Sistema nervioso parasimpático: funciones, neuronas, divisiones
El sistema nervioso parasimpático (SNP) es una de las dos divisiones del sistema nervioso autónomo, que es una división a su vez del sistema nervioso periférico, parte del sistema nervioso del cuerpo del ser humano. Este sistema regula las funciones de muchos órganos en nuestro cuerpo.
Se dice que el sistema nervioso parasimpático es responsable de “descansar y digerir” y de “alimentar y criar”, comportamientos que se dan cuando el organismo está descansando. Algunas de las respuestas de este sistema son la digestión, la salivación y la defecación.
Este sistema conserva energía, disminuyendo el ritmo cardiaco, aumentando la actividad intestinal y relajando los músculos de los esfínteres en el tracto gastrointestinal. Lo contrario que el sistema nervioso simpático, el cual interviene en la generación de la respuesta de lucha o huida.
Índice del artículo
- 1 Una parte del sistema nervioso autónomo
- 2 Funciones del sistema nervioso parasimpático
- 3 Reacciones que provoca el sistema nervioso parasimpático en los sistemas del cuerpo
- 4 Tipos de neuronas del SNP
- 5 Divisiones del sistema nervioso parasimpático
- 6 Referencias
Una parte del sistema nervioso autónomo
El sistema nervioso de los seres humanos consiste en un grupo de células especializadas, las neuronas, que se distribuyen por todo el cuerpo y se comunican entre sí, controlando las funciones de todos los órganos.
El sistema nervioso se considera subdividido en dos:
- El sistema nervioso central: representa el centro de mando de todo el sistema nervioso, pues es quien recibe información y envía órdenes precisas hacia el resto del cuerpo. Está formado por el cerebro y la médula espinal.
- El sistema nervioso periférico: está representado por todas las neuronas y estructuras nerviosas que no forman parte del sistema nervioso central, pero que conectan todos los órganos con este último.
El sistema nervioso periférico está formado por dos componentes:
- El sistema nervioso somático: se encarga del control de nuestras funciones conscientes.
- El sistema nervioso autónomo: regula la actividad de nuestros órganos viscerales, que son funciones inconscientes.
La subdivisión autónoma del sistema nervioso periférico está compuesta por dos divisiones más, que se encargan de la inervación y el control de los órganos internos de nuestro cuerpo:
- El sistema nervioso simpático.
- El sistema nervioso parasimpático.
La división parasimpática está formada por el nervio vago y los nervios lumbares espinales, que inervan el corazón, los intestinos, etc.
Funciones del sistema nervioso parasimpático
El funcionamiento interno de nuestro cuerpo se da gracias al equilibrio entre las actividades de los sistemas simpático y parasimpático del sistema nervioso autónomo.
Muchos textos establecen que la función principal del sistema nervioso simpático consiste en actuar durante las respuestas de “lucha o huida” que tenemos frente a situaciones estresantes o atemorizantes, y que el sistema nervioso parasimpático se encarga de restaurar las condiciones normales previas a la situación de estrés.
Sin embargo, es importante aclarar que ambas divisiones del sistema nervioso autónomo están siempre en funcionamiento, inhibidas o activadas dependiendo del momento del día, de la condición fisiológica o de las necesidades de nuestro organismo.
Lo que esto quiere decir es que, aunque participan en las mencionadas respuestas, los dos sistemas cumplen funciones permanentes muy complejas e importantes para nosotros.
¿Qué hace el sistema parasimpático?
La división parasimpática del sistema nervioso autónomo tiene una actividad predominante en las condiciones de “descanso y digestión”, conservando energía para ser utilizada posteriormente y regulando distintas funciones corporales, como la digestión y la micción.
Así como el sistema nervioso simpático, esta división consiste en una compleja red de neuronas que tienen como función principal mantener la integridad y la funcionalidad de los órganos de nuestro cuerpo.
Esta división, así como la división simpática, ejerce sus funciones mediante pares de neuronas, una preganglionar y otra postganglionar, de las cuales hablaremos más adelante.
