Ferocactus: características, hábitat, cultivo, usos
Ferocactus es un género de cactus de tallo solitario o agrupados de forma globular, barriliforme o cilíndrica perteneciente a la familia Cactaceae. Este género es nativo de los ambientes secos y desérticos al suroeste de los Estados Unidos y el norte de México.
El nombre Ferocactus deriva el latín «ferus» que significa feroz y «cactus» por ser una planta espinosa. En efecto, la traducción literal seria «cactus fiero», por sus prominentes espinas.
Comúnmente se conoce como biznaga, biznaga de dulce, lengua del diablo, huamiche o uña de cuervo. Algunas especies son Ferocactus alamosanus, Ferocactus cylindraceus, Ferocactus flavovirens, Ferocactus gracilis, Ferocactus glaucescens, Ferocactus histrix, Ferocactus latispinus, Ferocactus pilosus, Ferocactus robustus, Ferocactus stainesii y Ferocactus wislizenii.
Los ferocactus son plantas de aspecto cilíndrico o globular de color verde-grisáceo y de apenas unos centímetros hasta más de tres metros de altura. Florecen durante el verano y se caracterizan por florecer a partir de los primeros años de sembradas.
Como ornamental se utilizan en roquedales, parques y jardines de cactus, o en macetas y jardineras para balcones, patios o terrazas. En medicina tradicional el ferocactus es empleado para el tratamiento de enfermedades circulatorias, vías respiratorias, como diurético y para eliminar cálculos renales.
Índice del artículo
El ferocactus es una planta de apariencia globular que al ir creciendo adquiere la forma de barril o columnar. Miden entre 2-30 cm de altura, aunque algunas especies en su hábitat natural pueden alcanzar los 3 m de altura.
Esta especie se caracteriza por sus prominentes costillas longitudinales cubiertas por areolas con fuertes espinas ligeramente curvadas, de ahí su nombre «Ferocactus».
Su tonalidad varía según la especie y las condiciones ambientales donde se desarrolla, siendo desde verde-grisáceo hasta verde-azulado.
Las flores grandes, acampanadas o en forma de embudo se desarrollan a nivel de la corona durante el verano. La diversidad de colores varia entre amarillas, naranja, rojizas, azuladas o violetas como en la especie Ferocactus stainesi.
Los frutos son pequeñas bayas de 5-7 cm de diámetro, de color amarillo y cubiertas por un líquido viscoso. Estos frutos suculentos, agrupados en la corona del cactus, forman parte de la dieta de varias especies silvestres, como el venado bura (Odocoileus hemionus).
– Reino: Plantae
– División: Magnoliophyta
– Clase: Magnoliopsida
– Orden: Caryophyllales
– Familia: Cactaceae
– Subfamilia: Cactoideae
– Tribu: Cacteae
– Género: Ferocactus Britton & Rose
El nombre genérico Ferocactus proviene del adjetivo latino «ferus» que significa indómito o salvaje. El epíteto «cactus», se relaciona con las fuertes espinas de ciertas especies.
Las especies de género Ferocactus son naturales del desierto de baja California, Arizona, California, el Sur de Nevada y la región norte de México. En efecto, su hábitat común son los terrenos desérticos y pastizales sobre suelos arenosos, grava y roquedales a un nivel altitudinal de 300-1.600 msnm.
Una gran mayoría de las especies crece de manera solitaria, otras como el Ferocactus robustus o el F. glaucescens crecen agrupados o formando macolla. Estos cactus son muy sensibles a las heladas, por lo que su crecimiento se limita a determinadas alturas y latitudes menores a los 1.800 msnm.
Los ferocactus cultivados comercialmente se desarrollan sobre suelos calcáreos, pero igualmente prosperan sobre suelos ricos en nutrientes. Para su efectivo desarrollo le favorece un ambiente cálido y a plena exposición solar cuando ya está asentados y tienen cierto tiempo.
Su área de distribución natural es al norte de México en los estados de Baja California, Sonora, Durango, Sinaloa, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, y Tamaulipas
Las especies del género Ferocactus se multiplican fácilmente por semillas y a partir de esquejes o hijuelos que brotan en la base del tallo. Como planta ornamental los cactus son sembrados en macetas con el objeto de disfrutar la amplia gama de tonalidad de sus flores.
Una vez establecido el cultivo, ya sea por semilla o por esquejes, las macetas deben ser colocadas en invernadero a plena exposición solar. Las macetas no requieren riego frecuente, solo cuando se observe realmente seco el sustrato; asimismo demandan buena circulación de aire.
Las plántulas obtenidas a partir de semillas deben ser colocadas a plena exposición solar para incentivar su crecimiento y desarrollo. En ambos casos, suficiente radiación solar y aireación garantizaran el desarrollo de la planta.
Para la siembra se recomiendan sustratos sueltos, bien porosos, preferiblemente arenosos con un poco de compost o humus seco y cernido. La textura del sustrato debe garantizar un drenaje eficiente, para evitar el encharcamiento y la acumulación de agua de lluvia o riego.
El riego debe ser escaso, apenas cada quince días durante la primavera y el verano, cada mes durante el otoño y nulo durante el invierno. El sustrato debe permitir que el agua fluya durante el riego, pero que mantenga fresca las raíces.
En cultivos comerciales se recomienda la aplicación de un abono específico para cactáceas durante la primavera y el verano. Este cultivo se adapta a ambientes secos y de alta temperatura, por lo que en ambientes frescos se sugiere mantenerlo bien iluminado.
Tras la floración y durante la fructificación los ferocactus segregan una sustancia viscosa que atrae algunos insectos, como hormigas y cochinillas. Además, este líquido es un medio ideal para la formación de mohos que pueden causar algún tipo de pudrición del tallo.
En este caso, es recomendable limpiar el cactus, eliminar los restos de la floración y lavar con abundante agua su superficie, evitando cualquier daño físico que se convierta en punto de entrada para la infección de nuevos patógenos.
Los ferocactus son plantas muy longevas, que cultivadas en macetas requieren un trasplante frecuente, renovando el sustrato y empleando una maceta más grande. Dependiendo de la especie, la variedad y el tamaño, los cactus pueden ser trasplantados cada dos años.
Las diferentes especies de ferocactus poseen compuestos naturales o metabolitos secundariosm como las furanocromonas, que tienen propiedades terapéuticas para ciertas enfermedades. De hecho, pueden mejorar la circulación de las arterias coronarias y tienen efectos vasodilatadores.
Además, mejoran la funcionalidad pulmonar, siendo recomendado en caso de ataques de asma ya que favorece la circulación de las vías respiratorias. En algunas ocasiones es usado como diurético y facilita la expulsión de cálculos de las vías urinarias.
El fruto o baya de algunas especies, denominado guamiche, es utilizado de forma artesanal en diferentes regiones de México. De hecho, el guamiche es empleado para la elaboración de postres tradicionales y una bebida refrescante denominada «agua de guamiche».
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