Kenyanthropus platyops: qué es, características, cráneo, herramientas, hábitat y alimentación
¿Qué es el Kenyanthropus platyops?
Kenyanthropus platyops es una especie de homínido cuyo cráneo fósil se encontró en 1999. Existió hace aproximadamente 3,5 millones de años, lo que indica que, dentro de la escala temporal geológica, se encuentra ubicado en el período conocido como Plioceno, el cual comienza hace 5,33 millones de años.
El fósil del Kenyanthropus platyops fue descubierto en Kenia por un equipo de antropólogos dirigido por la paleoantropóloga británica Meave Leakey y su hija Louise, en Kenia. Específicamente, en una zona semidesértica cercana al lago Turkana, ubicado en el valle del Gran Rift, considerado una gran fractura geológica que tiene casi 5.000 kilómetros de extensión.
Características del Kenyanthropus platyops
El nombre de este fósil significa “hombre de Kenia”, debido a su similitud en la estructura facial con el Homo sapiens y a su lugar de hallazgo. Así mismo, es conocido por su pequeña estatura, ya que mide solo 1,5 metros.
Otro de los aspectos que lo caracterizan es su antigüedad, pues resulta curioso que una especie con rasgos tan finos haya existido hace 3,5 millones de años. Además, se estableció que los machos podrían pesar aproximadamente 50 kg, mientras que las hembras pesarían unos 38 kg.
El Kenyanthropus platyops resulta muy llamativo gracias a sus rasgos, los cuales son una mezcla muy delicada entre el aspecto de la especie Australopithecus y la especie Homo.
Básicamente, el Kenyanthropus posee unos dientes pequeños, una cara plana y una inusual región subnasal aplastada, lo que lo hace similar a la composición fisionómica del humano moderno.
Controversias
Por tener estos rasgos mestizos entre las especies Australopithecus y Homo, los científicos decidieron definir el género Kenyanthropus. Sin embargo, según los descubridores, el cráneo de esta especie se parece en gran medida al fósil KNM-ER 1470, hallado años atrás en la misma región.
Este fósil fue clasificado como Homo rudolfensis y su antigüedad es mucho menor, ya que data de aproximadamente unos 1,8 millones de años. No obstante, no se puede asegurar que el Kenyanthropus platyops pertenezca a esta especie, puesto que el cráneo hallado se encuentra fuertemente deformado.
Así mismo, mediante un estudio craneodental de estos dos homínidos, se determinó que no hay soporte suficiente para corroborar el posible vínculo entre ambos hallazgos.
Incluso, algunos científicos establecen que lo más probable es que el Kenyanthropus forme parte de un mismo clado (es decir, que pertenezca a una misma ramificación dentro del árbol filogenético).
El Kenyanthropus platyops como especie
Muchos autores consideran que el hallazgo del Kenyanthropus no puede definirse como otro género o especie válidos, ya que en realidad podría tratarse de una variación del Australopithecus afarensis, el cual poseía una contextura delgada y existió durante el mismo tiempo que el Kenyanthropus (hace entre 3,9 y 3 millones de años).
En otras palabras, por carecer de evidencia no se puede afirmar que se trate de un nuevo género entre las especies de homínidos; más bien podría designarse a esta especie como Australopithecus platyops; es decir, una variante entre las especies de australopitecos.
Capacidad craneal del K. platyops
El cráneo que se encontró estaba completo y en buen estado de conservación, pero hubo que reconstruirlo con una gran cantidad de pequeñas piezas. Como se dijo anteriormente, el Kenyanthropus tiene la particularidad de tener la cara chata y los dientes pequeños.
En cuanto a su capacidad craneal, resulta muy similar al espécimen 1470, el correspondiente al Homo rudolfensis. Sin embargo, se dice que la diferencia en cuanto al tamaño es casi el doble. Esto quiere decir que el tamaño del cerebro debe oscilar entre los 400 y 500 cc.
Herramientas que utilizó el K. platyops
Poco se sabe acerca de las herramientas que utilizaron estos homínidos en particular, pero se dice que su estilo de vida era muy similar al de la especie afarensis.
Debido a las controversias que representa este homínido, resulta difícil para los investigadores conocer sus hábitos, ya que se trata de una especie aislada.
Otras curiosidades
A pesar de que no se tiene mucha información sobre sus utensilios, se sabe que su pequeño canal auditivo era semejante al del chimpancé y al de los homínidos que vivían hace unos 4 millones de años en el este africano, como el Australophitecus anamensis y el Ardipithecus ramidus.
El Kenyanthropus es más primitivo que la famosa Lucy; no obstante, sus rasgos faciales representan una evolución en cuanto a la estructura craneal.
Alimentación y hábitat del K. platyops
Actualmente, la mayoría de los primates son herbívoros, alimentándose en su mayoría de hojas, frutas y arbustos, mientras que el humano es la única especie de primate que es omnívora; es decir, que se alimenta de casi todo lo que le provee su hábitat.
Los primeros ancestros del humano consumían lo que comen los primates de ahora. Sin embargo, hace 3,5 millones de años comenzaron a incluir otros alimentos a su dieta, como por ejemplo, las semillas. Esto se sabe gracias a un estudio de los isótopos de carbono que se encuentran en el esmalte dental de los cráneos.
Se dice que el Kenyanthropus platyops era omnívoro, ya que no solo consumía una gran variedad de frutas y hojas, sino que también podía alimentarse de larvas, pequeños mamíferos y algunas aves. Además, se cree que es posible que haya consumido una gran cantidad de tubérculos y raíces.
En cuanto al hábitat, generalmente, las zonas en las cuales se desarrollaron los primates solían ser especies de bosques tropicales húmedos, con régimen climático de tipo monzónico; es decir, se trataba de un clima caracterizado por fuertes vientos, que traían como consecuencia abundantes lluvias durante el verano.
Aunque en la actualidad se considera que Turkana es una zona semidesértica, es muy probable que hace 3 millones de años hubiese sido un lugar con una favorable y condensada vegetación, donde no solo habitó el platyops, sino también una gran cantidad de otras especies y animales.
Los fósiles encontrados indican que el hábitat del Kenyanthropus platyops era una mezcla entre bosques y sabanas. Sin embargo, se afirma que también pudieron habitar zonas un poco más húmedas y cerradas.
Referencias
- Yohannes Haile-Selassie “New species from Ethiopia further expands Middle Pliocene hominin diversity” (2015). Recuperado en 6 septiembre 2018 de Nature: nature.com
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