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Las 101 Mejores Frases de Alicia en el País de las Maravillas


Te dejo las mejores frases de Alicia en el país de las maravillas y de sus personajes el Sombrerero Loco, el Gato Sonriente (de Cheshire), el Conejo Blanco, la Reina de Corazones, la Oruga Azul y muchos más.

Pueden que algunas frases te resulten sin sentido, aunque si lo analizas, todas tienen un significado interno y es que Lewis Carroll escribió su obra más conocida con mucho detenimiento.

No es cualquier cuento de ficción para niños. Se trata de una historia llena de filosofía, truismos y lecciones de vida. Todo parece absurdo, pero hay un mensaje de trasfondo que deja una impresión que no se olvida fácilmente.

Escrita en 1865 por Lewis Carroll, se ha convertido en una de las obras literarias infantiles de mayor influencia en la historia, debido a la estimulación imaginativa, sus personajes y los escenarios dotados de extrañeza e impredecibilidad. Te pueden interesar también estas frases de escritores o estas sobre la lectura.

Índice del artículo

Alicia en el país de las maravillas (1951) – Película de Disney

-Ese es el problema conmigo. Doy muy buenos consejos, pero rara vez los sigo. -Alicia.

-¿Quién decide qué es lo que es apropiado? ¿Y si decidiesen que ponerse un salmón en la cabeza, lo usarías? -Oruga.

-Algunos toman este camino. Algunos toman este otro. Pero en lo que a mí respecta, personalmente prefiero el atajo. -Gato de Cheshire/Sonriente.

-¡Oh, pero ese es el punto! ¡Si tú no piensas, no debes de hablar! -Liebre de marzo.

-¡Eso es suficiente! ¡Córtenles la cabeza! -Reina de corazones.

-Si conocieras el tiempo tan bien como yo, no hablarías de perderlo. -Conejo blanco.

-¿Por qué siempre eres demasiado bajo o demasiado alto? -Sombrerero loco.

-Un autor no entiende necesariamente el significado de su propia historia mejor que los demás.

-Cuando llegue a casa debo de escribir un libro acerca de este lugar. -Alicia.

-¡Qué pequeño es este mundo! -Sombrero loco.

-Un lado te hará crecer y el otro empequeñecer. -Oruga.

-Nunca nos hacen cumplidos, ¡debes de tomar una taza de té! -Sombrerero loco.

-Uno puede aprender muchas cosas de las flores ¡Me parece que podrían aprender unos cuantos modales! -Alicia.

-¡Tengo una excelente idea! Hay que cambiar de tema. -Liebre de marzo.

-Te lo advierto niña… si me pongo de mal humor, ¡vas a perder la cabeza! ¿Entiendes? -Reina de corazones.

-¿Quién ha estado pintando mis rosas rojas? -Reina de corazones.

-La curiosidad frecuentemente conduce a los problemas. -Alicia.

-Con gran razón llegaste tarde. Este reloj está exactamente dos días atrasado. -Sombrerero loco.

-Si yo estuviera buscando al conejo blanco, le preguntaría al sombrerero loco. O puedes preguntarle a la liebre de marzo, en esa dirección. -Gato de Cheshire/Sonriente.

-¿Qué te parece una linda taza de café? -Liebre de marzo.

-Sería genial si algo tuviera sentido para hacer un cambio. -Alicia.

-¡Es muy grosero sentarse sin ser invitado! -Liebre de marzo.

-De todas las tonterías a las que he asistido, esta es la fiesta del té más tonta de toda mi vida. -Alicia.

-¡Silencio! -Reina de corazones.

-¡Esta es una fiesta de no-cumpleaños! -Sombrerero loco.

-Me pregunto hacia dónde tengo que ir. -Alicia.

Libros Alicia en el país de las maravillas y Las aventuras de Alicia en el país de las maravillas: A través del espejo

-Seguro que llegarás a alguna parte si caminas lo suficiente. -Gato de Cheshire/Sonriente.

-No hay nada como comer cuando estás a punto de desmayarte. -Alicia.

-¿Serías tan amable de decirme qué camino debo tomar desde aquí? -Alicia.

-¿Quién rayos soy? Ah, ese es el gran acertijo. -Alicia.

-Qué divertido sería que yo me convirtiera en una de esas personas que caminan con sus cabezas hacia abajo. Las antipatías, creo yo. -Alicia.

-Cuando no puedas ver la luz, me sentaré contigo en la oscuridad. -Sombrerero loco.

-¡Nada es imposible! -Perilla de la puerta.

-¡Desearía no haber tomado demasiado de eso! -Alicia.

-La imaginación es la única arma en la guerra contra la realidad. -Gato de Cheshire/Sonriente.

-¿En qué se parece un cuervo a un escritorio? -Sombrerero loco.

-Tal vez no comprende el inglés. Me atrevería a decir que es un ratón francés, como Guillermo el Conquistador. -Alicia.

-¡No puedo creerlo! No vale la pena tratar de creer, nadie puede creer cosas imposibles. -Alicia.

