Temístocles: biografía, batallas y guerras, frases atribuidas
Temístocles (c. 524 a. C. – 459 a. C.) fue un político, militar, estadista y estratega ateniense. Perteneció al bando de los populistas durante el surgimiento de la democracia en Atenas, de la que fue uno de los líderes más prominentes.
A partir del 493 a. C., Temístocles se desempeñó como arconte, es decir, uno de los miembros altos del gobierno democrático en la polis. Gracias a su visión Atenas se alzó como una de las potencias navales más importantes del mundo antiguo.
Consiguió armar una flota de aproximadamente 200 trirremes en mejor condición que muchos de los barcos enemigos. Se le ha considerado uno de los héroes atenienses durante las guerras médicas que se libraron contra los persas.
En la primera oportunidad figuró como uno de los 10 strategos, luego en la segunda fue uno de los responsables por las victorias obtenidas y destacaron sus participaciones en Artemisio y Salamina, que fueron decisivas.
Aunque fue él quien condujo a su ciudad al poderío dentro del mundo helénico, Temístocles dejó de ser el hombre del momento y fue esta debacle en su popularidad lo que lo llevó al exilio de Atenas alrededor del 472 a. C.
Su pena luego fue cambiada a una condena a muerte, pues se dijo que había intervenido a favor de Persia en la segunda guerra médica.
Temístocles huyó y en el Imperio arqueménida le nombraron gobernador de una región en Asia Menor, donde murió tiempo más tarde en el 459 a. C.
Índice del artículo
Primeros años
Temístocles nació aproximadamente en el 524 a. C., en el demo ateniense de Frearri. Fue hijo de Neocles, descendiente de la familia de los Licomedas, pero venido a menos.
Su madre era una extranjera, cuya identidad está mal documentada por las fuentes contemporáneas. Se piensa que pudo tratarse de Abrotonon, una mujer de Tracia, o de Euterpe, oriunda de Halicarnaso.
Sea cual fuere su identidad, se sabe que ella era una concubina y que provenía de tierras extranjeras. Además, se ha dicho que el padre de Temístocles era de clase media.
La audacia y el liderazgo de Temístocles se remontan a su infancia, época en la que se dice que convenció a jóvenes que pertenecían a importantes familias de Atenas para que jugaran y se ejercitaran con él en la zona en la que vivía, que no tenía una buena fama.
Formación
Temístocles obtuvo la ciudadanía tras un decreto que fue impulsado por Cleistenes en el 508. Gracias a esa acción todos los hombres libres de Atenas pudieron conseguir derechos plenos como ciudadanos.
El muchacho no era un estudiante particularmente destacado, cualidades que eran fundamentales para ser apreciado por la sociedad ateniense contemporánea. En cambio, el joven era regularmente visto como inculto y arrogante.
No obstante algo que sí le interesó aprender desde una tierna edad fue la oratoria y la redacción de discursos, actividades que practicaba con regularidad. Así mismo, se piensa que desde su juventud sintió inclinación por materias de Estado.
Familia
Temístocles tuvo varios matrimonios de los cuales procreó 10 hijos, 5 varones y 5 hembras. De los hombres uno de los mayores, llamado Neocles, murió temprano.
Otro llamado Diocles fue adoptado por su abuelo Lisandro de Alopecia, padre de una de las esposas de Temístocles llamada Archippe. Sus otros hijos se llamaron Arqueptolio, Polieucto y Cleofanto.
Arqueptolio se casó con su media hermana, también hija de Temístocles, llamada Mnesiptolema.
Las otras hijas del ateniense se llamaron Sibaris, esta contrajo nupcias con Nicomedes el ateniense, después estaba Italia, quien se casó con Panthoides.
También Temístocles fue el padre de Nicomaca, que se casó con su primo llamado Frasicles. El matrimonio tomó a su cargo a la menor de las hijas de Temístocles, que se llamaba Asia.
Carrera
Temístocles fue electo arconte epónimo en el 493 a. C. En el momento este era el cargo de mayor prestigio, relevancia y responsabilidad dentro de la ciudad.
Este ateniense comenzó a formar parte de los registros escritos desde ese punto. Temístocles dejó un profundo impacto en la historia que trascendió su vida.
