Cultura valdivia: características, ubicación, costumbres, arte
La cultura valdivia fue una cultura arqueológica que se desarrolló en la costa oeste de Ecuador durante el Periodo Formativo temprano, entre el 4400 y el 1450 a. C. Los asentamientos pertenecientes a esta cultura ocuparon un territorio que se corresponde a las actuales provincias de Guayas, Los Ríos, El Oro e Isla Puná.
Esta cultura fue descubierta por Víctor Emilio Estrada en 1956. Los restos encontrados, especialmente los objetos cerámicos, llevaron a que fuera considerada como la cultura más antigua de América. Sin embargo, se desconocen muchos datos sobre esta cultura, incluido su origen y forma de vida.
Los restos encontrados demuestran que fueron un pueblo muy hábil en sus trabajos con la cerámica. En la mayoría de los casos, las piezas estaban destinadas al uso cotidiano, como vasos y jarras. Además, los arqueólogos han hallado estatuillas que representan formas femeninas, las denominadas Venus valdivianas.
Los expertos afirman que en sus inicios la economía de esta cultura estaba basada en la recolección, la caza y la pesca. Los moluscos constituyeron una de sus principales fuentes alimenticias hasta que consiguieron dominar la agricultura. Las evidencias sobre su trabajo demuestran que fue una sociedad sedentaria.
Índice del artículo
- 1 Origen de la cultura valdivia
- 2 Características de la cultura valdivia
- 3 Ubicación geográfica
- 4 Costumbres y tradiciones
- 5 Arte y cerámica
- 6 Religión
- 7 Economía
- 8 Referencias
Desde el momento de su descubrimiento, la cultura valdivia y su origen ha sido un enigma para los arqueólogos. Las hipótesis han sido varias, pero ninguna ha podido ser demostrada hasta el día de hoy.
Cuando el arqueólogo ecuatoriano Emilio Estrada descubrió la cultura en 1956, esta fue considerada como la más antigua de toda América. Los estudios con carbono 14 la han datado entre el 4500 y el 2000 a. C., por lo que existió unos 2500 años.
La cultura valdivia es la única en Ecuador que está datada en el Formativo Temprano. Esto la convierte en anterior a la de los mayas, los aztecas o los incas.
El origen de la cultura valdivia es uno de los grandes misterios de la arqueología de Ecuador. Una hipótesis mantiene que fue un punto de unión entre Asia y América unos 4500 antes de la llegada de Cristóbal Colón.
Esa hipótesis afirma que su aparición estuvo relacionada con contactos con el actual Japón, puesto que algunos investigadores han encontrado parecidos entre su cerámica y la realizada por un pueblo ubicado en el archipiélago japonés, especialmente en la decoración.
Sin embargo, esa teoría está prácticamente descartada actualmente y la mayoría de los historiadores no creen que existiera ese contacto entre Japón y la zona donde surgió la cultura valdivia.
Parte de la problemática en determinar el origen de la cultura proviene de las grandes diferencias que presenta con sus predecesores conocidos en la región. Estos eran, básicamente, cazadores recolectores, mientras que los miembros de valdivia eran sedentarios.
No obstante, algunas similitudes en la alfarería han llevado a algunos expertos a postular relaciones con algunos pueblos amazónicos anteriores.
Las interpretaciones sobre los restos encontrados muestran a la cultura valdivia como una auténtica representante del Periodo Formativo que, de manera muy rápida, evolucionó hacia una sociedad más compleja. Así, se convirtió en una cultura que practicaba la agricultura y que levantó asentamientos permanentes y organizados.
Una teoría más reciente afirma que el origen de la cultura valdivia fue la cultura Las Vegas. Esta habitó el actual Ecuador entre el 10.000 a.C. y el 4.600 a. C. y se sabe que, además de la caza, recolección y a la pesca, practicó una agricultura primitiva.
Hoy en día, la hipótesis que relaciona ambas culturas se ha convertido en la más aceptada entre los arqueólogos e historiadores, aunque todavía no se ha podido confirmar por completo.
Aunque ya no se la considera como la cultura más antigua del continente, la valdivia sigue ocupando uno de los primeros puestos cronológicamente.
Sus miembros fueron los primeros en trabajar la cerámica en el territorio ecuatoriano, hace unos 5500 años (3500 a. C.). Fue un pueblo sedentario gracias a que aprendió a dominar la agricultura y dejó de depender por completo del alimento que encontrara en su entorno.
Uno de los asentamientos más reconocidos y antiguos de esta cultura fue Real Alto. En el sitio se puede contemplar que la cultura valdivia planificó con antelación las construcciones realizadas.
