Anatomía y fisiología

Anatomía funcional: historia, objeto de estudio, métodos


La anatomía funcional o fisiológica es una subdivisión del estudio de las estructuras que componen el cuerpo humano o de otros animales. El estudio de la anatomía funcional está enfocado en las estructuras y órganos y la forma en que estos funcionan.

Este enfoque se conoce también como anatomía macroscópica, pues su estudio se basa en las estructuras corporales capaces de verse sin la utilización de un microscopio. La anatomía funcional se separa de la anatomía microscópica (histología), y la anatomía del desarrollo (embriología) y se divide a su vez en anatomía sistemática, regional y clínica.

Índice del artículo

Historia

La anatomía humana tuvo sus inicios en Egipto unos 500 años a. C. Mientras que en Grecia, Hipócrates (460-377 a. C.) y Aristóteles (384-322) hicieron importantes aportes a lo que es la anatomía hoy en día.

Hipócrates escribió varios libros sobre anatomía, además del “Juramento hipocrático”, y Aristóteles acuñó el término anatome que significa “cortar y separar”.

Se considera a Andrés Vesalio (1514-1564 d. C.) el padre de la anatomía moderna, por escribir y publicar su obra De Humani Corporis Fabrica en 1543. Estos estudios anatómicos se enfocaron más en la anatomía descriptiva, regional y sistémica.

El estudio de la anatomía funcional ha tenido su auge a partir del siglo XVII, luego de la invención y evolución del microscopio y el origen de la histología (estudio de células y tejidos).

Estos avances permitieron agregar observaciones sobre la relación entre las formas y la función de las estructuras a la anatomía, que hasta entonces se trataba de una disciplina sobre estructuras estáticas.

A partir del siglo XX, con el avance informático y tecnológico, el estudio de la anatomía funcional ha incrementado exponencialmente, permitiendo, a través de modelos y programas de simulaciones, comprender mucho más el funcionamiento de las estructuras de los organismos vivos.

¿Qué estudia?

La anatomía funcional relaciona los enfoques de anatomía sistemática, regional y clínica o aplicada, para estudiar cómo funcionan las estructuras y órganos del cuerpo humano y de otros animales, generalmente domésticos.

El estudio funcional de las estructuras puede dividirse en sistemas, como el estudio funcional del sistema nervioso central, o en regiones, como la anatomía funcional de la corteza cerebral o del corazón.

De esta manera, se puede estudiar la anatomía funcional de diversas partes corporales como: del aparato locomotor, desde sus componentes activos como los músculos, hasta los componentes pasivos que son los huesos y articulaciones.

Se estudian también las estructuras funcionales de las vísceras que proporcionan los movimientos peristálticos que permiten la progresión del contenido intestinal. Otro importante objeto de estudio de la anatomía funcional es la dinámica del corazón y su sistema circulatorio.

También encontramos anatomía funcional de la masticación, fonación o deglución, entre muchos otros estudios.

En general, la anatomía funcional es usada para darle mayor valor y aclarar las descripciones anatómicas sistemáticas y regionales. A través de este enfoque, se relacionan la forma y la función de todas las estructuras corporales.

Métodos y técnicas

A pesar de considerarse a la anatomía funcional como macroscópica, el desarrollo de la microscopía ha sido de gran utilidad en el estudio de esta disciplina.

La comprensión de las estructuras microscópicas que conforman músculos, cartílagos y sistema óseo resulta una útil herramienta para el conocimiento del funcionamiento de las estructuras y los movimientos corporales. Además de esto, el estudio de imágenes y de modelos computarizados permite integrar estos conocimientos.

En el enfoque funcional de la anatomía, el estudio de las estructuras corporales va acompañado de la relación entre articulaciones e inserción de músculos.

Se debe destacar que, en la anatomía funcional, las estructuras que son objeto de estudio son elementos involucrados en procesos de desplazamiento.

De esta manera, no se puede confundir con la fisiología, que se encarga de estudiar, por ejemplo, el intercambio de gases en la respiración o la transducción de estímulos hacia corrientes nerviosas en los receptores sensoriales.

Términos de anatomía funcional

En el estudio de la anatomía funcional es importante conocer algunos términos que hacen referencia al movimiento de extremidades y otras partes del cuerpo. La mayoría de movimientos estudiados en esta disciplina son los de las articulaciones, donde dos o más huesos se articulan entre sí.

Algunos términos que describen el movimiento son flexión y extensión que hacen referencia al grado de inclinación de una estructura con respecto a otra. La abducción y aducción hacen referencia al alejamiento o acercamiento, respectivamente, de las extremidades con respecto al plano medio del cuerpo.

Además, son de uso común términos como eversión e inversión; elevación y depresión y planos anatómicos como planos medios, sagitales, frontales y horizontales.

Estos términos forman parte del vocabulario internacional de la anatomía, siendo importante que los profesionales de la salud hagan uso de los mismos, para evitar ambigüedades y confusiones.

Anatomía funcional del aparato locomotor

El estudio funcional de las estructuras corporales es una disciplina multidisciplinaria que implica la relación entre conocimientos histológicos y fisiológicos. Este enfoque anatómico ha sido muy utilizado en las ciencias del deporte y actividad física, pues estudia el movimiento del cuerpo humano.

En el estudio y comprensión de lesiones deportivas, por ejemplo, se utiliza el análisis a través de imágenes, basándose en la aplicación de algunos principios físicos para la visualización de las estructuras internas, así como su composición y funcionamiento.

La comprensión de la anatomía aplicada al deporte requiere del clásico estudio de la anatomía funcional musculo-esquelética y de los meridianos miofasciales (tejido conectivo), enfocándose en la fisiología y biomecánica, utilizando además herramientas de la traumatología e imágenes diagnósticas.

Uso del conocimiento anatómico funcional en la evaluación antropológica

El estudio de la anatomía funcional es usado en la creación de perfiles antropométricos en las ciencias del deporte.

Luego de tomarse las medidas para el perfil antropométrico se obtienen los índices, proporciones y distribución del peso corporal sobre los diversos tejidos y, posteriormente, los conocimientos sobre anatomía funcional permiten interpretar estos resultados.

La anatomía funcional permite comprender la relación entre un perfil antropométrico común entre atletas destacados en una determinada disciplina deportiva.

Este enfoque anatómico explica, por ejemplo, la razón de que una determinada longitud femoral sea necesaria para atletas mediofondistas, y el por qué la longitud de los brazos es importante en la natación y deportes con remo.

De esta forma, se puede hipotetizar alguna ventaja que presente determinada variable antropométrica sobre una disciplina deportiva, permitiendo además predecir el rendimiento del atleta sobre dicha actividad.

Referencias

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