Desde el principio ambicionó una Atenas cuya fuerza principal se encontrara en el mar. Impulsó obras públicas desde su cargo de arconte: se encargó de convertir playas desprotegidas en puertos seguros.
La democracia, aunque era reciente en Atenas, le permitió a Temístocles que un valioso estadista podía provenir de cualquier cuna. Tomando partido de su buena estrella con la gente común, se mudó a una zona popular de la ciudad.
Esa fue la base de su apoyo político, el pueblo, por quien siempre abogó, pero fue lo suficientemente sabio como para no descuidar a los nobles, a quienes también procuró mantener a gusto.
Temístocles fue el primero en iniciar su carrera como servidor público ejerciendo la profesión de abogado.
En esta época el ostracismo comenzó a ser aplicado tras el juicio de Miltíades y la muerte de esa figura fue uno de los vacíos que llenó Temístocles por ser la nueva cara del bando popular.
Rivalidades internas
El principal contrincante de Temístocles en el ámbito político ateniense era Arístides, quien se presentaba como la antítesis de su contraparte demócrata y era apodado “el Justo” por sus partidarios.
Jerjes I se preparaba para invadir Grecia, de modo que tomaría el testigo de lo emprendido por su padre, Darío el Grande, en la primera guerra médica. Por eso Temístocles seguía abogando por hacer de Atenas una potencia marítima.
El interés de los persas aunque había sido calmado por un breve lapso de tiempo seguía latente.
Por otro lado, Arístides, quien era partidario de las grandes familias aristócratas que controlaban la caballería y conformaban gran parte de los cuerpos de hoplitas, prefería favorecer a estos.
En cambio en la flota la mayor porción de sus componentes provenían de familias de clase media o baja.
Las embarcaciones persas tenían una gran reputación, por lo que Temístocles pensó que allí podría darse la verdadera definición del enfrentamiento si este llegaba producirse.
La flota crece
En el 483 a. C., se encontraron grandes reservas de plata en Laurium, aunque Arístides había propuesto que el ingreso extra fuese repartido entre los ciudadanos atenienses.
Temístocles dijo que mejor sería invertirlo en crear una nueva flota y aunque propuso 200 trirremes, solo consiguió 100.
No quiso mencionar en su discurso a los persas, porque para los atenienses esta amenaza ya había acabado, sino que les dijo que debían concluir su enfrentamiento con Egina y el método más eficiente sería aumentando su poder naval.
La riña entre Temístocles y Arístides concluyó con la elección de alguno de ellos para ser sentenciado al ostracismo, el seleccionado fue el segundo.
Entonces, Atenas ratificó todas las políticas democráticas y populares de Temístocles, quien pasó a ser el protagonista indiscutible de los asuntos públicos de la polis y uno de los líderes más grandes de Grecia en su tiempo.
Batallas y guerras
Aunque participó en la primera guerra médica como uno de los strategos, no tuvo un rol de la magnitud que en la segunda parte de esos enfrentamientos.
En agosto del 480 a. C., Jerjes I se encontró en Termópilas con los hombres griegos, comandados por Leónidas y sus espartanos, quienes lograron detenerlo durante 3 días enteros.
Mientras tanto el resto de las defensas maniobraban y preparaban la estrategia para hacer frente al persa.
En paralelo la flota griega que estaba bajo el comando de Temístocles se presentó a la batalla en Artemisio, en esa oportunidad el estratega ateniense dio la orden de que se abandonara la ciudad.
La flota griega se reunió en Salamina y lograron conseguir cerca de 300 barcos en total. En ese momento los persas contaban con aproximadamente unas 500 naves, según las cuentas modernas.
Los conflictos internos llevaron a mensajes cruzados de parte de los griegos. Los persas bloquearon los estrechos en Corintios con lo que dejaron a los griegos encerrados.
Gracias a la movilidad de la flota griega y su ubicación en territorio amigo ellos no sufrieron tanto como los persas.
Desde esa victoria, Temístocles fue reconocido como un héroe por todos los pueblos de Grecia, incluyendo a los espartanos, quienes eran sus más acérrimos detractores dentro de la región.
