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Smartphone

Te explicamos qué es un smartphone, sus características y diferencias con otros teléfonos. Además, te contamos cómo fue su origen y su historia.

¿Qué es un smartphone?

Un teléfono inteligente, también conocido como smartphone (del inglés smart, “inteligente”, y phone, “teléfono”), es un dispositivo portátil que combina las funciones tradicionales de un teléfono celular, con las de una computadora de bolsillo o tableta táctil. Su nombre de “inteligente” proviene del hecho de que es capaz de ejecutar muchas funciones complejas, además de simplemente comunicar telefónicamente a dos personas.

Los smartphones son un tipo de teléfono celular, y constituyen su evolución tecnológica, su versión más avanzada, cuya existencia es posible gracias a la invención y popularización de internet, y de las llamadas Tecnologías de Información y Comunicaciones (TIC). Así, un smartphone no solo permite hacer llamadas y enviar mensajes de texto, sino también navegar en internet, establecer videollamadas, enviar correos electrónicos, utilizar redes sociales, tomar fotografías, escanear documentos, y muchas otras funciones novedosas.

La aparición de los smartphones es considerada un hito de gran importancia en la historia contemporánea de la tecnología, que ha dejado rápidamente una huella profunda en nuestro modo de hacer las cosas, desde trabajar y hacer las compras hasta conseguir pareja y entretenernos. Tras menos de 20 años de presencia masiva, los teléfonos inteligentes son más populares que nunca y están profundamente integrados a nuestra cotidianidad, por lo que se han convertido en una herramienta indispensable del siglo XXI.

Como ocurre a menudo con los anglicismos y préstamos de lenguas extranjeras, el término smartphone se escribe siempre en cursiva, y las instituciones académicas recomiendan el uso de “teléfono inteligente” en su lugar.

Ver además: Dispositivos de entrada y salida

Origen e historia de los smartphones

Los primeros teléfonos inteligentes surgieron a finales de la década de 1990 y comienzos de la de 2000, a partir de la integración de los teléfonos celulares tradicionales y los dispositivos de agenda digital o computador de bolsillo, conocidos en ese entonces como PDA (del inglés Personal Digital Assistant, “asistente personal digital”).

Estos primeros teléfonos “híbridos” ofrecían las funciones de ambos aparatos en uno solo: la capacidad para hacer llamadas telefónicas y las pequeñas pantallas analógicas, que permitían el registro de nombres y números, así como de pequeñas notas y mensajes.

El salto adelante de este tipo de aparatos lo trajo consigo el OmniGo 700LX, fabricado y comercializado por Hewlett-Packard en 1996. Se trataba de un teléfono híbrido de pantalla LCD en escala de grises, compatible con el sistema operativo DOS 5.0 y capaz de realizar llamadas, crear y recibir mensajes de texto, y también correos electrónicos y faxes. En un mismo aparato se combinaban una HP 200LX y un celular Nokia 2110, lo cual representaba un avance en el hito alcanzado en 1993 por IBM con sus modelos híbridos.

Sin embargo, el primer smartphone propiamente dicho surgió en 1999, casi de la mano de la tecnología de tercera generación (3G), surgida en 2001 y que permitía la transmisión de información a grandes velocidades, lo que permitió el envío de paquetes de datos más grandes (fotos, videos, etc.). Este primer teléfono propiamente inteligente fue el pdQ Smartphone, de la empresa Qualcomm, y combinaba una PDA Palm con un teléfono celular CDMA con conectividad a internet.

Otro gran salto cuántico en materia de telefonía inteligente fue dado en 2007 con el lanzamiento del primer iPhone por parte de Apple, que cambió significativamente los estándares y la estética de la telefonía para siempre. Su sistema operativo (iOS) fue revolucionario y su único competidor real apareció en 2008: Android. Ambos fueron los sistemas imperantes en la telefonía inteligente durante la década siguiente.

A partir de entonces, los smartphones no han hecho sino ganar funciones y crecer en complejidad. La marcada tendencia hacia la miniaturización de los teléfonos celulares, por ejemplo, se comenzó a revertir a partir de la adopción del touchscreen (pantalla táctil), que requirió aparatos cada vez más voluminosos para que tuvieran pantallas funcionales y en colores, junto a las grandes baterías necesarias para alimentar el sistema.

