Psicología

Aprendizaje asociativo: características, ventajas y desventajas, ejemplos


El aprendizaje asociativo es una forma de aprender o de modificar la conducta que ocurre mediante la relación entre un estímulo y una respuesta o manera de actuar. En su sentido más amplio este término se usa para referirse a cualquier aprendizaje distinto a la habituación, pero en otros contextos solo se utiliza para hablar del condicionamiento clásico y operante.

El aprendizaje es uno de los procesos más importantes para los seres vivos, especialmente para los animales más evolucionados. Gracias al aprendizaje asociativo somos capaces de modificar nuestra conducta para adaptarnos al entorno, de tal manera que podemos aumentar nuestras posibilidades de sobrevivir.

Los procesos de aprendizaje asociativo fueron estudiados por primera vez por la psicología conductista. Esta disciplina se centraba en tratar de comprender nuestra conducta dejando de lado el contenido de nuestra mente. Así, los conductistas se dieron cuenta de que es posible modificar el comportamiento de un ser vivo asociando ciertas conductas a refuerzos o a castigos.

Aunque la psicología conductista ha perdido su puesto como la corriente dominante en el estudio del comportamiento humano, el aprendizaje asociativo sigue siendo una herramienta fundamental en contextos como la educación. En este artículo veremos exactamente en qué consiste y cuáles son sus beneficios.

Índice del artículo

Características del aprendizaje asociativo

– Está presente en numerosas especies

A diferencia de otros tipos de aprendizaje típicamente humanos, el asociativo está presente en prácticamente todas las especies animales complejas. De hecho, algunos experimentos apuntan a que incluso ciertos tipos de insectos podrían utilizar estos mismos mecanismos para modificar su conducta, aunque aún existe cierto debate en este sentido.

El motivo por el que el aprendizaje asociativo está tan generalizado es simple: se trata del mecanismo más útil para adaptarse al entorno. Mediante sus herramientas, los animales pueden aprender muy rápidamente qué es perjudicial para ellos y qué les beneficia a nivel de su supervivencia.

– No conlleva procesos cognitivos avanzados

A diferencia de otros tipos de aprendizaje más complejos, el asociativo se produce de manera inconsciente y puede estudiarse exclusivamente desde el punto de vista del comportamiento. Así, simplemente observando las conductas del individuo y las respuestas de su entorno podemos predecir qué aprendizajes van a llevarse a cabo.

En la mayoría de ocasiones, además, el propio individuo no es consciente de aquellos cambios que está sufriendo en su conducta como consecuencia del aprendizaje asociativo. Incluso si se reflexiona sobre ello, la mayoría de las veces no somos capaces de entender por completo las asociaciones que hemos realizado sin darnos cuenta.

– Se basa en nuestros instintos

A pesar de tener multitud de aplicaciones, la base del aprendizaje asociativo es en realidad muy simple. Mediante diferentes técnicas, el individuo relaciona una respuesta innata positiva o negativa con un estímulo que a priori no le provoca ninguna reacción, de tal manera que a partir de ese momento pasa a causar una respuesta que antes no existía.

Por ejemplo, mediante un proceso de refuerzo es posible conseguir que un animal adquiera conductas que antes no formaban parte de su comportamiento habitual, como por ejemplo lograr que un perro haga sus necesidades en un arenero. Para ello será necesario otorgarle premios cada vez que actúe como nosotros queremos, hasta que asocie el hecho de usar el arenero con algo positivo.

Los refuerzos y castigos deben estar basados en los instintos del animal para ser efectivos. Así, generalmente los premios están relacionados con elementos como la atención positiva, la comida o el sexo; los castigos tienen que ver con el dolor físico o el emocional.

– Forma aprendizajes muy duraderos

El aprendizaje asociativo es muy diferente a otros procesos de cambio de conducta o de adquisición del conocimiento. Por un lado, los aprendizajes que se consiguen mediante este método se adquieren de manera muy lenta, ya que es necesario repetir varias veces las asociaciones hasta que el organismo las internaliza.

Por contraposición, una vez que se ha realizado un nuevo aprendizaje mediante este método es muy complicado deshacerse del mismo. Los cambios de conducta conseguidos con el aprendizaje asociativo suelen durar muchísimo tiempo, especialmente cuando se han usado los estímulos adecuados.

El ejemplo más extremo de esto es el de las fobias. Cuando una persona asocia emociones muy negativas a algo en principio inofensivo o neutral, volverá a sentir un gran malestar cada vez que se vea expuesto a ello. A menudo las fobias tienen que ser tratadas en un contexto de terapia, ya que no desaparecen por sí solas.

Tipos de aprendizaje asociativo

Dentro de los tipos de aprendizaje que existen, el asociativo es uno de los que más procesos diferentes incluyen. Generalmente se habla de que todos los tipos de cambios de conducta que pueden darse forman parte de esta categoría, con la excepción de la habituación. Aun así, algunos autores también nombran otros procesos que estarían fuera de esta clasificación.

En cualquier caso, la mayoría de autores consideran que los procesos básicos dentro del aprendizaje asociativo pertenecen a dos categorías: el condicionamiento clásico y el operante.

Condicionamiento clásico

En el condicionamiento clásico el individuo relaciona un estímulo que en principio no le provoca una respuesta con otro que sí lo hace, a menudo de manera no intencionada.

Condicionamiento operante

condicionamiento operante con rata

En el condicionamiento operante, por otro lado, el individuo aumenta o disminuye sus probabilidades de llevar a cabo un comportamiento concreto en función de si recibe refuerzos o castigos cuando lo ejecuta. Este segundo tipo de aprendizaje significativo es el más complejo y puede ocurrir en un gran número de contextos distintos.