Por otra parte, se han encontrado pruebas de que practicaron la navegación con balsas de vela. Esto los convierte en los pioneros de la navegación en toda América.
La cultura valdivia fue descubierta por el arqueólogo ecuatoriano Emilio Estrada, en 1956. Tras su hallazgo, dedicó su vida a estudiarla junto a Clifford Evans y Betty Meggers.
Estos dos últimos fueron quienes elaboraron la teoría de que la cerámica de esta cultura procedía de la cultura japonesa jomon. Sin embargo, la mayoría de los investigadores rechazaron esa posibilidad desde el principio.
Antes del establecimiento de la cultura valdivia, los habitantes del litoral ecuatoriano eran pequeños grupos de recolectores. Ocasionalmente, también se dedicaban a la pesca y a la caza. Esto cambió con la cultura valdivia, que marcó el inicio del sedentarismo en la zona.
El dominio de la agricultura fue el acontecimiento que determinó el cambio en el estilo de vida. Gracias a las cosechas, los pobladores ya no dependían en exclusiva de los alimentos que proporcionara su entorno.
Como era común en los primeros pueblos del continente, la cultura valdivia se organizó a partir de líneas tribales. Todos los aspectos de la vida estaban basados en relaciones de parentesco y reciprocidad. Los expertos señalan que es posible que tuvieran chamanes cuyo papel fuera relacionarse con el mundo de los espíritus.
La civilización valdivia fue una de las primeras en construir asentamientos. Lo hacían junto a las fuentes de agua disponibles y los restos han mostrado un cierto grado de planificación urbana.
Estas aldeas contaban con una 50 viviendas de forma ovalada. En ellas residían grupos de alrededor de 30 personas relacionadas por parentesco.
Una de las hipótesis más comunes sobre esta civilización afirma que los linajes estaban definidos por el lado femenino, lo que se conoce como sociedad matrilineal, y que la propiedad pertenecía a las mujeres.
Los arqueólogos encontraron en un osario de Real Alto un enterramiento cuyas características parecen probar esa importancia de la mujer. En el osario aparecieron los restos de una matriarca que había recibido un trato especial a la hora de ser enterrada.
La tumba había sido recubierta con piedras de moler y a los pies se encontró el cuerpo de un hombre degollado y descuartizado, probablemente víctima de un sacrificio en honor a la mujer enterrada.
Los yacimientos arqueológicos de la cultura valdivia están ubicados a lo largo de las cuencas de los ríos de todo el litoral costero ecuatoriano. La localización de los asentamientos se elegía en lugares ricos en recursos y que fueran fértiles para la agricultura.
En concreto, los miembros de esta civilización se asentaron en su mayor parte en el valle de Valdivia, situado en la península de Santa Elena. Esta cultura habitó extensos territorios de las provincias actuales de Los Ríos, Manabí, Guayas, Santa Elena y El Oro.
Se han encontrado también pruebas de que llegaron a habitar algunas zonas situadas en las estribaciones de la cordillera occidental.
Esta cultura tenía una capacidad de movilidad muy alta y su influencia alcanzó el sur y norte de Ecuador, el norte de Perú y parte de Mesoamérica.
Más allá de su habilidad con la cerámica y de la importancia de la mujer, poco se sabe de las tradiciones y costumbres de este pueblo.
Entre otras costumbres funerarias, los miembros de esta cultura realizaban los enterramientos en los mismos montículos en los que construían sus viviendas.
Los niños, en ocasiones, eran enterrados en vasijas de cerámica, mientras que los perros domésticos se enterraban de una manera parecida a la de sus dueños.
Hasta ahora no se han encontrado restos de cocas en ningún yacimiento. Sin embargo, sí han aparecido algunas figurillas que tienen una mejilla hinchada, como si estuviera masticando coca.
Igualmente, también se han encontrado vasos pequeños que se usaban para almacenar la sustancia que libera el alcaloide de la hoja de coca.
La cultura valdivia es considerada como una de las posibles pioneras en la producción de cerámica en Sudamérica. Además, también destacaron por los trabajos realizados con otros materiales.
En los yacimientos de la cultura valdivia se han encontrado cuchillos de lasca, machacadores, pesos para la pesca, raspadores y metates.
Algunas de estas herramientas no fueron fabricadas con el tipo de material rocoso típico de la región, sino con tipos de piedra que parecen haber sido llevadas desde otras zonas más lejanas.
Además de los utensilios de piedra, los artesanos de esta cultura elaboraron punzones utilizando las espinas de las aletas de pescado y conchas labradas.
