Definición de asistencia
La noción de asistencia tiene varios usos. Por lo general se asocia a estar presente en algún lugar, como una clase, un acto, una asamblea, etc. Por ejemplo: “El Dr. Lausseto confirmó su asistencia a la conferencia”, “Voy a tomar asistencia y después explicaré el nuevo tema, ¿de acuerdo?”, “La directora de la escuela premió a cuatro alumnos por tener asistencia perfecta durante todo el ciclo lectivo”.
Asistencia, por otra parte, puede ser una ayuda o colaboración que se brinda a quien está en problemas o necesita algún apoyo: “Gracias a la asistencia de esta entidad, mañana reinauguraremos el comedor infantil”, “Alicia, requiero de su asistencia para completar el informe”, “El policía brindó asistencia a la mujer para que pudiera dar a luz sin complicaciones”.
El término, en este sentido, puede aplicarse en diversos ámbitos. Así puede hablarse de asistencia jurídica (la asesoría jurídica que brindan los abogados a quienes requieren de apoyo para estar en condiciones de ejercer la defensa de sus derechos) o asistencia sanitaria (el servicio, público o privado, que se presta a los ciudadanos para prevenir y tratar enfermedades).
En los deportes que se juegan en equipo, una asistencia es un pase que un integrante de un conjunto hace a otro jugador y que le permite a éste conseguir una anotación o tanto. Veamos algunas oraciones de ejemplo: “Manu Ginóbili definió el partido con un doble en el último segundo, tras una gran asistencia del francés Tony Parker”, “Andrés Iniesta marcó dos goles y le dio una asistencia a Messi para que el argentino marcara el tercer tanto en la victoria del FC Barcelona sobre el Málaga por tres a cero”.
Asistencia remota
En el ámbito de la informática, se conoce como asistencia remota al servicio que brinda una persona a otra para reparar u optimizar su ordenador sin estar físicamente presente, sino conectado a través de una red. Se trata de una técnica posible desde hace ya muchos años, y accesible a cualquier usuario de PC o dispositivos portátiles, gracias a las diversas aplicaciones gratuitas que permiten controlar un equipo en forma remota sin grandes complicaciones.
Si bien la asistencia remota es muy común en el rubro del servicio técnico, cualquier persona puede aprovechar esta herramienta para ayudar a un amigo o familiar en tareas que puedan resultar un tanto difíciles para estos últimos, y no necesariamente para eliminar un virus o resolver un problema de drivers. Por ejemplo, si alguien no sabe cómo instalar la última versión del reproductor de Flash, gracias a la asistencia remota un usuario puede manipular su ordenador para hacerlo desde otra ubicación geográfica.
Dependiendo del programa que se utilice, la asistencia remota acarrea ciertos riesgos, que giran en torno a la seguridad. Algunos servicios exigen la instalación permanente de una aplicación en el equipo anfitrión (el que debe ser reparado, por ejemplo) y lo normal es que ésta se ejecute automáticamente cada vez que se inicie el ordenador, a menos que el usuario indique expresamente lo contrario. De este modo, si la persona que realiza el servicio no es de confianza, puede aprovechar dicha circunstancia para invadir la privacidad de su cliente después de haber realizado el trabajo.
Por otro lado, existen aplicaciones como la popular TeamViewer, que dan a sus usuarios la posibilidad de ejecutarla de manera temporal; en otras palabras, una vez finalizada la asistencia remota, el programa cesa su ejecución y no permanece en el equipo. Además, TeamViewer exige el ingreso de una clave que se genera automáticamente cada vez que se inicia, de manera que no pueda usarse a menos que ambos usuarios estén presentes y den su aprobación.