¿Qué es el Hombre de Chivateros?
El hombre de Chivateros fueron individuos que habitaron durante la Era Lítica en lo que hoy es el sitio arqueológico que lleva ese mismo nombre. Chivateros fue un área común de trabajo para los hombres de la prehistoria en la zona costera de Perú, específicamente en la ciudad de Lima.
Fueron el arqueólogo Edward P. Lanning y su colega Thomas C. Patterson, quienes en la década de 1960 hallaron los restos de dicha civilización. Los estudios del terreno y las investigaciones antropológicas revelaron que los hombres Chivateros existieron en los años 9.500 a.C. aproximadamente.
Estos mismos arqueólogos descubrieron que la zona de Chivateros se extendía a períodos prehistóricos que datan del año 12.000 a.C.
El hombre de Chivateros era un arduo trabajador que forjaba herramientas y armas a partir de piedra cuarcita. Desde cuchillos y puntas de lanza hasta hachas de mano.
Sin embargo, algunos historiadores afirman que el hombre de Chivateros vivió en los años 7.000 a.C. y que en vez de forjar armas recolectaban materia prima para hacer puntas de Paiján.
Índice del artículo
- 1 Características históricas del hombre de Chivateros
- 2 ¿Cómo trabajaba la piedra cuarcita el hombre de Chivateros?
- 3 Referencias
Numerosos estudios arqueológicos e importantes investigaciones antropológicas afirman que el hombre de Chivateros fue uno de los primeros pobladores de Perú e incluso de América.
Esto ha despertado el interés de estudiosos que han recopilado las características principales del hombre de Chivateros.
Aunque la denominación de hombre de Chivateros parece hacer referencia al asentamiento de una población común, la región hoy conocida como Chivateros se ha descrito como un “taller lítico” por los historiadores y antropólogos que estudian el tema.
Según las evidencias, se ha determinado que los hombres de la época no vivían en esa zona.
El hombre de Chivateros no podía pescar, cazar animales o sobrevivir en la zona de Chivateros. Tampoco había ninguna estructura o evidencia de ningún tipo de arquitectura en la zona.
Por ello, el hombre de Chivateros se presenta como un nómada. Se presume que la población de Chivateros iba de un lugar a otro en busca de alimento, fuese en forma de animales, frutas o flores comestibles.
Se movían de un lugar al otro en grupos de varios hombres para estar alerta a posibles amenazas y lograr llevar más comida a sus chozas.
Chivateros se presentó entonces como un taller donde los hombres podían encontrar materia prima para fabricar herramientas y armas.
El material principal que usaban era la piedra cuarcita y los principales artefactos construidos eran puntas pedunculadas, es decir, piedras talladas en forma de triángulos (mayormente) o bifaciales, para las lanzas o arcos.
La actual administradora del departamento de líticos del Museo nacional de Arqueología, Antropología e Historia del Perú, Verónica Ortiz, afirma que los hombres que habitaron las tierras de Chivateros provenían del norte, pero debido a una súbita alza en los niveles del mar por causa del derretimiento de glaciares tuvieron que migrar hacia el sur.
Los hombres de Chivateros hallaron buen lugar geográfico para suplir sus necesidades junto a las orillas del río Chillón.
Allí se establecieron porque podían pescar, cazar y recolectar frutas y flores comestibles de las zonas aledañas. En ese lugar se encontraban fuera del peligro que los había hecho migrar.
Por otra parte, en Chivateros tenían la oportunidad de fabricar armas y utensilios, tanto para cazar y combatir como para comer, recolectar, picar, entre otras.
Se han encontrado alrededor de 50 asentamientos en Chivateros. Además de múltiples talleres de piedra y canteras donde se obtenía la materia prima.
El hombre de Chivateros primero creó raspadores unifaciales, es decir, piedras cóncavas en forma de hoja (lo más parecido a una pala) con el objetivo de usarlas para cavar.
Los raspadores se utilizaron en los primeros años de asentamiento para minar la piedra cuarcita con la que luego fabricarían objetos más complicados.
El hombre de Chivateros era un explorador nato, ingenioso e inteligente por su ansia de sobrevivencia. Por ello, un descubrimiento llevó a otro y pronto las invenciones se desarrollaron en busca de facilitar la vida cotidiana.
El Período Holoceno, plagado de derretimientos de glaciares fue uno de los períodos más difíciles para el hombre de Chivateros por causa de la extinción de mucha fauna y flora que ellos utilizaban como alimento.
El instinto de sobrevivencia llevó al hombre de Chivateros a crear armas para dar caza a los animales salvajes del entorno, que para entonces, eran rápidos y ágiles.
La solución fue la creación de armamento, principalmente lanzas y flechas. Entonces la segunda época de los hombres de Chivateros comenzó.
Los hombres de Chivateros se vieron en la necesidad de hacer herramientas, no sólo para recolección, sino también para la caza pues si esto no se hacía entonces morirían de hambre.
El modus operandi de los hombres de Chivateros consistía en la extracción de piedra cuarcita y la realización de un tipo de pre-forma de la herramienta o arma.
Es decir, Chivateros funcionaba como un centro de extracción y trabajo. Luego de extraída y moldeada, la piedra cuarcita mediante el método de percusión, esta era llevada al lugar de asentamiento.
En el lugar de asentamiento las piedras pre-formadas eran pulidas y se unían con otros componentes para formar el producto final.
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El hombre de Chivateros utilizó dos técnicas para trabajar la piedra cuarcita.
Consistía en golpear el centro de la piedra con un objeto mucho más duro que la propia piedra cuarcita.
De esta manera, el otro lado de la zona donde se hacía el golpe (percusión) se desprendía en una especie de lámina, o incluso un pedazo de piedra, que aunque grande, fuera filoso y útil para cortar y cazar.
A esa lámina o pedazo de piedra que se desprendía, se le conocía como lasca. Y por lo general era pasado por un segundo proceso antes de usarse.
Consistía en aplicar presión con objetos pesados a los costados de una lasca. De esta manera se le daba forma.
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