Filosofía

Estoicismo: qué es, origen, principios, representantes


¿Qué es el estoicismo?

El estoicismo es una corriente filosófica nacida en la Antigua Grecia alrededor del año 300 antes de la era común. Su fundador, Zenón de Citio, se inspiró en la obra de los filósofos Heráclito, Sócrates y Diógenes de Sínope.

El objetivo del estoicismo es guiar al ser humano a la felicidad, solo que esta última no se entiende como placer, riqueza o poder, sino como la práctica constante de la virtud y la razón para tomar las decisiones más justas y convenientes.

Para el estoico, el universo es una estructura organizada y regida por la racionalidad. Asimismo el humano, que forma parte de ella, debe conducir sus actos por el camino de la razón y el sentido común. De esta manera podrá afrontar los acontecimientos de la vida con serenidad.

Si bien nació en Grecia, el estoicismo tuvo su época dorada durante el Imperio romano. A este período histórico pertenecen sus más conocidos representantes: Séneca, Epicteto y Marco Aurelio.

Origen

El estoicismo surgió en Atenas a finales del siglo 4 antes de la era común.

Zenón de Citio, su fundador, nació en la isla de Chipre en el 332 antes de la era común y en su juventud se trasladó a Atenas. Allí profundizó en la obra de los principales filósofos griegos: Heráclito, Platón, Sócrates, entre otros.

Se interesó por la medicina y la astronomía, y también se nutrió de la discusión con otras corrientes filosóficas de su tiempo, como el cinismo y el epicureísmo.

Zenón comenzó a enseñar el estoicismo en el ágora, es decir, en la plaza principal de Atenas. La mayoría de sus seguidores eran jóvenes que veían en él un ejemplo de cómo se debía vivir la vida.

Estoicismo antiguo

Con la muerte de Zenón, Cleantes de Asos (muerto en 232 antes de nuestra era) se convirtió en el líder de la escuela estoica. Escribió numerosas obras con las cuales impulsó los estudios de lógica y dio al estoicismo una dimensión religiosa al afirmar que el fuego es el origen de todo lo real.

Más tarde el filósofo Crisipo (280-206) se dedicó a poner en orden y a dar coherencia al conjunto de los pensamientos de Zenón y de Cleantes. Su obra es amplia: al menos 705 rollos de papiro. Con él concluye el primer período de la filosofía estoica.

Estoicismo medio

El estoicismo llegó a Roma con Panecio de Rodas (185-110). Este filósofo se relacionó estrechamente con los políticos romanos y adaptó el estoicismo a la mentalidad práctica que reinaba en el imperio. Por este camino llegó a renunciar al ideal de convertirse en un gran sabio y se dedicó a pensar en los problemas cotidianos de la gente común.

Estoicismo tardío

Es el período dorado del estoicismo. Sobre la base heredada de Panecio se levantaron los tres más importantes pensadores estoicos: Séneca, Epicteto y Marco Aurelio.

Tienen en común un profundo interés por la ética, es decir, la reflexión sobre cuál es la forma más adecuada de actuar y de vivir la vida. Como Panecio, son prácticos y rechazan el pensamiento teórico y abstracto.

Quieren ser como guías espirituales que ayuden a sus lectores a realizar en sus vidas el ideal estoico de virtud, racionalidad y felicidad.

Principios del estoicismo

  1. El universo está organizado según las leyes de la razón.
  2. No hay nada en la conciencia que no haya estado antes en los sentidos.
  3. Se deben controlar las emociones y las pasiones.
  4. Es necesario buscar la impasibilidad y la serenidad.
  5. Aspirar a la virtud y a la racionalidad. Ambas juntas hacen la felicidad.
  6. Se cree en la bondad humana y en el sentido del universo.
  7. La cooperación entre las personas es posible.

Representantes

Lucio Anneo Séneca (4-65)

Nació en Córdoba, al sur de la actual España, y tuvo una exitosa carrera como funcionario del Imperio romano: fue senador y luego preceptor de los emperadores Tiberio, Calígula, Claudio y Nerón. Se suicidó por orden de este último, tras participar en una conspiración para derrocarlo.