Este sistema está implicado en el control de muchos de los órganos de nuestro cuerpo:
- En el sistema reproductor masculino
- En el sistema cardiovascular
- En el sistema respiratorio
- En el sistema digestivo (glándulas salivales, estómago, intestinos y glándulas asociadas)
- En los ojos
- En el sistema excretor
Ejemplos de respuestas parasimpáticas
Ejemplos de respuestas en las que interviene el sistema nervioso parasimpático son:
- Defecación: el sistema nervioso parasimpático contrae los esfínteres y mueve los alimentos digeridos a través del tracto digestivo para continuar con la defecación.
- Digestión: estimula la producción de saliva y el movimiento del estómago e intestinos.
- Micción/orinar: contrae la vejiga para la salida de la orina.
- Lagrimeo: estimula la producción de lágrimas para mantener los ojos lubricados.
- Salivación: estimula la producción de saliva, que contiene enzimas para la digestión.
Reacciones que provoca el sistema nervioso parasimpático en los sistemas del cuerpo
Las acciones del sistema nervioso parasimpático sobre sus distintos órganos blanco pueden separarse de acuerdo a los sistemas de nuestro cuerpo, pues ejerce funciones distintas a nivel de los ojos, del corazón, del tubo digestivo, de los pulmones, los genitales y los órganos excretores.
En el sistema visual
El sistema nervioso parasimpático provoca miosis, es decir la constricción de la pupila de los ojos. Al contrario, la división simpática provoca en los ojos midriasis, que es la dilatación de la pupila.
Este efecto sobre el sistema visual es conseguido mediante la estimulación, por la acetilcolina liberada por las fibras postganglionares, de unos receptores colinérgicos en el músculo esfínter del iris, lo que provoca la constricción de la pupila.
En el sistema cardiaco
La actividad del sistema nervioso parasimpático sobre este sistema provoca la disminución de la frecuencia cardiaca, contrario a lo que produce la división simpática, que la acelera.
En el sistema digestivo
En este sistema el sistema nervioso parasimpático estimula la musculatura lisa de los intestinos, promoviendo la peristalsis (movimientos intestinales que favorecen el tránsito del material ingerido). Además, también promueve la secreción de las enzimas digestivas por el páncreas, lo que está inhibido por la actividad de la división simpática.
Otra de las reacciones del sistema digestivo frente a la actividad del parasimpático implica la relajación de los esfínteres. También participa en la contracción de los músculos asociados con la vesícula biliar, lo que promueve la liberación de la bilis.
En el sistema respiratorio
En los pulmones, la división parasimpática provoca broncoconstricción y aumento de las secreciones bronquiales, mientras que el simpático provoca broncodilatación.
En el sistema genital
En el sistema genital masculino, la estimulación mediada por el sistema nervioso parasimpático provoca la erección del pene, además de la excitación del conducto deferente, las vesículas seminales y la próstata (estimula las secreciones prostáticas).
En el sistema genital femenino, la estimulación mediada por el sistema nervioso parasimpático provoca también la erección del clítoris, estimulación de las secreciones vaginales, las contracciones vaginales rítmicas durante el orgasmo y las contracciones somáticas de los músculos pélvicos que acompañan al orgasmo.
En el sistema excretor
En cuanto a las reacciones del sistema excretor frente a la actividad del sistema nervioso parasimpático podemos decir que este último facilita la micción (orina), gracias a la estimulación de la contracción del músculo detrusor y a la relajación del esfínter interno de la uretra (la micción es un proceso muy complejo, controlado a nivel autónomo y somático).
Tipos de neuronas del SNP
En el sistema nervioso parasimpático participan pares neuronales. Cada par está compuesto por una neurona preganglionar y otra neurona postganglionar, que se comunican por sinapsis en los ganglios parasimpáticos.
Las neuronas preganglionares forman las fibras preganglionares parasimpáticas, que son fibras derivadas del sistema nervioso central y dedicadas al control parasimpático.
Neuronas preganglionares
Las neuronas de la división parasimpática derivan de algunos núcleos del tronco encefálico (en el cerebro) y de los segmentos sacros S2 y S4 de la médula espinal, en contraste con las neuronas de la división simpática, que derivan únicamente de la médula espinal en los segmentos toracolumbares.