Ventajas y desventajas

Al igual que el resto de métodos para adquirir conductas y conocimientos nuevos, el aprendizaje asociativo tiene tanto ventajas como desventajas. A continuación veremos cuáles son las más importantes.

– Ventajas

Es universal

Muchos de los métodos de aprendizaje modernos dependen en gran medida de factores que diferencian a unas personas de otras, como la cultura, la personalidad, la motivación o los conocimientos y actitudes previas. Por el contrario, el aprendizaje asociativo tiene la gran ventaja de que funciona por igual con todos los individuos.

Así, un sistema de aprendizaje basado en refuerzos y castigos será igual de útil para personas de cualquier edad, etnia, cultura, ideas y capacidades intelectuales. De esta manera, usando las técnicas extraídas del mismo se pueden idear métodos educativos muy efectivos y que se pueden aplicar en contextos diferentes.

Produce aprendizajes duraderos

Como ya hemos visto, una de las principales ventajas del aprendizaje asociativo es que los cambios de conducta que produce tienden a mantenerse en el tiempo y a ser difíciles de eliminar. Esto, si se utiliza de manera adecuada, puede ser extremadamente útil.

Por ejemplo, una de las aplicaciones más clásicas de este tipo de aprendizaje es el tratamiento de la enuresis (el hecho de que los niños orinen en la cama mientras duermen). Si se realiza adecuadamente, una sola intervención con los métodos asociativos es suficiente para acabar con el problema.

Está muy estudiado

Debido a su universalidad y a la sencillez de sus mecanismos de acción, el aprendizaje asociativo es uno de los sistemas de cambio de conducta y adquisición del conocimiento sobre los que más información tenemos. La investigación sobre el mismo fue una de las primeras que se realizaron en el campo de la psicología científica.

Así, hoy en día cualquier persona que quiera realizar una intervención mediante el aprendizaje asociativo tiene una gran cantidad de información sobre el tema que le permitirá conocer todos los factores relacionados con esta técnica y cómo afectan a los cambios que se quieren conseguir.

Es útil en muchos contextos

Debido a la universalidad de sus principios, el aprendizaje asociativo puede utilizarse en muchos contextos diferentes sin apenas tener que ser adaptado. Así, el ámbito más común en el que podemos verlo es el educativo; pero también podemos encontrarlo en muchos otros sitios.

Por ejemplo, el aprendizaje asociativo es extremadamente útil como herramienta terapéutica para tratar ciertas clases de trastornos psicológicos. Problemas como las fobias o los trastornos comportamentales pueden resolverse muy fácilmente con intervenciones basadas en este tipo de cambio de conducta.

– Desventajas

Algunas de sus herramientas son poco éticas

Una de las mayores críticas al aprendizaje asociativo es que su uso en determinados contextos y situaciones puede generar situaciones poco éticas. Por este motivo, algunas de sus herramientas son evitadas en ciertos contextos, mientras que otras directamente han caído en el desuso.

Por ejemplo, el uso de castigos en un contexto de terapia o de educación está prohibido en muchos países, incluso aunque su efectividad sea muy superior al uso de refuerzos. Por otra parte, usar un proceso de aprendizaje asociativo sin el conocimiento del sujeto está muy mal visto por parte de la mayoría de profesionales.

No es útil para todos los tipos de aprendizaje

Aunque el aprendizaje asociativo sea una herramienta muy poderosa en determinados contextos, existen algunas situaciones en las que no tiene demasiada utilidad. Esto se debe a la naturaleza de los cambios que puede provocar en los individuos.

El aprendizaje asociativo es muy útil para modificar conductas o actitudes, pero no puede ayudar a la hora de adquirir conocimientos explícitos o de memorizar conceptos. Por eso, dentro de las aulas tradicionales solo puede utilizarse de manera indirecta.

Ejemplos de aprendizaje asociativo

El aprendizaje asociativo es una de las herramientas más importantes de nuestro cerebro para relacionarse con el entorno, lo que significa que podemos encontrarlo en multitud de situaciones cotidianas. Algunos ejemplos de aprendizaje asociativo son:

– Cuando una persona se encuentra mal después de probar determinada comida, aprende rápidamente a evitarla. Este tipo de aprendizaje se denomina “aversión adquirida al sabor”.

– Un perro aprende que al sentarse recibirá una galleta. Asocia sentarse con la galleta.

– Un niño asocia sacar malas calificaciones con un castigo.

– En un contexto más formal, ya hemos visto que el aprendizaje asociativo puede utilizarse para tratar ciertos problemas como las fobias o la falta de motivación. Mediante el uso de refuerzos y castigos es posible modificar de forma duradera los comportamientos y las actitudes de una persona. Por ejemplo, se le enseña a un niño que después de hacer las tareas recibirá una merienda.

Referencias

  1. “Associative learning: definition, theory and examples” en: Study. Recuperado en: 18 Mayo 2020 de Study: study.com.
  2. “Associative learning” en: Britannica. Recuperado en: 18 Mayo 2020 de Britannica: britannica.com.
  3. “Associative Learning: Learning from association or relating several things” en: Cognifit. Recuperado en: 18 Mayo 2020 de Cognifit: blog.cognifit.com.
  4. “Associative learning” en: Science Direct. Recuperado en: 18 Mayo 2020 de Science Direct: sciencedirect.com.
  5. “Learning” en: Wikipedia. Recuperado en: 18 Mayo 2020 de Wikipedia: en.wikipedia.org.