Los 200 Refranes Mexicanos Más Populares
Los refranes y dichos mexicanos se derivan de la sabiduría del pueblo resultante de muchos años de experiencia colectiva. En México, generalmente hay un refrán para cualquier evento cotidiano, que denota el folklore en lengua hablada de todo un pueblo.
Los dichos y refranes en México son utilizados para enseñar algo con un toque de viveza o recelo. Por tanto, la mayoría de estas expresiones son de dominio popular y se usan dentro de la jerga cotidiana.
Los refranes de este país tienen la característica de que mezclan la sabiduría tradicional con un toque de picardía o de sentido del humor. Son conocimientos que las personas mexicanas han ido aprendiendo generación tras generación.
Dichos y refranes populares de México
-El dinero se paga, pero el favor no.
-Limpia el campo antes de echar nuevo grano.
-Al dolor de cabeza, el comer le endereza.
-A gato satisfecho, no le preocupa el ratón.
-Todo por servir se acaba, y acaba por no servir.
-Más pronto cae un hablador que un cojo.
-El mejor caballo necesita espuelas.
-Donde manda capitán, no gobierna marinero.
-Lo que no se empieza, no se acaba.
-Hierba mala nunca muere.
-Echar por el atajo no siempre ahorra trabajo.
-La vida es corta y no retoña.
-Entre el chance y la risa, se mete la longaniza.
-A acocote nuevo, tlachiquero viejo.
-De grano en grano, llena la gallina el buche.
-El valiente vive hasta que el cobarde quiere.
-Cada quien se pone la corona que se labra.
-Gato encogido, brinco seguro.
-Al mal trabajador no le viene bien ningún azadón.
-Al que no habla ni Dios lo escucha.
-Carbón que ha sido brasa, fácilmente vuelve a arder.
-Dudoso es heredar y seguro trabajar.
-No hay marrano que se trague la mazorca entera.
-El hombre es fuego y la mujer estopa, viene el diablo y le sopla.
-No juzgues un libro por su portada.
-Si no vas a morder, no muestres los dientes.
-El flojo y el mezquino, recorren dos veces el mismo camino.
-Ni tarea que no te den, ni caballo que tu no ensilles.
-Si quieres conocer a Inés, vive con ella un mes.
-El caldo de pollo, te saca del hoyo.
-A quien lo quiere celeste, que le cueste.
-Cuesta más caro el caldo que las albóndigas.
-Cuando el tiempo nos ayuda, los secos troncos retoñan.
-Abierto el cajón, hasta el más honrado es ladrón.
-A cada guajolote le toca su Navidad.
-A caballo palpado, nunca lo montes confiado.
-En la forma de agarrar el taco se sabe quién es tragón.
-Gorgojo, más chico que un piojo; así de chiquito produce enojo.
-El que nace pa’ tamal, del cielo le caen las hojas.
-El tiempo de la siesta se acabó, mañana es hoy.
-Donde lloran, está el muerto.
-Esta vida es un camote, y el que no lo traga se ahoga.
-El que madruga, encuentra todo cerrado.
-Negocio platicado, negocio no arreglado
-Donde no hay humo, no hay lumbre.
-Besos vendidos, ni dados ni recibidos.
-Olla que mucho hierve, su sabor pierde.
-El que anda entre la miel, algo se le pega.
-El tiempo es buen consejero, y sabe desengañar.
-Barriga llena, aviso de la cigüeña.
-Dime de qué presumes y te diré de qué careces.
-Del plato a la boca, se cae la sopa.
-La comida de hoy, empuja a la de ayer.
-A comer, beber, bailar y gozar, que el mundo se va acabar.
-Lo que no has de poder ver, en tu casa lo has de tener.
-El que más temprano se moja, más tiempo tiene para secarse.
-La suerte del ratón la desea el león.
-Aliméntate con inteligencia, y prescindirás del médico.
-Zapatos de charol, ni para el agua ni para el sol.
