Definición de aquiescencia
El vocablo latino acquiescentia llegó a nuestra lengua como aquiescencia. De acuerdo a lo detallado por el diccionario que desarrolla la Real Academia Española (RAE), la aquiescencia se vincula al asentimiento, la aprobación, el beneplácito o la conformidad.
Por ejemplo: “El jugador no asistió el entrenamiento matutino con la aquiescencia del director técnico, quien decidió darle el día libre para que pudiera resolver algunos asuntos personales”, “El proyecto de ley no contaría con la aquiescencia del bloque oficialista”, “La aquiescencia del hombre a aceptar que sus hijos pasen todo el verano con su esposa sorprendió a los abogados”.
La aquiescencia supone dar el consentimiento a alguien para que realice una determinada acción. Si tomamos nuestro primer ejemplo, el director técnico de un equipo acepta que un jugador no asista a un entrenamiento, aun cuando esto forme parte de sus obligaciones fundamentales para con el equipo. En cuanto a un hipotético proyecto de ley sin la aquiescencia del bloque del oficialismo, se trataría de una iniciativa que no cuenta con el apoyo del mencionado sector. Por último se encuentra el caso de un hombre que acepta que sus hijos no pasen los meses de vacaciones con él, una decisión que no se esperaban los abogados.
El concepto puede adquirir ciertos matices de acuerdo al contexto. En el terreno jurídico, la aquiescencia a un juicio supone que las partes acatan someterse a su fallo y rechazan interponer algún tipo de recurso, mientras que la aquiescencia a una demanda equivale a reconocer que el reclamo de la otra parte tiene fundamento y, por lo tanto, se descarta emprender una cierta acción.
En el campo de la psicología, por otro lado, el término aquiescencia tiene un significado diferente cuando se encuentra en el contexto de un test: se trata de la tendencia a escoger respuestas de un tipo determinado, de forma irreflexiva y espontánea, una conducta que invalida el resultado y obliga a volver a comenzar. Por ejemplo, si la persona responde a todo que «sí» o que «no», si escoge de forma sistemática «verdadero» o «falso» para todos los puntos.
Según la fuente, la aquiescencia en la psicología se relaciona únicamente con las respuestas afirmativas, o bien con uno de los dos tipos en particular. En este contexto, también se habla de sesgo de aquiescencia para describir la tendencia a dar respuestas afirmativas más allá del contenido de las preguntas. El término sesgo, por su parte, hace referencia a un torcimiento o una inclinación hacia un lado, un rumbo específico o un error que se comete de forma sistemática.
Independientemente de la personalidad del sujeto, para que un test psicológico pueda resolverse con éxito es necesario crear el ambiente adecuado, libre de tensión y de distracciones. En otras palabras, la aquiescencia no siempre se relaciona con un tipo de persona bien definida, sino que puede surgir a causa del entorno.
Como nombre propio, «Aquiescencia» es un blog dedicado a las noticias acerca del Derecho internacional, y también reserva un espacio para la opinión. Su fundador, Carlos Espósito, escogió este término para bautizarlo justamente por los rasgos de equidad, buena fe y acuerdo tácito que encierra su definición. Los amantes de este campo pueden encontrar en este blog información acerca de conferencias, seguimientos de diferentes casos y comentarios que enriquecen sus investigaciones y les permiten conectarse con personas que comparten sus intereses.
Por otro lado, el blog Aquiescencia recibe la colaboración de muchos autores y lectores que desean expresar sus opiniones, dejando la puerta abierta a todo tipo de puntos de vista, incluso si se oponen al del fundador. La presencia de ideas divergentes hace posible el debate sano, algo fundamental en temas como el derecho.