Definición de aducción
Aducción es un término que procede del vocablo latino adductĭo. El primer significado que menciona el diccionario de la Real Academia Española (RAE) alude al acto de aducir. Este verbo, por su parte, refiere a mostrar pruebas o justificaciones.
El concepto también se utiliza para nombrar al movimiento que consiste en llevar una extremidad u otra parte corporal al plano medio que, de modo imaginario, divide al cuerpo en dos mitades simétricas. Si una persona tiene los brazos extendidos horizontalmente a la altura de los hombros, dando forma a una letra T, y luego los baja para que queden las manos a la altura de la cintura, habrá realizado un movimiento de aducción.
El movimiento contrario a la aducción es la abducción. En este caso, el sujeto separa las extremidades del plano de simetría, ejerciendo una acción con sentido transversal. Eso ocurre si los brazos que están ubicados al lado del cuerpo se levantan.
Los ojos deben su movimiento a un conjunto de músculos conocidos como extraoculares. Cuando relajamos la mirada de manera que los ojos apunten hacia el frente, sin fijarnos en ningún punto en particular, adoptamos la posición denominada primaria. La rotación sobre el eje horizontal hacia arriba se conoce como elevación, mientras que la inversa es la depresión (mirar hacia arriba y abajo, respectivamente). En este caso, hablamos de aducción para definir el movimiento de un ojo hacia el eje central del cuerpo, de forma similar a la aducción de los brazos descrita anteriormente; por el contrario, la abducción consiste en mover un ojo hacia afuera.
En países como Venezuela, Ecuador y Bolivia, la idea de aducción se utiliza como sinónimo de conducción (en el sentido de una serie de conductos que permiten el transporte de fluidos). Por ejemplo: “Las autoridades municipales anunciaron que, en las próximas semanas, iniciarán las obras de mantenimiento en la aducción de San Mateo”, “De acuerdo a lo prometido por el gobernador, una aducción que irá desde la represa hasta Nuestra Señora del Rosario llevará agua potable al pueblo”, “El joven, que conducía a gran velocidad, perdió el control de su motocicleta y al caer impactó contra la aducción”.
Captación y aducción de agua
A lo largo de la historia, el ser humano ha requerido contar con un suministro de agua que le permitiese llevar a cabo de forma adecuada el riego de sus plantaciones y las diversas tareas de saneamiento de sus asentamientos, así como consumirla para alimentarse y mantener su propia higiene personal. No debemos olvidar que todos los individuos de este planeta necesitan del agua para sobrevivir, ya que es una parte esencial del mismo; en el caso de nuestra especie, se trata de un factor que limita nuestra subsistencia, y muchos lo sufren a causa del gran desequilibrio que existe entre ricos y pobres.
Una de las creaciones más significativas para garantizar el abastecimiento de agua se conoce con el nombre de captación o cosecha, una tecnología esencial para que muchas personas accedan a este recurso tan preciado. La captación es la recolección y el almacenamiento de agua que proviene de varias fuentes, con el objetivo de sacar provecho de su uso; a través de este procedimiento, se toma el agua de la cuenca y se conduce hacia estanques de reserva para incrementar de manera significativa el suministro.
El término aducción, en este contexto, se define como el acto de conducir o transportar el agua desde el origen de la captación, en este caso la cuenca, hasta la planta de tratamiento, la red o bien el tanque de regulación. Los medios que existen para llevar a cabo dicho traslado son los túneles, los canales y las tuberías, y se escoge uno u otro según las características particulares de cada instalación, del volumen de agua a transportar y del presupuesto disponible, entre otros factores.