-A la fuerza, ni los zapatos entran.
-Al caballo y al amigo, no hay que cansarlos.
-No quieras matar pulgas a balazos.
-A falta de ejercicio, las friegas suplen su oficio.
-El que un día roba un huevo, al siguiente roba una res.
-A bobos y locos no les tengan en pocos.
-En tiempo de guerra, cualquier hoyo es trinchera.
-Es virtud el trabajar, como también el guardar.
-Cada quien mastica con los dientes que tiene.
-El amor y el interés se fueron al campo un día y pudo más el interés que el
-El que conoce lo excelente, lo bueno le parece regular.
-Candil de la calle, oscuridad de su casa.
-Consejos y ejemplos que obligan, los que los muertos nos digan.
-A buen tragón, buen taco.
-Vale más paso que dure, y no trote que canse.
-Lo que mortifica, ni se recuerda ni se platica.
-Lo prestado es hermanito de lo regalado.
-Con el hombre callado, ¡mucho cuidado!
-Lo que se ve, no se pregunta.
-A buen comer o mal comer, tres veces beber.
-El marrano más trompudo agarra la mejor mazorca.
-En boca cerrada no entran moscas.
-Aunque la changa se vista de cera, ¡maranga se queda!
-Sólo la cazuela sabe los hervores que se guarda.
-Lo que no fue en tu año, no es tu daño.
-Panza llena, corazón contento.
-El dinero disfraza de sabio al pendejo.
-Cosa hueca, mucho suena.
-Hombre prevenido, no se ve nunca abatido.
-Hay quien mucho cacarea, y no pone nunca un huevo.
-¡A darle que es mole de olla!
-En cualquier trabajo u obra, el que no ayuda estorba.
-Muchos cocineros pueden arruinar la sopa.
-La suerte es de los audaces.
-No tiene la culpa el indio, si no el que lo hace compadre.
-A quien monta caballo bayo, o se le juye la mujer o lo mata un rayo.
-A chillidos de marrano, oídos de carnicero.
-La sencillez es la credencial de los inteligentes.
-Todo lo que sube, tiene que bajar.
-El que con vino cena, con agua desayuna.
-Entre broma y broma, la verdad se asoma.
-Cuando a uno le va mal, hasta los perros lo mean.
-Hay que aprender a perder, antes de saber jugar.
-Lo que más se odia, en la casa se tiene.
-El toro molinero, o bravo o traicionero.
-Si la leche es poca, al niño le toca.
-Lo que se hace sin esfuerzo y con pereza, no puede durar ni tener belleza.
-Es más difícil quitar una maña que curar una pajuela.
-Quien con amor trabaja, al otro le lleva ventaja.
-Lo ofrecido es como lo podrido, nadie lo quiere.
-Para que la cuña apriete, ha de ser del mismo palo.
-Al que es dulce, se lo comen las hormigas.
-Botellita de jerez, todo lo que me digas será al revés.
-La puerca más flaca es la primera que rompe el chiquero.
-Con su maña, pesca a la mosca la araña.
-El que siembra su maíz, que se coma su pinole.
-Hay que tomar la sartén por el mango.
-Comer para vivir, y no vivir para comer.
-Árbol que nace torcido, jamás su tronco endereza.
-Cuando el hambre entra por la puerta, el amor sale por la ventana.
-A la mujer, ni todo el amor, ni todo el dinero.
-Para uno que madruga, hay otro que no se duerme.
-Al trabajo por su vejez, no le engañan ni una vez.
-Cuando mucho lambe el perro, acaba por sacar sangre.
-Hay veces que el pato nada y a veces que ni agua bebe.
-El que es buen gallo donde quiera canta.
-Lo que más trabajo cuesta, más dulce se muestra.
-Viejos lo cerros y todavía reverdecen.
-Dios no cumple antojos, ni endereza jorobados.
-El potro que relincha, es porque le aprieta la cincha.