-¡Me gustaría no haber llorado tanto! Debo ser castigada ahora por eso, supongo, ¡siendo ahogada en mis propias lágrimas! ¡Eso será ciertamente algo extraño! -Alicia.

-No fue muy civilizado de tu parte sentarte sin ser invitada. -Liebre de marzo.

-Me pregunto si habré cambiado por la noche. Déjame pensar: ¿era la misma cuando me levanté esta mañana? Casi pienso recordar sentirme un poco diferente. -Alicia.

-¿Ya resolviste el acertijo? -Sombrerero loco.

-Si cada quien se ocupara de sus asuntos, el mundo giraría más rápido de lo que lo hace ahora. -Duquesa.

-¡Qué bien! Usualmente he visto gatos sin una sonrisa, ¿pero una sonrisa sin un gato? ¡Esa es la cosa más curiosa que he visto en toda mi vida! -Alice.

-Un gato puede voltear a ver al rey. Lo leí en algún libro, pero no recuerdo dónde. -Alicia.

-¡Habla inglés! No conozco el significado de la mitad de esas palabrotas, y, por si fuera poco, ¡no creo que tú tampoco lo sepas! -Aguilucho.

-Es un pobre tipo de memoria que solo funciona al revés. -Reina de corazones.

-Estás totalmente loco. Pero te diré un secreto. Las mejores personas lo están. -Alicia.

-Ningún pez sabio iría a ningún lado sin una marsopa. -Falsa tortuga.

-Te refieres a que no puedes aceptar menos. Es muy fácil aceptar más que nada. -El sombrero loco.

-Lo primero que debo de hacer es volver a mi tamaño correcto; y la segunda cosa es encontrar mi camino hacia ese bonito jardín. -Alicia.

-Así que no estaba soñando después de todo, a menos que todos seamos parte de un mismo sueño. Solo espero que no sea del rey rojo. No me gusta pertenecer a los sueños de otra persona. -Alicia.

-Si tú crees en mí, yo creeré en ti. ¿Es un trato? -Unicornio.

-Comienza al principio, y luego sigue hasta que llegues al final. Luego para. -Rey de corazones.

-Si tuviera un mundo propio, nada tendría sentido. Nada sería lo que es porque todo sería lo que no es. Y viceversa, lo que es, no sería. Y lo que no sería, sería ¿Lo ves? -Alicia.

-No tengo la más mínima idea. -Sombrerero loco.

-No, no, niña. Todo tiene una moraleja si eres capaz de encontrarla. -Duquesa.

-¡Córtenle la cabeza! -Reina de corazones.

-¡Oh, mis orejas y bigotes! ¡Qué tarde se está haciendo! -Conejo blanco.

-¿Sabes cuál es el problema con este mundo? Todos quieren una solución mágica a su problema y todo el mundo se rehúsa a creer en la magia. -Sombrerero loco.

-Primero la sentencia y luego el veredicto. -Reina de corazones.

-Todo el mundo ha ganado, y todos deben de tener premios. -Dodo.

-Sí, ¡así es! Siempre es hora del té. -Sombrerero loco.

-¿No envejecer más de lo que estoy ahora? Eso sería un alivio, de cierta manera, no ser nunca una mujer vieja, pero ¡siempre tener lecciones que aprender! ¡Oh, eso no me gustaría! -Alicia.

-Es mejor ser temido que amado. -Reina de corazones.

-Yo no creo… -Alicia.
-Entonces no debes de hablar. -Sombrerero loco.

-Me pregunto, ¿cuántos kilómetros habré caído esta vez? Debo de estar acercándome al centro de la Tierra. -Alicia.

-Ahora no puedo hacer nada más, sea lo que sea que pase. ¿Qué será de mí? -Alicia.

-Es un hábito muy inconveniente el de los gatitos, donde no importa lo que se les diga, siempre ronronean. Si ronronearan para asentir y maullaran para negar, o algo por el estilo, ¡uno podría mantener una conversación! -Alicia.

-¡Oh, es el amor, es el amor el que hace girar al mundo! -Duquesa.

-Cuida de los sentidos y los sonidos se harán cargo de sí mismos. -Duquesa.

-A los locos hay que tratarlos con cariño. -Liebre de marzo.

-La gente aquí es terriblemente adepta a decapitar a las personas; la gran maravilla es, ¡que no queda nadie vivo! -Alicia.

-No creo que ellos estén jugando del todo justo. Y se pelean tan terriblemente que no pueden escucharse el uno al otro hablar, y no parecen tener ninguna regla en particular, o al menos nadie las sigue. -Alicia.

-No puedo ver el momento en que él termine si no comienza a hacerlo. -Alice.

-No me gusta como luce nada de esto. Sin embargo, puede besar mi mano, si así lo quiere. -Rey de corazones.

-Algunas veces he llegado a creer hasta seis cosas imposibles antes del desayuno. -Reina blanca.

-Ni siquiera sabía que los gatos podían sonreír. -Alicia.

-¡No, no! Las aventuras primero, las explicaciones toman demasiado tiempo. -Grifo.

-Entre más prisa llevo, más atrás me quedo. -Conejo blanco.

-¡Qué intrigantes son estos cambios! Nunca estaré segura de quién seré, de un minuto al siguiente. -Alicia.

