Folleto: características, para qué sirve, tipos, cómo hacerlo
Un folleto es un documento impreso en papel que tiene como objetivo divulgar o publicitar cierta información. Es decir, los folletos son herramientas que permiten enseñar y transmitir datos específicos.
Se diferencian de los libros por varias razones: en primer lugar, los folletos son de extensión breve, por lo que solo pueden alcanzar un máximo de 24 hojas. Así mismo, los folletos presentan la información de forma resumida y fácil de entender para la mayoría del público.
Estos documentos son muy usados en el marketing (es decir, en la publicidad y en las ventas), ya que las empresas y compañías lo emplean para dar a conocer los beneficios de un determinado servicio o producto.
Sin embargo, el folleto no debe confundirse con el panfleto, porque este último se trata de un documento ligeramente agresivo que se usa para difundir propaganda política.
Los folletos suelen ser muy llamativos, puesto que usan títulos muy atractivos e imágenes o fotografías. Además, no solo se utilizan para publicitar un producto; también son empleados en las escuelas, las universidades y otras instituciones con la finalidad de instruir a un grupo específico de personas.
Aunque los folletos se caracterizan por ser obras impresas, actualmente también es posible encontrarlos en formatos digitales.
Índice del artículo
- 1 ¿Para qué sirve un folleto?
- 2 Características de los folletos
- 3 Tipos de folletos
- 4 ¿Cómo hacer un folleto?
- 5 Temas para folletos
- 6 Referencias
¿Para qué sirve un folleto?
Los folletos son instrumentos muy útiles que sirven para transmitir información sobre cualquier tema. Por esta razón, se pueden usar tanto para enseñar en las escuelas y universidades como para instruir en conferencias y exposiciones; incluso, los folletos se pueden emplear para guiar a los viajeros, ya que también son usados con un fin turístico.
En resumen, los folletos son medios de comunicación que transmiten datos de todo tipo; pueden contener información sobre un producto, un lugar de interés turístico o un restaurante.
También se emplean para expresar elementos académicos o científicos, como por ejemplo un folleto que indique cómo prevenir el contagio de ciertas enfermedades.
Características de los folletos
– Dirigido a un público específico
El tratamiento de la información dependerá fuertemente del público al cual se dirige el folleto. No es lo mismo un folleto destinado a estudiantes, a público académico, a clientes o a empleados de una empresa.
Las particularidades de los destinatarios determinarán el tipo de folleto a utilizar, la cantidad de información, las características del diseño, incluso la manera de hacer llegar dicho folleto a las manos de los lectores ideales.
– Información pertinente
El folleto tiene la característica de ser útil para su público. La información que se ofrezca debe ser relevante en gran medida para el lector.
Debe buscarse que el folleto no sea un recurso desechable, sino que el lector sienta el deseo de guardarlo y tenerlo como un material de consulta.
Si se trata de un folleto destinado a vender un producto o servicio, la información debe mencionar los beneficios y la utilidad que tienen dichos productos y servicios para el público lector.
Estos beneficios deben resaltarse en toda la extensión del folleto, debido a que es la información más importante para los lectores.
– Claridad en el contenido
Los folletos deben ser muy claros al momento de exponer la información. El tema central que quiere divulgarse debe quedar expuesto de forma evidente.
Es posible, incluso beneficioso, agregar información complementaria, datos de contexto, o también testimonios de algunas personas relacionadas con el asunto que se esté tratando. Pero el tema central debe estar bien definido a largo del folleto.
– Texto comprensible
El texto de un folleto se caracteriza por ser simplificado y de fácil comprensión. En general, los folletos ofrecen espacio reducido; por esta razón, se caracterizan por sintetizar la información a través del uso de un lenguaje directo.
Este lenguaje debe adaptarse a la audiencia receptora; por ejemplo, el texto dirigido a un niño tiene características muy distintas al que se dirige a un adulto.
En cada caso, se deben tener claras las peculiaridades de la audiencia y, en función de ello, utilizar el lenguaje más conveniente. Sea cual sea el lenguaje escogido, este debe facilitar la correcta interpretación del texto. Un lenguaje enrevesado o muy técnico será un obstáculo para la lectura.
Por otro lado, el texto deberá estar escrito de forma correcta, sin faltas ortográficas y con estructura gramatical adecuada. En caso contrario, el lector se dispersará y puede descartar el folleto.
– Tipo de letra adecuado
Entre las características principales de un folleto destaca lo relacionado al tipo de letra a utilizar. La letra debe ser legible, atractiva y adaptada a la información que se ofrece.
De las tres características del tipo de letra, nombradas anteriormente, la más importante es la legibilidad. Hay casos en los que el diseño rimbombante de un tipo de letra puede ser llamativo, pero dificulta la lectura.
Ante estos casos, siempre debe tener mayor relevancia la posibilidad que brinda una tipografía de leer el texto de manera fluida y correcta.
– Diseño llamativo
La función principal de un folleto es transmitir una información, y para que esta información pueda llegar al público de manera efectiva, es necesario que el folleto sea atractivo, que tenga un diseño dinámico y armónico, adaptado al target al cual va dirigido.
Es importante destacar que el diseño debe facilitar la lectura del folleto, y no ser un obstáculo. Un diseño llamativo puede y debe dar énfasis en la comprensión absoluta de la información.
– El menor texto posible
Es importante evitar el exceso de texto. Aunque el diseño sea atractivo, mucho texto puede resultar abrumador y puede obstaculizar la lectura.
Un folleto se caracteriza por ofrecer información simplificada. En algunos casos los temas a tratar pueden ser bastante amplios o densos, y la idea es que pueda transmitirse de la forma más directa y sencilla posible, debido a que el folleto está pensado para ser de rápida lectura.