A ello se debe sumar la aparición de las redes 4G (desde 2010 en adelante) y el anuncio del 5G (esperada para 2025), que trajo consigo un enorme incremento en las capacidades de los smartphones, de la mano de las apps descargables de internet y de la incorporación de cámaras fotográficas de cada vez mejor calidad.

Diferencias entre un smartphone y un teléfono celular básico

La gran diferencia entre un teléfono inteligente y un celular convencional tiene que ver con la posibilidad de manejar grandes cantidades de datos a través de la señal telefónica, lo que permite al smartphone conectarse a internet, y así enviar y recibir correos electrónicos, mensajería instantánea y otros paquetes de software.

Mientras los celulares tradicionales se apegaban a la idea de ser un teléfono (y por lo tanto, servir para hacer llamadas o, a lo sumo, enviar y recibir breves mensajes de texto), los smartphones dieron un paso adelante. La comunicación telefónica es apenas una de las muchas funciones de un teléfono inteligente, y es posible que incluso sea de las menos usadas, ya que se trata, en el fondo, de computadores de bolsillo. En cambio, un celular básico está comprometido únicamente con su tarea de hacer llamadas.

Principales características de un smartphone

Los principales rasgos técnicos de un smartphone son:

  • Combina las funciones de comunicación telefónica con el procesamiento de datos propio de las computadoras.
  • Permite la conexión a internet y a distintas redes de transmisión de información, como el GPS (Global Positioning System, “sistema de posición global”). En ellas puede enviar y recibir grandes paquetes de datos.
  • Tiene una pantalla que responde al tacto y que permite al usuario introducir información al sistema, tal como los teclados y punteros de las computadoras ordinarias. Generalmente, la pantalla es de cristal líquido.
  • Contiene algún tipo de sistema operativo que regula la asignación de recursos y cumple las instrucciones del usuario.
  • Tiene funciones agregadas e incorporadas como cámara fotográfica (frontal y trasera), receptor de bluetooth, lector de tarjetas de memoria microSD, lector de tarjetas SIM Card, conectividad inalámbrica a través de ondas de radio (WiFi), reconocimiento de huellas digitales, entre muchas otras. Es un aparato multitareas.
  • Cumple también el rol de agenda y organizador personal, a la par que como dispositivo de entretenimiento, socialización, cálculo matemático, y muchos otros usos, dependiendo del software que se descargue (apps o aplicaciones).

Ventajas y desventajas de los smartphones

Como toda tecnología, los teléfonos inteligentes facilitan las tareas humanas y brindan grandes oportunidades, pero también traen consigo retos importantes. Algunas de sus ventajas y desventajas son:

Ventajas de los smartphones

  • Centralizan procesos muy distintos (telefonía, agenda personal, herramienta de juegos, entre otros) en un mismo aparato que cabe en un bolsillo.
  • Amplían la posibilidad de comunicación humana a niveles nunca antes vistos y a través de diferentes canales y herramientas: oral, escrito y audiovisual.
  • Permiten incursionar en las compras online y navegar en internet con facilidad y practicidad, lo que hace del smartphone una herramienta útil para trabajar y también para disfrutar el ocio.
  • La gran cantidad de apps que se generan a diario permiten un funcionamiento muy versátil del aparato, incluso como herramienta de trabajo.
  • Son aparatos relativamente livianos y pequeños, que caben en un bolsillo y se pueden conectar a otros dispositivos de manera alámbrica e inalámbrica.

Desventajas de los smartphones

  • Como ocurre con todas las TICs, pueden producir un cierto margen de aislamiento y alejamiento de la sociedad real, lo cual puede incidir negativamente en la capacidad de socialización de las generaciones más jóvenes.
  • La cantidad de funciones incorporadas somete al usuario a un estado de continua estimulación y distracción, lo que le impide valorar el ocio y practicar la concentración.
  • Son aparatos costosos, con altos cargos de reposición, en comparación con los celulares básicos, que son mucho más económicos.
  • Requieren de una alimentación de energía muy superior a las de los teléfonos tradicionales, lo que se refleja en el peso y tamaño de la pila.
  • Su enorme conectividad representa un reto para la defensa de lo íntimo y de lo privado, ya que son aparatos que van con nosotros a todos lados y que continuamente recopilan información sobre nuestros modelos de vida.

Sigue con: Generaciones de las computadoras

Referencias