Lectura reflexiva: qué es, características, cómo se hace, ejemplos
¿Qué es la lectura reflexiva?
La lectura reflexiva es una técnica de lectura que se centra en la comprensión de textos a un nivel más profundo. Al leer reflexivamente, el lector toma el tiempo para analizar y evaluar el texto, así como sus propias reacciones e interpretaciones.
Este tipo de lectura puede ayudar a los lectores a lidiar con el material de manera más efectiva y mejorar su comprensión. También puede ayudarles a desarrollar una voz crítica y pensamiento independiente.
A menudo, los docentes animan a sus alumnos a llevar a cabo la lectura reflexiva como parte de un ejercicio de análisis o ensayo. Sin embargo, también puede hacerse en un contexto informal, como parte de un diario personal o blog.
Características de la lectura reflexiva
– Se basa en el principio de que el lector puede aprender mejor si reflexiona sobre lo que está leyendo.
– Requiere que el lector tenga una base de conocimientos previos sobre el tema para poder realizar un análisis más profundo.
– Es una actividad que se realiza durante y después de leer un texto.
– Uno de los propósitos de la lectura reflexiva es pensar críticamente sobre el texto y conectarlo con la propia experiencia del lector.
– Requiere que el lector preste atención a su propia respuesta emotiva al texto, así como a sus reacciones intelectuales.
– Al leer de forma reflexiva, el lector será capaz de analizar el texto desde diversos puntos de vista y extraer significado del mismo.
Importancia de la lectura reflexiva
La importancia de la lectura reflexiva radica en su capacidad para fomentar el pensamiento crítico. Al leer de forma reflexiva, nos obligamos a cuestionar lo que estamos leyendo y a buscar nuevas perspectivas.
De esta forma, la lectura reflexiva nos ayuda a mantener nuestro cerebro activo y nos permite darnos cuenta de nuevas ideas y conceptos.
A medida que nuestra comprensión de los textos se vuelve más profunda, también mejora nuestra capacidad para expresar nuestros propios pensamientos de forma clara y coherente.
¿Cómo se hace una lectura reflexiva?
Paso a paso para hacer una lectura reflexiva:
- Antes de leer, piensa en lo que quieres obtener de la lectura. ¿Estás buscando información específica? ¿O simplemente quieres entender el texto de manera general? Establecer esto antes de comenzar te ayudará a concentrarte y hacer la lectura más efectiva.
- Lee el texto atentamente. No te saltes ningún párrafo o sección. Si hay algo que no entiendas, busca una explicación en otro lugar o pregunta a un experto.
- Mientras lees, toma notas para resaltar los puntos principales y hacer anotaciones sobre tus propias reacciones y pensamientos. Esto te ayudará a hacer una lectura reflexiva más profunda después.
- Cuando hayas terminado de leer, piensa en lo que has aprendido. ¿El texto te ha dado nuevas ideas o perspectivas? ¿Estás de acuerdo con lo que dice el autor? ¿Qué partes del texto te han resultado más interesantes?
Técnicas de lectura reflexiva
A continuación se presentan tres técnicas de lectura reflexiva que pueden ser útiles para los estudiantes:
- Surveying: escanear el material para tener una idea general de su contenido.
- Questioning: formular preguntas sobre lo que se leyó.
- Reading: leer el texto con atención.
- Reciting: resumir lo que se leyó en forma de frases o conceptos clave.
- Reviewing: revisar lo que se leyó y volver a leer las partes que no se comprendieron.
Ventajas de la lectura reflexiva
– Puede ayudar a los lectores a mejorar sus habilidades de comprensión y crítica, y también les permitirá pensar más profundamente acerca de las obras que leen.
– Al tomar el tiempo para considerar cuestiones como el tema, el argumento y la forma en que se presentan los materiales, los lectores pueden obtener una comprensión más completa de lo que están leyendo.
– La reflexión también les permite confrontar sus propias ideas y preconcepciones acerca de un texto, y considerar otras perspectivas.
– La reflexión profunda sobre lo que se lee puede conducir a un mayor entendimiento del mundo y de uno mismo.
– La lectura reflexiva también puede ser útil para el autor del texto. Al recibir feedback de los lectores, el autor puede considerar estos puntos de vista y, en consecuencia, mejorar el texto para futuras ediciones.
Ejemplos de lectura reflexiva
- Preguntarse qué está tratando de decir el autor y si se está de acuerdo o no con sus argumentos.
- Analizar cómo el contenido del texto se relaciona con las propias experiencias y puntos de vista del lector.
- Hacer preguntas sobre cómo el texto podría aplicarse a situaciones en la vida real.
- Pensar críticamente acerca de los supuestos que presenta el texto.
- Reflexionar sobre lo que ha aprendido después de leer el texto.
Examinar el lenguaje utilizado en el texto y si es efectivo para transmitir el mensaje del autor.