-El muerto y el arrimado, a los tres días apestan.
-Al hombre que camina, no se le paran moscas encima.
-Viejo el mar y todavía hace olas.
-Cuando la limosna es mucha, hasta el santo desconfía.
-Están más cerca mis dientes que mis parientes.
-Al que Dios no le da hijos, el diablo le presta sobrinos.
-A palabras necias, oídos de mercader.
-El que mata a puñaladas no puede morir a besos.
-La cerveza bien helada y la sopa bien caliente.
-El matrimonio es como la lima, dulce al principio y amargo al final.
-Más vale una vez colorado que cien descolorido.
-El hombre ignorante y necio, causa fastidio y desprecio.
-Al que hace más, se le agradece menos.
-Nunca falta un zapato roto para un pie podrido.
-Cada quien es dueño de hacer de su vida un papalote.
-Lo comido y lo gozado, es lo único aprovechado.
-El taco ajeno es el más bueno.
-Dios no les da alas a los alacranes.
-El comer y el hablar poco, nunca debe de dañar.
-Lo que se gana duramente, se come con satisfacción.
-Trabajo sin provecho es hacer lo que está hecho.
-Las pistolas se manejan con los dedos y se disparan con los huevos.
-Chocolate que no tiñe, claro está.
-La vanidad es de los tontos.
-Quien huye del trabajo, huye del descanso.
-El que se quemó con leche, hasta al jocoque le sopla.
-El que a buen árbol se arrima, buena sombra le acobija.
-El que de santo resbala, hasta demonio no para.
-Quien con lobos anda, a aullar se enseña.
-Nadie sabe para quién trabaja.
-Para dejar el pellejo, lo mismo es hoy que mañana.
-Dos perros pueden matar a un león.
-El que trabaja por necesidad, poco tiene y poco gana.
-El hombre no ha de ser de dichos, sino de hechos.
-Si ya conocen al diablo, pa’ que van a cocorearlo.
-Al mal paso, darle prisa.
-Padre millonario y trabajador, hijo vago y malgastador.
-Todo cabe en un jarrito sabiéndolo acomodar.
-Lo que al tiempo se deja, al tiempo se queda.
-Más vale llegar a tiempo que ser invitado.
-Si quieres a alguien conocer, dale poder.
-La verdad no peca pero incomoda.
-Amor de lejos, es de pendejos.
-Matrimonio y mortaja, del cielo bajan.
-Hacerle un favor al ingrato, es tanto como ofenderlo.
-Agua que no has de beber, déjala correr.
-Los hijos y los maridos, por sus obras son queridos.
-En la tierra de los calvos, los pelones son trenzudos.
-El que nace pa’ maceta no pasa del corredor.
-Dios castiga, pero da de comer.
-En caliente, ni se siente.
-Dime qué comes, y te diré cuánto tienes.
-El mal de amores duele, pero no mata.
-De gordos y tragones, están llenos los panteones.
-Estando lleno el pesebre, no hay que brincar las trancas.
-Venado lampareado, es difícil de cazar.
-A falta de pan, tortillas.
-El que se fue a la villa, perdió su silla.
-No hay abismo más negro y profundo que la boca de un chismoso.
-En la vida falta todo, en la muerte sobra todo.
-Antes del peligro, piensa y reflexiona; una vez en él, desprécialo y obra.
-A falta de amor, unos tacos al pastor.
-Si el niño es chillón, ¿para qué lo pellizcan?
-Dos, para quererse, deben parecerse.
-Aunque veas pleito ganado, vete con cuidado.
-A animal que no conozcas, no le tientes las orejas.
-La gallina que canta primero, puso el huevo.
-Sufre por saber, y trabaja por tener.
-Nadie compra la vaca si le regalan la leche.
-Hay que medirle el agua a los camotes.
-Es necesario pensar para hablar, y no hablar para pensar.
-Al nopal sólo se le arriman cuando tiene tunas.
