Qué significa aorta
Antes de entrar a definir el concepto de aorta es necesario que determinemos el origen etimológico del mismo. En concreto, este se halla en el griego y más exactamente en la palabra άορΤή, la cual a su vez procede del término άείρειν que podría traducirse como “elevar”.
Se define como aorta a la arteria que se origina en el ventrículo situado en la región izquierda del músculo cardíaco y que forma un arco y se extiende hacia la zona del abdomen. Allí, a la altura de la cuarta vértebra lumbar, tiene una bifurcación que se prolonga en dos arterias de menor tamaño, las cuales se denominan ilíacas primitivas.
Y eso sin olvidar que además es necesario subrayar que dicha arteria es la más grande de cuantas existen en el cuerpo humano.
Ya que la aorta constituye el punto de partida del resto de las arterias que forman parte del sistema circulatorio (con excepción de las pulmonares, que salen del ventrículo derecho), está considerada a nivel médico como la arteria más importante del organismo humano. Su función es permitir el traspaso y garantizar la distribución de sangre rica en oxígeno a las demás arterias.
La aorta es una arteria de características elásticas que posee flexibilidad y se puede extender. Al contraerse el ventrículo izquierdo a fin de proveer sangre a la aorta (proceso conocido como sístole), en ella se produce una expansión, lo que le otorga la energía potencial para contribuir a mantener la presión sanguínea cuando la arteria termina por contraerse pasivamente (diástole).
Varias son las enfermedades o patologías que pueden afectar a dicha arteria tales como la coartación que puede definirse en sí como un defecto de tipo congénito que se sufre en el corazón y que lo que supone es que aquella se vea afectada por un estrechamiento. Esto significa, entre otras muchas cosas, que la persona en cuestión que la sufre tiene un mayor número de probabilidades de desarrollar una infección en la aorta.
Asimismo también hay que hacer mención a lo que se conoce con el nombre de aneurisma. Esta patología es totalmente contraria a la anterior y es que consiste en el ensanchamiento anormal de la arteria que nos ocupa. En un caso este, muy concreto que puede traer consigo la rotura de la pared de aquella y por tanto que el paciente vea peligrar muy seriamente su vida.
Entre los distintos segmentos reconocibles en esta arteria, se encuentran la denominada aorta ascendente (una porción que se ubica entre el corazón y el arco, donde se originan las arterias coronarias que llevan sangre hacia el miocardio), el arco o cayado aórtico (cuya apariencia se asemeja a una letra U pero de forma invertida y se destaca por marcar el inicio del tronco braquiocefálico, la carótida primitiva y la subclavia izquierda) y la aorta descendente (que se extiende desde el arco aórtico y concluye en la división de las arterias ilíacas). Puede mencionarse a la aorta torácica como la mitad de la aorta descendente que se ubica sobre el diafragma y a la aorta abdominal como la parte de la aorta descendente que se sitúa por debajo del diafragma y que llega hasta la bifurcación de la arteria.
Además de todo lo citado podemos añadir que aorta es una palabra que forma parte de un término más amplio: cayado de la aorta. Con él se define el arco que la citada arteria forma desde su nacimiento hasta llegar al abdomen.