– Los nervios craneales que participan en el sistema nervioso parasimpático son el nervio oculomotor (III par craneal), el nervio facial (VII par craneal), el nervio glosofaríngeo (IX par craneal) y el nervio vago (X par craneal).
– Las fibras que derivan de la médula espinal forman los nervios pélvicos esplácnicos, que inervan las vísceras de la cavidad pélvica.
Las fibras preganglionares parasimpáticas formadas por estas neuronas son sumamente largas, especialmente las que inervan órganos viscerales, dado que los ganglios donde se comunican con la neurona par (postganglionar) se encuentran muy cerca de los órganos que inervan.
Además, las neuronas preganglionares del parasimpático, así como las del simpático, son colinérgicas, es decir, que cuando hacen sinapsis con las neuronas postganglionares secretan al neurotransmisor acetilcolina.
Neuronas postganglionares
Los ganglios donde ocurre la sinapsis entre los terminales axónicos de las fibras preganglionares y los cuerpos celulares de las postganglionares están en o muy cerca de los órganos blanco, por lo que las fibras postganglionares parasimpáticas tienen axones mucho más cortos que los de las neuronas postganglionares simpáticas.
Estas neuronas son colinérgicas, al igual que las preganglionares, dado que también secretan acetilcolina para controlar las funciones de sus órganos blanco (otra diferencia con las de la división simpática, que liberan noradrenalina y adrenalina).
Este neurotransmisor secretado por las fibras pre- y postganglionares estimula los receptores muscarínicos en la superficie de las células de los órganos blanco que responden a la estimulación nerviosa.
Estos receptores son proteínas integrales de membrana que activan cascadas de señalización dentro de la célula y, consecuentemente, dentro del órgano.
Divisiones del sistema nervioso parasimpático
El sistema nervioso parasimpático puede dividirse en dos: el parasimpático craneal y el parasimpático sacro, de acuerdo con las fibras nerviosas que están involucradas en la transmisión de los impulsos eléctricos desde el sistema nervioso central.
División craneal
Esta división inerva principalmente los órganos de la cabeza y las fibras nerviosas preganglionares derivan de los nervios craneales conocidos como “pares craneales”.
Los pares craneales que participan en el sistema parasimpático son los que mencionamos anteriormente, responsables de toda la información neuronal relacionada con la parte alta del organismo:
- III par o nervio oculomotor, que actúa en los ojos (contracción de la pupila)
- VII par o nervio facial, que regula a las glándulas lacrimales y salivales, así como a las membranas mucosas de la cavidad nasal
- IX par o nervio glosofaríngeo, que actúa sobre la glándula parótida
- X par o nervio vago, que actúa en las vísceras del abdomen y el tórax (representa 75% de las fibras parasimpáticas de nuestro cuerpo)
División sacra
Esta división tiene que ver con la función visceral de la región pélvica, más específicamente con la actividad regulatoria del tubo digestivo y las funciones sexuales.
Está formada por las fibras nerviosas preganglionares simpáticas que derivan de los segmentos sacros de la médula espinal, que actúan tanto en la activación de la producción de secreciones digestivas como en la erección del miembro genital masculino.
Referencias
- Fox, S. I. (2002). Human physiology. McGraw-Hill.
- Furness, J. B. (2006). The organisation of the autonomic nervous system: peripheral connections. Autonomic Neuroscience: Basic and Clinical, 130(1), 1-5.
- Ganong, W. F. (1995). Review of medical physiology. McGraw-Hill.
- Purves D, Augustine GJ, Fitzpatrick D, et al., editors. Neuroscience. 2nd edition. Sunderland (MA): Sinauer Associates; 2001. Autonomic Regulation of Sexual Function. Tomado de ncbi.nlm.nih.gov
- Tindle J, Tadi P. Neuroanatomy, Parasympathetic Nervous System. [Updated 2020 Jan 11]. In: StatPearls [Internet]. Treasure Island (FL): StatPearls Publishing; 2020 Jan-. Tomado de ncbi.nlm.nih.gov