-Los dichos de los viejitos son evangelios chiquitos.
-Favor ofrecido, compromiso contraído.
-Chisme averiguado, jamás es acabado.
-Más vale tarde que nunca.
-Sólo el que carga el cajón sabe lo que pesa el muerto.
-El que da y quita, con el diablo se desquita.
-Amor viejo y camino real, nunca se dejan de andar.
-Al que no ha usado huaraches, las correas le sacan sangre.
-La tristeza llega tras la alegría.
-Más vale que digan aquí corrió una gallina, que aquí murió un gallo.
-Puedes esconder la mano que roba, pero no la mano que gasta.
-A juventud ociosa, vejez trabajosa.
-Caras vemos, corazones no sabemos.
-A boca de jarro, sólo la china y el charro.
-Ni tanto que queme al santo, ni tanto que no lo alumbre.
-Dando y dando, pajarito volando.
-El que tenga miedo a las espinas, que no entre a la nopalera.
-El arranque es duro, pero no muy seguro.
-Al que huye del trabajo, el trabajo le persigue.
-Hijo de tigre, pintito.
-En la boca del mentiroso, lo cierto se hace dudoso.
-A más manos, menos trabajo.
-A palabras de borracho, oídos de jicarero.
-Si del cielo te caen limones, aprende a hacer limonada.
-Con toro que ya han toreado, vete con mucho cuidado.
-No le pidas peras al olmo.
-El sordo no oye pero compone.
-Cuando no hay amor, ni las cobijas calientan.
-Los lunes, ni las gallinas ponen.
-El agua y el aceite no se mezclan.
-El que es perico, donde quiera es verde.
-Al que obra mal, se le pudre el tamal.
-Nada sabe su violín y todos los sones toca.
-Cualquier fonda es restaurante, si tiene los platos limpios.
-El león cree que todos son de su condición.
-Chango viejo no aprende maromas nuevas.
-Busca mujer por lo que valga, y no sólo por la nalga.
-Mucho ayuda el que no estorba.
-El más amigo es traidor, y el más verdadero miente.
-Hay potros que saltan las trancas, aunque se les claven las púas.
-Amo de lo que callas y esclavo de lo que dices.
-El que nunca ha tenido y llega a tener, loco se quiere volver.
-Cuando la desgracia entre a tu casa, ofrécele asiento.
-Lo que se sabe sentir, se sabe decir.
-El que vivió de ilusiones, no alcanza el perdón de Dios.
-No hay que buscarle ruido al chicharrón.
-No le pidas peras al olmo.
-Antes de que acabes, no te alabes.
-Ajo, cebolla y limón, y déjate de inyección.
-Por la boca muere el pez.
-Perro que es huevero, aunque le quemen el hocico.
-A la fuerza, ni las gallinas ponen.
-Debajo del agua mansa está la peor corriente.
-El muerto al pozo y el vivo al gozo.
-A donde el corazón se inclina, el pie camina.
-Los muchachos y los borrachos, dicen las verdades.
-El que no llora, no mama.
-Buscas el burro y estas montado en él.
-Para todo mal, mezcal; para todo bien, también.
-Hombre celoso, es cornudo o quiere serlo.
-El que cacao siembra, cacao cosecha, siempre que el terreno sea bueno.
-La mula es mula, y cuando no patea, recula.
-Si te lleva el diablo, que te lleve en buen caballo.
-Al mal tiempo, buena cara.
-El que apuesta por necesidad, pierde por obligación.
-Al bueno, lechugas; y al malo, pechugas.
-El peine que más raspa, es el mejor para quitar la caspa.
-Abanicos en verano, y los pesos en la mano.
-La zorra no se ve la cola.
-De lejos se reconoce al pájaro que es canario.
-Cuando alguno, o alguna, te eche ojos, véndele caros tus piojos.
-El flojo trabaja doble.
-No hay mal que dure cien años, ni cuerpo que los aguante.
