Historia

Escudo de Neuquén: historia y significado


El escudo de Neuquén es producto de un concurso en el que resultó ganador Mario Aldo Mastice, a inicios de 1958, y comenzó a utilizarse en septiembre del mismo año, gracias a la Ley Provincial número 16.

Esta heráldica toma elementos de la bandera argentina junto a elementos propios de la identidad neuquina y, dado que carece de la tradicional forma oval, su diseño dista ampliamente del que tiene la mayoría de los escudos argentinos.

Esta provincia toma su nombre del río Neuquén, que a su vez proviene del dialecto Newenken en idioma mapuche, que significa “atrevido o audaz”.

Aldo logró valerse del término que da nombre a la entidad y plasmarlo en su diseño innovador de heráldica, de forma hexagonal y con trazos planos y minimalistas.

Historia del escudo de Neuquén

Por la ley número 1.532 del 16 de octubre de 1884 fue establecido el Territorio Nacional del Neuquén y fueron precisados sus límites. Luego se transformó en provincia, el 28 de junio de 1955.

Aún así, el escudo nacional era el utilizado en el territorio hasta el 19 de septiembre de 1958, gracias a una ley que determinó el uso de su heráldica propia.

Esta heráldica fue el resultado de un concurso en el que participaron 125 personas de todo el país y del cual resultó ganador el dibujante y piloto Mario Aldo Mastice.

Su pasión por la cordillera y por el volcán Lanín le hicieron integrar dicho volcán como elemento central del escudo.

Significado del escudo de Neuquén

La forma del escudo es de hexágono, con lados desiguales, de color dorado y relleno de color azul celeste, del mismo tono de la bandera nacional argentina.

Sobre este fondo azul puede apreciarse el volcán Lanín, que representa la cordillera andina y, más específicamente, al volcán emblemático de la provincia.

De la diversidad biológica de Neuquén destacan tres árboles: el cedro, el alerce y el pehuén. Este último es una conífera (pino) emblemática de la provincia y, en general, de la región andina patagónica.

El pehuén toma el primer plano en el escudo, posicionado al centro y sobre la imagen del volcán.

En la base del pehuén y del volcán se aprecian un par de manos abiertas, a modo de ofrenda, de las cuales sale un flujo de agua. Esto es en alusión a los ríos Neuquén y Limay, que recorren toda la entidad.

Luego aparece una diadema de 16 estrellas sobre el volcán. Estas estrellas están posicionadas sobre el azul del cielo y hacen referencia a los 16 departamentos en los que se divide la provincia.

Por último, un sol corona al escudo en su parte superior externa, similar al Sol de Mayo presente en la mayor parte de la iconografía argentina, pero sin incluir los rasgos faciales presentes en la bandera nacional.

Aparecen también dos ramas de laureles a los lados izquierdo y derecho, en la parte inferior externa del hexágono.

Los laureles tradicionalmente representan la libertad, pero en este diseño plano y en color dorado también recuerdan a los símbolos de los pilotos, lo cual no sería de extrañar en el caso de Aldo, quien era piloto.

Referencias

  1. Gobierno de la Provincia de Neuquén – Símbolos provinciales: w2.neuquen.gov.ar
  2. Sitio web de Mario Aldo Mastice: marioaldomastice.wordpress.com