Lengua y literatura

¿Qué son las Corrientes Historiográficas?


Las corrientes historiográficas son orientaciones para abordar el estudio de la historia como ciencia, desarrollas a partir del siglo XIX. Si bien en el siglo V a.C. Heródoto se refirió a la historia como acto humano de narrar hechos del pasado, fue solo hasta finales del siglo XVIII cuando los filósofos de la época aceptaron que la historia podría estudiarse como cualquier otra ciencia, a través de un método.

La ciencia histórica nació en Alemania, se extendió a Francia y de ahí al resto de Europa. Hasta el momento los historiadores no tenían una función clara en la sociedad y se limitaban a llevar los archivos o documentos políticos y eclesiásticos.

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Considerar la historia como una ciencia hizo que quienes se dedicaran a escribirla no se conformaran tan solo con los hechos tal y como ocurrían, sino que debían estudiar las causas, las circunstancias y la influencia de los individuos o colectivos en dichos sucesos.

Con la nueva mirada de la historia como ciencia, los historiadores se convirtieron en una clase profesional y se fueron estableciendo diversas teorías y métodos que hoy se conocen como corrientes historiográficas.

Entre las corrientes más reconocidas se encuentran el positivismo, el historicismo, el materialismo histórico, el estructuralismo, la escuela francesa de los Annales y un poco menos sonada, el cuantitativismo.

Principales corrientes historiográficas

Positivismo

Esta corriente historiográfica inició en Francia en el siglo XIX, aunque fue en Alemania en donde tuvo a sus principales representantes. Afirmaba que para abordar la historia era necesario buscar el dato real, preciso y cierto, y por esto insistía en encontrar fuentes de primera mano.

La lectura de la historia para el positivismo debía hacerse de forma lineal, un hecho ocurría tras otro en un progreso continuo. La historia como ciencia estaba ligada a la evolución humana y cualquier hecho que marcara un retroceso, sencillamente no existía.

Otro aspecto relevante en esta corriente historiográfica es que la investigación consistía en acumular datos; para el historiador era imposible interpretar la información recolectada porque esto presuponía un error científico.

La acumulación de datos permitía entonces llegar a leyes históricas universalmente válidas y comprobables.

La forma de aprender la historia desde esta corriente era a través de una relación unidireccional de los hechos; sencillamente un hecho producía uno nuevo.

Materialismo histórico

El materialismo histórico es una corriente que llega con Karl Marx, pues considera que la historia no está constituida tan solo por hechos, ni por categorías, ni por los protagonistas de estos hechos.

Para Marx, la historia no es otra cosa que el resultado de las relaciones de poder entre quienes lo poseen y las clases subordinadas; a la vez estas relaciones están mediadas por los modos de producción.

La historia por tanto depende de quién sustenta los modos de producción y cómo se establecen las relaciones de poder, y solo con este enfoque puede investigarse y escribirse.

El materialismo histórico relaciona el ser humano con su entorno, entiende la manera en que los individuos satisfacen sus necesidades básicas y en general estudia todo lo que implica vivir en sociedad.

El materialismo histórico aceptó la economía y la sociología para su objeto de estudio.

Estructuralismo

Esta corriente historiográfica es muy cercana al materialismo histórico, pero se interesa por los hechos que duran en el tiempo.

Desde el estructuralismo un hecho histórico se debe estudiar como un todo, como un sistema que posee una estructura; el tiempo se encarga de cambiar lentamente dicha estructura pero lo hace a través de sucesos coyunturales que ocurren en corto tiempo afectando el sistema.

No se interesa por los hechos singulares que caracterizan la narrativa tradicional ni tampoco los hechos excepcionales; prefiere en cambio los hechos cotidianos que se repiten una y otra vez.

Historicismo

El historicismo considera toda la realidad como el producto de un devenir histórico, por ello resulta fundamental el pasado. Para el estudio de la historia prefiere los documentos escritos oficiales y no le interesa la interpretación del investigador.

En esta corriente historiográfica, la historia es el punto de partida del desarrollo del hombre y por lo tanto cualquier hecho bien sea técnico, artístico o político, es una hecho histórico a través del cual se puede comprender la naturaleza humana.

El conocimiento por tanto resulta de las características propias de cada individuo y de las condiciones sociales. Así, el historicismo no tiene en cuenta verdades universales sencillamente porque cada hombre tiene su propia realidad.

Escuela de los Annales

Escuela de los Annales

La Escuela de los Annales nació en Francia y rescató al hombre como el protagonista de la  historia.  De esta manera se hizo necesario el uso de ciencias como la antropología, la economía, la geografía y la sociología para la comprensión de los hechos históricos.

Bajo esta nueva mirada fue ampliado el concepto de documento histórico, agregando a los escritos, testimonios orales, imágenes y restos arqueológicos.

Cuantitativismo

Esta corriente nació en la década de los años 80s del siglo XX y marcó dos tendencias en el estudio de la historia:

1-La cliometría, que utiliza modelos cuantitativos para la explicación del pasado.

2-La historia estructural-cuantitativista, que utiliza la estadística para entender el comportamiento de los hechos históricos en periodos determinados.

Con la llegada del siglo XXI las anteriores corrientes se han desdibujado y existe una tendencia a volver a la narrativa, rompiendo los esquemas rígidos y formales y en coherencia con la forma que han tomado las ciencias bajo el postmodernismo.

Referencias

  1. Hughes, P. (2010). Paradigms, methods and knowledge. Doing early childhood research: International perspectives on theory and practice2, 35-61.
  2. Iggers, G. G. (2005). Historiography in the twentieth century: From scientific objectivity to the postmodern challenge. Wesleyan University Press.
  3. Gill, S. (Ed.). (1993). Gramsci, historical materialism and international relations (Vol. 26). Cambridge University Press.
  4. Anderson, P. (2016). In the tracks of historical materialism. Verso Books.
  5. Bukharin, N. (2013). Historical materialism: A system of sociology. Routledge. p.p. 23-46.