-El burro siempre rebuzna, aunque le pongan cuernos.
-Cuando te toca, ni aunque te quites; cuando no te toca, ni aunque te pongas.
-Tanto peca el que mata la vaca como el que le agarra la pata.
-Con dos que se quieran, con uno que coma basta.
-Buen arriero o mal arriero, la cama tiende primero.
-Hace más una hormiga andando que un gigante parado.
-El que es panzón, ni aunque lo fajen.
-Hay muchos quebrados que valen más que un entero.
-Donde hay una voluntad, hay un camino.
-El hambre es tan maestra, que hasta a los animales adiestra.
-El que sabe hablar, sabe también cuándo callar.
-Al paso de la carreta se acomodan las calabazas.
-A lo dado, no se le busca lado.
-Guajolote que se sale del corral, termina en mole.
-Lo que en tu casa no encuentras, sal a la calle a buscarlo.
-Cada quien lleva agua a su molino.
-Caballo de buena andanza, ni suda ni cansa.
-Más vale que sobre y no que falte.
-A cada mula le gusta su comedero.
-Ya comí, ya bebí, ya no me hallo aquí.
-El gallo más grande es el que más recio canta.
-El que no tranza no avanza.
-Gallina que se levanta temprano, agarra el mejor gusano.
-El que temprano se moja, tiempo tiene de secarse.
-El gato cuando está amarrado, muere por desesperado.
-Hay que perdonar el pasado, para disfrutar el presente.
-El que saca y no mete, busca y no encuentra.
-Enmendar es saber.
-Debo, no niego; pago, no tengo.
-Cuando una rama se seca, otra está reverdeciendo.
-Cuando la perra es brava, hasta a los de la casa muerde.
-Dios tarda, pero no olvida.
-El que no conoce a Dios, a cualquier santo le reza.
-Hace más el que quiere que el que puede.
-Al mal músico, hasta las uñas le estorban.
-La ociosidad es la madre de todos los vicios.
-Hasta al mejor cocinero se le va un tomate entero.
-Vale más paso que dure, y no trote que canse.
-El corazón no envejece, el cuero es el que se arruga.
-Hay que estar cerca del que paga y lejos del que manda.
-Todo lo que corre y vuela va pa’ la cazuela.
-Bien sabe el diablo a quién se le aparece.
-Al que no habla, Dios no lo oye.
-El que torea al toro, tiene que aguantar la cornada.
-El que entra a la iglesia aguanta la misa.
-Cacaraquear es fácil, lo difícil es poner.
-El hombre pone, Dios dispone; llega el diablo, y todo lo descompone.
-Sólo la cuchara sabe lo que hay al fondo de la olla.
-Cuando el vino entra, el secreto sale.
-Cuando la mula es mula, aunque la carguen de santos.
-Donde come uno, comen dos.
-Piedra que rueda, no cría moho.
-A quien te la haga, se la pagas; si no puedes hoy, mañana.
-Cada chango a su mecate.
-A cada uno le toca escoger la cuchara con la que ha de comer.
-De los parientes y el sol, entre más lejos mejor.
-Sólo el que carga el costal sabe lo que lleva adentro.
-Lo que se vaya a cocer, que se vaya pelando.
-Donde no hay voluntad, no hay fuerza.
-Camarón que se duerme, se lo lleva la corriente o amanece en un cóctel.
-Gallina cacaraquienta, es la que se toma en cuenta.
-El hombre que sabe, pronto sobresale.
-El que tiene más saliva, traga más pinole.
-Echando a perder se aprende.
-Hasta a la mejor cocinera se le quema la olla.
-En la mesa y en el juego la educación se ve primero.
-El que por gusto es buey, hasta la coyunta lame.
-Hay que ser franco, pero no tanto.
-No le estés dando vuelta al malacate porque se te enredan las pitas.
-A las mujeres bonitas y a los caballos buenos, los echan a perder los pendejos.