Jerjes I regresó a Persia tras la derrota, pero dejó encargadas de sus tropas a Mardonio, que fue vencido en Platea por el ejército terrestre griego comandado por Jantipo y Arístides, que había regresado del exilio.
Tras la victoria
Después de haber asegurado acabar con el peligro persa, Temístocles se dedicó a fortificar rápidamente Atenas, que había sido arrasada durante la ocupación de los arqueménidas. Estos proyectos comenzaron en otoño del 479 a. C.
Fue gracias a la audacia de Temístocles que los atenienses pudieron erigir nuevamente sus murallas, puesto que Esparta protestó.
También en el 478 a. C. se constituyó la Liga de Delos, en la que se unieron las potencias del Egeo junto con Jonia en una alianza comandada por Atenas.
Con el propósito de elevar la ciudad en un aspecto económico, Temístocles propuso crear exenciones de impuestos para mercantes y artesanos que decidieran establecer su base en Atenas.
También instituyó la creación de 20 trirremes anuales para conservar el poderío naval.
Caída y exilio
Temístocles se había hecho con enemigos que lo consideraban arrogante. Otros se molestaron al ver que alguien de un bajo origen se había elevado hasta las cumbres del poder en la Grecia de la época.
Los espartanos preferían apoyar el ascenso de Cimón, a quien creían menos perjudicial en cuanto a sus intereses. Entre el 472 y el 471 a. C., Temístocles fue condenado al ostracismo, pero no por haber hecho algo mal, sino para calmar el escenario político ateniense.
El político y estratega se marchó a Argos. En ese momento los espartanos aprovecharon para difundir intrigas en contra del líder popular de Atenas, que fue acusado de muchos cargos, entre ellos de complicidad en la traición perpetrada por Pausanias.
Se hizo hincapié en que el juicio debía ser celebrado por todos los helenos, no únicamente por atenienses. Temístocles no acudió al llamado que se le hizo para el juicio que fue celebrado en Atenas y eso fue interpretado como una confesión por los acusadores.
Sus propiedades fueron confiscadas y no tuvo otra opción sino huir: de Molosia pasó a Pidna y de allí a Asia Menor, aunque no se sabe con exactitud cuál fue su travesía, puesto que las fuentes de la época muestran distintos itinerarios de su viaje.
Muerte
Temístocles murió en Magnesia en el 459 a. C. Según datos oficiales su deceso se dio por causas naturales, pero otros sugirieron que había sido inducido a suicidarse tras no cumplir con promesas hechas al emperador persa.
Tiempo antes de su muerte el ateniense había sido nombrado gobernador por Artajerjes I, el hijo de Jerjes, que fue su enemigo en batalla. Cuando llegó a sus dominios, se presentó ante el nuevo emperador y le ofreció sus servicios.
Se dijo que ningún otro griego obtuvo en alguna corte persa tanta consideración como se le concedió a Temístocles, que, incluso, obtuvo un cargo como gobernador en Magnesia.
Frases atribuidas
– “Prefiero un hombre agradable que un hombre adinerado. Es preferible un hombre sin dinero que dinero sin hombre”.
Citado por P. Archer.
– “Nunca aprendí a afinar un arpa o a tocar la lira, pero sé cómo elevar una pequeña e insignificante ciudad a la gloria”.
Originalmente citado por Plutarco.
– “El que controla el mar lo controla todo”.
Originalmente citado por Cicerón.
– “Pega, pero escucha”.
Originalmente citado por Plutarco.
– “Que nunca me siente en un tribunal en el que mis amigos no puedan hallar más favor de mí que de un extraño”.
Originalmente citado por Plutarco.
– “Eres el hombre más poderoso entre todos los helenos, porque Atenas gobierna al resto de Grecia, yo gobierno a los atenienses, tu madre me gobierna y tú gobiernas a tu madre”.
Esta frase fue dicha supuestamente por Temístocles a uno de sus hijos.
– “Llevo conmigo dos dioses, Persuasión y Obligación”.
Originalmente citado por Heródoto.
– “Los pensamientos son como tapices enrollados. La conversación los despliega y los saca a la luz”.