tratamiento químico o físico de desechos orgánicos o de plantas. Cabe recordar que un combustible, por otra parte, es un material que, al arder, libera energía.
Los biocombustibles suelen ser una combinación de sustancias orgánicas que se emplea en motores de combustión interna. La soja, el pino y el maíz están entre las materias primas de los biocombustibles.
Varios países han establecido leyes para que los proveedores tengan la obligación de mezclar combustibles fósiles con biocombustibles ya que estos biocombustibles ayudan a reducir el dióxido de carbono y son renovables.
Uno de los biocombustibles más populares el biodiésel, obtenido de lípidos de origen natural. Los aceites vegetales, de soja, colza u otras especies, son el principal recurso para la fabricación de biodiésel.
El bioetanol es otro biocombustible de uso extendido. Su producción se realiza mediante la fermentación alcohólica del azúcar proveniente de la remolacha o de la caña de azúcar.
De la misma manera, no podemos pasar por alto la existencia de otro biocombustible que responde al nombre de biogás. Este se genera a partir de lo que es la biodegradación de materia orgánica. Se puede utilizar para calderas, hornos, estufas…
Otros combustibles que según algunas clasificaciones son considerados biocombustibles también relevantes son los siguientes:
-El E85, que está conformado por un 85 % de bioetanol y un 15 % de gasolina. Este se utiliza, sobre todo, en numerosos vehículos.
-El llamado E5, que es resultado de una mezcla de 95 % de gasolina y 5 % de bioetanol.
-El biocombustible E10, que es fruto de mezclar un 90 % de gasolina y un 10 % de bioetanol.
-El E-Diesel, del que se destaca no solo su buena combustión sino también que reduce de manera contundente lo que es la contaminación.
-El E95 y el E100 son, de igual modo, otros de los biocombustibles que existen.
La fabricación y el uso de biocombustibles tienen puntos positivos pero también aspectos negativos. Entre las ventajas, suele mencionarse que son combustibles sostenibles (su materia prima puede renovarse) y menos contaminantes que los combustibles procedentes del petróleo o el carbón. De la misma manera, se resalta que ofrecen un gran rendimiento y que incluso pueden llegar a producirse en laboratorios.
Como desventaja, la generación de biocombustibles puede llevar a la deforestación y a generar un incremento en el precio de la comida (ya que las plantas, en lugar de destinarse a la alimentación, se usan para producir el biocombustible; al caer la oferta de alimentos, sube su precio).