La obra más conocida de Séneca es Cartas a Lucilio. En ellas reflexiona sobre la voluntad humana, las pasiones y la educación moral.

Epicteto (50-120)

Fue un esclavo del Imperio romano. Al ser liberado, desarrolló en su filosofía el tema de la libertad y la autonomía interior.

Expulsado junto a otros filósofos por el emperador Domiciano, se trasladó a la ciudad de Nicópolis, en Grecia, donde fundó una escuela.

Enseñó la diferencia entre las cosas que están en nuestro poder, como la actitud, y las que no lo están, como el éxito en la vida, que en buena medida depende de la opinión de los demás.

Para Epicteto el humano libre es el que cultiva las cosas que están en su poder y no presta mucha importancia a lo transitorio y variable, como la opinión ajena y las luchas políticas.

Se negó a dejar por escrito su filosofía. La conocemos gracias a la obra de uno de sus discípulos, el historiador Flavio Arriano (c.89-c.75).

Marco Aurelio (121-180)

Fue emperador del Imperio romano durante los últimos 20 años de su vida. Defendió el imperio a la cabeza de su ejército contra los partos y los germanos.

Durante sus campañas militares, en la noche, escribía en soledad reflexiones personales de carácter moral inspiradas en las enseñanzas de Epicteto.

Reunidos bajo el título de Meditaciones, los pensamientos de Marco Aurelio han fascinado a lectores del mundo entero durante siglos por su sinceridad y claridad.

Ética estoica

La reflexión ética de los estoicos se encamina a responder a la siguiente pregunta: ¿qué tipo de persona hay que ser y qué tipo de vida hay que llevar?

La respuesta es que cada persona debe esforzarse por ser feliz. Pero para los estoicos la felicidad no se identifica con el placer, la riqueza, la fama o el poder. Ser feliz es conducir la vida de acuerdo con los principios de la razón y de la virtud.

Lo esencial para el estoicismo es la actitud, la cual está bajo el poder del individuo, y no los hechos externos. Asimismo, se valora la buena voluntad y las decisiones virtuosas más allá de los resultados de las mismas.

Epicureísmo y estoicismo

En muchos aspectos, el epicureísmo y el estoicismo son filosofías opuestas. Sin embargo, es importante evitar los estereotipos que muestran al epicúreo como un amante del placer desenfrenado y al estoico como un ser de hierro, sin alma ni empatía.

La realidad es un poco más compleja. Algunas diferencias y similitudes entre ambas filosofías son:

Placer versus virtud

Para el epicureísmo el placer tiene preeminencia como criterio de verdad y ético. Sin embargo, Epicuro explícitamente aconseja no dejarse llevar por placeres inmoderados y llevar una vida prudente.

Para el estoico, la verdad y la ética están regidas por la racionalidad y la virtud.

Máximo aprecio de la amistad

Ambas filosofías consideran la amistad como una de las expresiones más nobles del ser humano.

Búsqueda de la felicidad individual

Ambas filosofías buscan la felicidad. Pero el epicureísmo prefiere retirarse de la vida social y política en compañía de unas pocas amistades.

El estoicismo, por su parte, no descarta la participación en política y la dedicación a los demás como una vía para practicar la virtud y obtener felicidad.

El sufrimiento

El epicureísmo se aparta del sufrimiento, tanto físico como emocional, refugiándose en lo placentero. Para el estoicismo, el sufrimiento es producto de la ausencia de racionalidad.

Referencias

  1. Estoicismo (2010). Britannica. Enciclopedia Moderna.
  2. Cardona, J. A. (2015). Filosofía Helenística. Estoicos, epicúreos, cínicos y escépticos.
  3. Qué es el estoicismo, la filosofía de 2.000 años de antigüedad que se usa para sobrevivir al caos (2018). Tomado de bbc.com.
  4. Barranco, J. (2021). ¿Emociones negativas? El arte de vivir de manera estoica. Tomado de lavanguardia.com.