El legado más importante de la cultura valdivia es su producción cerámica. Esta cultura fue una de las primeras en todo el continente en la que el uso de ese material se masificó.
En un primer momento, sobre el año 2700 a. C., la cerámica de valdivia era práctica y áspera, pero con el tiempo fue refinándose y aumentando en tamaño y delicadeza. La más característica era la cerámica de color rojo oscuro pulido, aunque también eran frecuentes los colores grises y otros tonos del rojo.
Los artesanos producían principalmente escudillas, cuencos y ollas, siembre con boca ancha y una base cóncava. La decoración se realizaba con técnicas como el modelado, el estampado o la incisión. Los motivos más frecuentes eran los geométricos.
Además de esas piezas prácticas, los artesanos de esta cultura también elaboraban ajuares funerarios.
Los expertos han agrupado la producción atendiendo a dos factores: la forma de los labios, bases y bordes; y la decoración y la composición.
La decoración fue dividida por Emilio Estrada en dos fases:
- El periodo Valdivia A, con una decoración muy simple.
- El periodo Valdivia B, en la que aumentó la complejidad, tanto de los motivos como de las técnicas utilizadas.
Otros utensilios que han contribuido a la fama de la artesanía de valdivia son los morteros. Estos tenían forma de monos, loros y felinos y estaban destinados a pulverizar sustancias alucinógenas o medicinales, incluida la hoja de coca. Eran, por lo tanto, herramientas muy utilizadas en las ceremonias religiosas.
En algunos yacimientos arqueológicos de la cultura valdivia se han encontrado figurillas con forma femenina, normalmente desnudas.
Estas figuras elaboradas con barro y piedra han sido bautizadas como las venus valdivianas. Todas ellas tienen los mismos rasgos: incisiones con forma de grano de café para representar los ojos; líneas gruesas de cejas que llegan hasta formar la nariz; brazos junto al cuerpo; y piernas sin pies.
Sus formas son redondeadas y los rasgos sexuales, sobre todo los pechos, están muy marcados. Por último, todas llevan peinados complejos.
La finalidad de estas figuras sigue siendo objeto de debate. Muchas fueron encontradas en las tumbas o enterradas en el campo, por lo que se especula que pudieron ser una especie de talismán para mejorar la fertilidad de la tierra.
Al igual que pasaba con el resto de las culturas precolombinas, la de valdivia adoraba a dioses relacionados con la naturaleza. Algunos de ellos se representaban con forma de animal, aunque se desconoce su nombre.
La mayoría de los rituales tenían como propósito pedir la fertilidad, tanto de las mujeres como de las cosechas.
Esas ceremonias eran dirigidas por chamanes, la máxima autoridad religiosa. Eran, además, los que elaboraban los calendarios rituales para controlar la producción, así como los ritos para que lloviera.
Las pruebas encontradas han llevado a los arqueólogos a afirmar que la cultura valdivia comenzó siendo un pueblo nómada de recolectores y cazadores.
Con el tiempo, sus actividades productivas fueron evolucionando hasta tener una economía mixta. En esta fase, su alimentación procedía tanto del mar como de la agricultura. Los restos muestran que los moluscos eran su principal fuente de alimentos procedentes del mar.
No se sabe exactamente en qué momento la cultura valdivia comenzó a practicar la agricultura. Los arqueólogos han hallado restos de herramientas, de canales de riego y de desechos vegetales, lo que prueba que a partir de cierta época comenzaron a cultivar los terrenos que habitaban.
Entre los productos que más cultivaban se encontraban la mandioca, el cacahuete, la calabaza, el algodón y la batata.
Además de esta actividad, los miembros de esta cultura también comenzaron a criar animales. Esta incipiente ganadería, unida a la agricultura, propició que adoptaran el sedentarismo como estilo de vida.
El hallazgo de un gran número de recipientes para guardar alimentos ha llevado a que se piense que llegó un momento en que obtuvieron excedentes, que se almacenaban para los periodos de escasez.
- Enciclopedia del Ecuador. Cultura Valdivia. Obtenido de enciclopediadelecuador.com
- EcuRed. Valdivia (cultura precolombina). Obtenido de ecured.cu
- Diario Correo. Cultura Valdivia es considerada una de las más antiguas de Sudamérica. Obtenido de diariocorreo.com.ec
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- Encyclopedia of Latin American History and Culture. Valdivia Culture. Obtenido de encyclopedia.com
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- Lumen Learning. The Valdivia Culture. Obtenido de courses.lumenlearning.com