Definición de aeronave
Una aeronave es un vehículo que tiene la capacidad de desplazarse por el aire (es decir, sin estar en contacto con la superficie ni con el agua). Dentro de este grupo, existen dos clases de máquinas que permiten los desplazamientos aéreos: los aerodinos (cuyo peso es mayor al del aire y, por lo tanto, tienen que lograr sustentarse a través de algún mecanismo) y los aerostatos (con un peso inferior al del aire, flotan con mayor facilidad).
Las aeronaves más usuales de la actualidad son los vehículos aerodinos. En este conjunto podemos encontrar a los aviones y a los helicópteros. Como son más pesadas que el aire, estas aeronaves deben procurarse la sustentación. De acuerdo al sistema que emplean, se puede distinguir entre las aeronaves de tipo aerodino con ala fija y los aerodinos con ala giratoria.
Hay que subrayar que existen numerosos tipos de aviones. Para descubrirlos nada mejor que conocer las distintas clasificaciones que se realizan al respecto:
-Partiendo del criterio de lo que es su uso nos encontramos, sobre todo, con aviones militares y con aviones civiles.
-Dentro de los aviones militares, están, en base a su función, desde los cazas hasta los portaaviones pasando por los bombarderos o los de reconocimiento.
-En el ámbito de los de carácter civil, podemos subrayar la existencia, en base a las actividades que realicen, los sanitarios, los de transporte de pasajeros, los de mercancías…
Los aerostatos, que hoy perdieron popularidad, fueron las primeras aeronaves. Su funcionamiento se basa en la utilización de uno o más depósitos con un gas de menor densidad que el aire, que le permite a la aeronave elevarse y flotar. Los dirigibles y los globos aerostáticos son ejemplos de este tipo de aeronaves.
En el siglo XIX tienen su origen los citados aerostatos, que consiguieron diseñar y volar gracias a un elemento fundamental: se basaban en el famoso principio de Arquímedes.
El dirigible podemos decir que tiene la particularidad de ser la primera aeronave controlada que realizó un vuelo de larga duración y se utilizó, sobre todo, en las tres primeras décadas del siglo XX. No obstante, se puede encontrar el origen de este dispositivo ya en la segunda mitad del siglo XVIII que es cuando Jean Pierre Blanchard diseñó algo parecido.
El modelo más conocido de todos los tiempos es el que se dio en llamar Zeppelin. Fue “bautizado” en julio del año 1900 y se le denominó así en honor a quien más experimentó con los dirigibles rígidos. Nos estamos refiriendo al conde Ferdinand von Zeppelin.
Durante la Primera Guerra Mundial ejercieron un papel fundamental, ya que se emplearon por parte de uno y otro bando no solo para reconocer a las tropas rivales sino también para proceder a utilizar armas aéreas.
Cuando la aeronave puede desplazarse al exterior de la atmósfera terrestre, recibe el nombre de nave espacial. Estos vehículos se componen de un cohete (con el combustible y los motores que permiten dejar atrás la atmósfera de la Tierra) y de la nave en sí misma (que puede estar tripulada o no).
La elección del tipo de aeronave depende del viaje que se pretende realizar. Para obtener una vista panorámica de un lugar, se puede usar un globo aerostático. Si una persona desea viajar de un continente a otro, se desplazará en un avión. Cuando un gobierno pretende investigar otro planeta, enviará una nave especial.