Historia

Acta constitutiva y de reformas de 1847 (México)


El Acta constitutiva y de reformas de 1847 (México) fue un documento aprobado por el Congreso mexicano mediante el que se recuperaba la estructura federal del país. El Acta de Reformas, que también establecía una serie de derechos ciudadanos, fue promulgada el 21 de mayo de 1847.

Desde la misma independencia, en México habían existido dos corrientes diferentes acerca de cómo organizar el país. Unos, los más conservadores, apostaban por un Estado centralizado. Otros, liberales, preferían la creación de un Estado federal, con una clara inspiración de la organización de los Estados Unidos.

Con Santa Anna como presidente, en 1835 se promulgaron las llamadas Siete Leyes, una Constitución conservadora y centralista. Unos años después, en 1843, el Congreso comenzó a trabajar en una nueva Carta Magna que, en la práctica, mantenía el centralismo administrativo.

En 1847, en un contexto de guerra con los Estados Unidos, los congresistas pensaron que la vuelta el sistema federal iba a unir al país frente al invasor. Los trabajos tuvieron como resultado el Acta Constitutiva y de reformas, que restablecía el federalismo, además de fortalecer los derechos individuales.

Índice del artículo

Antecedentes

Desde el fin del Primer Imperio Mexicano, el país se había visto dividido entre la corriente centralista y la federalista.

Tras la Constitución promulgada en 1824, los conflictos entre ambos sectores se recrudecieron. En esa Carta Magna se instauraban las elecciones para la elección del presidente, mientras que el perdedor en ellas se haría cargo de la vicepresidencia.

Esto obligaba a que convivieran en los máximos cargos de autoridad a miembros de las dos corrientes, lo que provocó numerosos enfrentamientos políticos.

Durante ese periodo, la rebeliones y destituciones presidenciales fueron muy frecuentes. La estabilidad no llegaba, con muchos presidentes en pocos años.

El General Santa Anna ocupó la presidencia, por segunda vez, en 1835. El Congreso, de mayoría conservadora, procedió a redactar las bases de una nueva Constitución. Esta recibió el nombre de Las Siete Leyes y puso fin al sistema federal.

Además de ese cambio de sistema de organización política, la Constitución creó el Supremo Poder Conservador, que, de acuerdo con las leyes, solo era responsable ante Dios. Sus atribuciones iban desde declarar nula una ley hasta decretar el cierre del Congreso.

Bases Orgánicas de la República Mexicana, 1843

Durante la década siguiente continuaron los enfrentamientos entre los federalistas del Partido Liberal y los centralistas del Partido Conservador. El país, además, se vio sacudido por varios acontecimientos, como la separación de Texas, el intento de Yucatán por declararse independiente o la amenaza de una intervención extranjera.

Por otra parte, la población mostraba mucha irritación por las políticas que desarrollaba el presidente Santa Anna, quien incluso se planteó instaurar una monarquía.

Para tratar de solventar tanta inestabilidad, el Congreso comenzó a trabajar en 1842 en una nueva Constitución. El diputado Mariano Otero defendió la necesidad de implantar un sistema federal, republicano y representativo.

Los conservadores, por su parte, se mostraron totalmente contrarios a ese proyecto. Las tensiones fueron creciendo hasta tal punto que el Congreso fue disuelto.

Ya en junio de 1843, se promulgó la nueva Constitución, que recibió el nombre de Bases Orgánicas de la República Mexicana. Este nuevo texto solo tuvo una vigencia de tres años.

Entre sus artículos más importantes se encontraban la eliminación del cargo de Supremo Poder Conservador, la restricción de la libertad de imprenta, la elección indirecta de los representantes y el derecho a veto del ejecutivo.

Inestabilidad política del país

La guerra con los Estados Unidos, que comenzó en 1846, agravó aún más la inestabilidad política que sufría México. Su ejército estaba al límite y los opositores protagonizaron numerosas protestas contra el gobierno.