– Tabla de contenidos
Si se trata de un díptico o tríptico, se recomienda agregar un índice de contenidos. Así el lector podrá tener acceso rápido a la información que sea de su interés.
– Tablas y gráficos
El folleto es una herramienta pensada para que el lector, rápidamente, pueda tener información completa sobre un tema, un producto o un servicio.
Hay recursos que pueden ayudar a que la información se divulgue de manera más eficiente; en los folletos pueden usarse tablas explicativas, infografías o gráficos para facilitar la comprensión del tema tratado.
Tipos de folletos
Los folletos se pueden clasificar de acuerdo a dos aspectos principales: según la manera en la que distribuyen la información y según el tipo de información que transmiten.
– Según la manera en la que distribuyen la información
Flyers
Este tipo de folleto también se conoce como hoja volante; se le llama así porque está constituido por una sola hoja sin pliegues. Su forma puede ser cuadrada o rectangular y es uno de los más usados dentro del mundo del marketing, puesto que es el formato más económico.
Dípticos
Estos folletos cuentan con dos pliegues y se suele entregar en lugares abiertos. También se colocan en los mostradores de las tiendas o se envían por correo.
Se dividen en tres partes: la tapa (donde se especifica el nombre y por lo general se coloca una imagen), el contenido (donde se coloca la información) y la contratapa (es la última hoja y suele llevar un resumen del contenido o los números de contacto).
Trípticos
Los trípticos son similares a los dípticos, pero cuentan con más espacio. Son muy empleados en los medios publicitarios, aunque también se les puede encontrar en las escuelas y las universidades, ya que permiten colocar mayor cantidad de información. Al igual que los dípticos, los trípticos cuentan con tapa, contenido y contratapa.
– Según el tipo de información
Folletos educativos
Estos folletos tienen como objetivo educar a un público determinado. Por ello, buscan orientar a las personas a través de un lenguaje sencillo y bien estructurado que facilite la fácil comprensión de la información que se desea transmitir.
Folletos escolares
Estos folletos circulan por los centros educativos y son elaborados para enseñar y entretener a los estudiantes. Pueden abordar cualquier tema, siempre y cuando la información sea instructiva (es decir, que favorezca el aprendizaje), recreativa y didáctica.
Folletos de salud
Estos folletos son muy importantes porque permiten informar a las personas sobre las enfermedades y los brotes que están manifestándose en la actualidad.
Por lo general, en la primera parte orientan a las personas sobre cómo actúa la enfermedad (se especifican síntomas y causas), luego explican cómo prevenir o evitar el contagio.
¿Cómo hacer un folleto?
A continuación se presentan una serie de pasos para elaborar un proyecto:
1. Establecer el propósito del folleto
Para elaborar un folleto primero es necesario determinar el tópico (es decir, el tema) que se desea abordar. De igual forma, también se debe tener claro el tipo de público al que irá dirigido el folleto; todos estos factores permiten tener un enfoque más adecuado al momento de elaborar el contenido.
2. Realizar una investigación minuciosa sobre el contenido del folleto
Antes de elaborar el folleto, es necesario realizar una investigación sobre el contenido que se colocará en el documento.
Por ejemplo, si se desea hablar sobre los animales, es necesario averiguar sobre los distintos tipos de animales, su clasificación, su alimentación, entre otros datos. Esta información se puede adquirir en los libros, internet, videos o documentales.
3. Escoger un título llamativo y los datos más importantes del contenido
Luego de investigar, se debe escoger un título llamativo para el folleto. Además, se debe elaborar un resumen de la información que fue consultada; este resumen se colocará de forma clara y precisa en el folleto.
Así mismo, durante este proceso se deben escoger las imágenes o fotografías que acompañarán al contenido. Estas deben ser llamativas y apelar a la emoción de quien leerá el folleto.
4. Elaborar el folleto de forma ordenada y fácil de comprender
Aunque antes los folletos se elaboraban a mano, hoy en día es preferible diseñarlos en la computadora, puesto que resulta más sencillo. En la actualidad existen muchas plataformas que ofrecen plantillas para elaborar folletos llamativos y fáciles de entender.
Es necesario que el folleto siga un orden adecuado; es decir, las imágenes, los títulos y el contenido deben estar distribuidos de forma armoniosa y sencilla. De esta manera, se garantiza que los lectores comprendan la información expuesta.
Temas para folletos
Los folletos pueden contener cualquier tipo de información. A continuación se presentan algunas ideas o temas:
– Cómo reciclar en el colegio.
– Ventajas de cepillarse los dientes.
– Hábitos de las aves.
– Animales vertebrados.
– Cómo actuar en caso de sismo.
– Prevención de enfermedades durante el invierno.
– Biografía de algún personaje histórico importante (Por ejemplo: Napoleón Bonaparte, Simón Bolívar, Isaac Newton, entre otros).
Referencias
- Burger, J. (2003) Efficacy of a brochure versus a classroom lesson. Recuperado el 17 de febrero de 2020 de Wiley Online Library.
- Copeland, I. (1997) Special educational needs in the primary school brochure. Recuperado el 17 de febrero de 2020 de Taylor & Francis.
- Howson, J. (1995) The school brochure. Recuperado el 17 de febrero de 2020 de journals.sagepub.cm
- S.A. (2014) Cómo hacer un folleto para la primaria. Recuperado el 17 de febrero de 2020 de Padres en la escuela: padresenlaescuela.com
- S.A. (2019) How to make brochures on Microsoft Word. Recuperado el 17 de febrero de 2020 de Wikihow: wikihow.com