-Cuando solía leer cuentos de hadas, deseaba que me ocurrieran ese tipo de cosas que nunca sucedían, ¡y ahora estoy en medio de una de ellas! -Alicia.

-No tiene caso regresar al ayer, porque en ese momento era una persona diferente. -Alicia.

-Me temo que no puedo explicarme a mí misma, señor. No soy yo, ¿lo ve? -Alicia.

-Cariño, aquí debemos de correr tan rápido como podamos, tan solo para quedarnos donde estamos. Y si quieres ir a algún lado, necesitas correr el doble de rápido. -Reina de corazones.

-¿Qué tanto tiempo es por siempre? -Alicia.
-Algunas veces, solo un segundo. -Conejo blanco.

-Bien, nunca antes lo había escuchado, pero suena como a sentido poco común. -Falsa tortuga.

-No puedo casi respirar. No puedo evitarlo. […] No digas ridiculeces, sabes que tú también estás creciendo. -Alicia.

-Oh, gatito, qué lindo sería si tan solo pudiera pasar a la casa del espejo. ¡Estoy segura que tiene cosas bellas en ella! ¡Pretendamos que tiene una manera de entrar a ella! -Alicia.

-No soy extraño, raro, distinto, ni loco, mi realidad simplemente es diferente a la tuya. -Gato de Cheshire/Sonriente.

-Solo algo es imposible si así tú lo crees. -Sombrerero loco.

-Supongo que tengo que comer o tomar uno o el otro; pero la gran pregunta es: ¿cuál? -Alicia.

-Si no sabes hacia dónde vas, cualquier camino te puede llevar ahí. -Gato de Cheshire/Sonriente.

-Es un gran juego de ajedrez el que está siendo jugado alrededor del mundo. […] ¡Oh, que divertido es! ¡Desearía ser uno de ellos! ¡No me importaría ser un peón, si tan solo pudiera unirme, y con el pasar de la jugadas convertirme en una reina. -Alicia.

-Solo los locos equiparan el dolor con el éxito. -Gato de Cheshire/Sonriente.

-¿Y de qué sirve un libro sin ilustraciones ni conversaciones? -Alicia.

-¡La duquesa! ¡La duquesa! ¡Oh, mis queridas patas! ¡Oh, mi pelaje y bigotes! Me va a ejecutar. -Conejo blanco.

-Verás, un perro gruñe cuando está enojado y menea la cola cuando está contento. Ahora bien, yo gruño cuando estoy enojado y meneo la cola cuando estoy enojado. Por lo tanto, estoy enojado. -Gato de Cheshire/Sonriente.

-Lee las instrucciones y claramente serás dirigida en la dirección correcta. -Perilla de la puerta.

-Eso depende en gran parte de hacia dónde quieras ir. -Gato de Cheshire/Sonriente.

-Soy más grande que tú, y por lo tanto debo ser más sabio. -Loro.

-La mejor manera de explicar las cosas es haciéndolas. -Dodo.

-Si tomas mucho de una botella etiquetada como veneno es casi seguro que en algún punto, tarde o temprano esté en desacuerdo contigo. -Alicia.

-Al menos sé quién era cuando desperté esta mañana, pero creo que debo de haber cambiado varias veces desde entonces. -Alicia.

-No sabes mucho. Y eso es un hecho. -Duquesa.

-Solo unos cuantos encuentran en camino; otros no lo reconocen cuando lo encuentran; y otros no quieren ni siquiera reconocerlo. -Gato de Cheshire/Sonriente.

-No puedes evitarlo. Todos estamos locos aquí. Yo estoy loco. Tú estás loca. […] Debes de estarlo, o no habrías venido aquí. -Gato de Cheshire/Sonriente.

Alicia en el país de las maravillas (2010) – Película de Tim Burton

-Eres un poco más alta de lo que esperaba. -Reina blanca.

-Alicia, no puedes dedicar tu vida a complacer a los demás. La elección debe de ser tuya, porque cuando salgas a enfrentar a esa criatura, lo harás sola. -La reina blanca.

-Desde el momento en que caí en la madriguera del conejo, me han dicho a donde ir y quién debo ser. He sido encogida, arañada y encerrada en una tetera. Me han acusado de ser Alicia y de no serlo, pero este es mi sueño. Y yo decido que pasa después. -Alicia.

-¡Todos ustedes están tardes para el té! -Liebre de marzo.

-Cualquiera puede viajar a caballo o en tren, pero la mejor e indudablemente manera de viajar es en sombrero. -Sombrerero loco.

-Existe un lugar incomparable con ningún lugar en la tierra. Una tierra llena de maravillas, misterios y peligros. Algunos dicen que para sobrevivirlo tienes que estar tan loco como un sombrerero. Que por suerte, yo lo soy. -Somberero loco.

-Que enorme cabeza tiene. Me gustaría ponerle un sombrero. Solía vestir la cabeza de la reina blanca, sabe. Su cabeza era tan pequeña. -Sombrerero loco.

-No puedo ayudarte si ni siquiera sabes quien eres, niña estúpida. -Oruga azul.