El ejecutivo buscó una solución para que el país se uniera frente al enemigo exterior y que cesaran los enfrentamientos internos. Su solución fue restaurar el sistema federal, tratando de pacificar la nación para afrontar con más garantías el conflicto con su vecino del norte.

Contenido del Acta

Como se ha señalado, México se encontraba en guerra con los Estados Unidos. Además de la potencia militar de este país, la inestabilidad política y los levantamientos internos hacían casi imposible plantar cara a los estadounidenses.

Ante esto, el gobierno convocó, en mayo de 1847, un Congreso Extraordinaria Constituyente para volver a implantar el sistema federal. El resultado fue el Acta Constitutiva y de Reformas

Trabajos en el Congreso

La posición de los representantes en el Congreso no fue unánime. Varios de ellos, encabezados por Muñoz Ledo, propusieron que se recuperara íntegramente la Constitución de 1824, aunque después se reformara siguiendo los cauces legales establecidos en la misma.

Frente a ellos, la comisión de Constitución, emitió un dictamen que coincidía en la idea de restaurar esa Carta Magna, pero apuntaba que las reformas debían ser aprobadas por el propio constituyente.

En tercer lugar, Mariano Otera, en un voto particular, discrepaba abiertamente de las dos propuestas anteriores. Este voto particular fue el que triunfó en el pleno del congreso, que rechazó el informe de la comisión.

Así, el proyecto que fue imponiéndose constaba de un preámbulo, con cuatro puntos resolutivos. El último de estos proponía que se aprobara el Acta de reformas propiamente dicha, con un contenido de 22 artículos.

Preámbulo

El Preámbulo del Acta contiene, en primer lugar, un recuerdo a la independencia y origen de los Estados Unidos Mexicanos.

En ese contenido de carácter solemne, se recalca el propósito de permanecer unidos, recordando que esa fue la intención de los redactores de la Constitución de 1824. Asimismo, recalca el papel del federalismo en el nacimiento del país.

Mediante este escrito, el Acta restablecía el federalismo de manera formal. Según los expertos, las modificaciones realizadas a la Constitución del 24, que había reemplazado a las Bases Orgánicas en 1846, habían restado parte de ese carácter federal.

La intención había sido evitar que se produjeran conflictos y, para ello, se impuso que los tres poderes, legislativo, ejecutivo y judicial “solo pueden y deben hacer lo que la Constitución otorga como facultad e impone como obligación”.

Acta de Reforma

Además del restablecimiento del federalismo, el Acta Constitutiva y de Reformas también entró en otros aspectos que cambiaron la legislación mexicana. Entre ellos, el establecimiento de garantías individuales para todos los ciudadanos. En este ámbito, destacó la implantación de los derechos de petición y amparo.

En lo político, el Acta eliminó el cargo de vicepresidente y estableció las elecciones directas para los cargos de diputados, senadores, miembros de la Suprema Corte y presidente de la República.

Como sistema de garantías frente a los Estados federales, el Acta otorgó al Congreso la facultad de anular las leyes aprobadas en sus instituciones si estas iban en contra del pacto federal.

Referencias

  1. Fundación Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes. Acta Constitutiva y de reformas de 1847. Obtenido de cervantesvirtual.com
  2. Vázquez-Gómez Bisogno, Francisco. El Acta Constitutiva y de Reformas de 1847. Un ejemplo de control constitucional de leyes locales en el México del siglo XIX. Recuperado de scripta.up.edu.mx
  3. García Cantú, Gastón. Acta Constitutiva y de Reformas, 1847. Recuperado de doctrina.vlex.com.mx
  4. Santoni. Pedro. Mexicans at Arms: Puro Federalists and the Politics of War, 1845-1848. Recuperado de books.google.es
  5. Macías, Francisco. The history of the Mexican Constitution. Obtenido de blogs.loc.gov