Nutrición

Consecuencias de una mala alimentación (niños y adultos)


Las consecuencias de una mala alimentación son más serias de lo que la gente suele suponer, especialmente en el desarrollo de enfermedades graves. Para evitar esos efectos nocivos es necesario una buena educación y conocimientos en el campo de la nutrición.

Por supuesto, no es necesario que te hagas experto, pero sí conocer lo más importante. En el mundo actual existen dos principales problemas relacionados con la nutrición: la obesidad y el hambre, dos opuestos.

Lo increíble es que la obesidad es actualmente más común que la desnutrición. Con el desarrollo de los países del tercer mundo y las nuevas tecnologías, cada vez hay menos hambre. Pero cada vez hay peores hábitos alimenticios y más sedentarismo.

Sin duda, una buena alimentación es esencial para mantenerse sanos física y mentalmente. Sus causas suelen ser los malos hábitos que se han ido adoptando desde la infancia. Se come más de lo que se debe y además muchos alimentos que no se deberían consumir.

Por otra parte, cada vez hay más personas sedentarias, por lo que se consumen muchas más calorías de las que se gastan, resultando este desequilibrio en la acumulación de grasas.

Causas de la mala alimentación

Antes de comenzar con las consecuencias, puede que te preguntes, ¿qué lleva a una persona a alimentarse mal? Las tres causas principales son:

Falta de educación

La educación nutricional es fundamental para desarrollar buenos hábitos alimenticios, sin embargo, no está extendida en los planes educativos de colegios, institutos y universidades.

Hábitos y aprendizaje

Si un niño vive en una familia con malos hábitos alimenticios, es mucho más probable que aprenda esos mismos hábitos y que desarrolle obesidad y otros problemas nutricionales.

Recursos

Los recursos que tiene cada familia o persona influyen en su alimentación.

Una familia puede tener dinero para comprar cierta clase de alimentos y no otros. Por ejemplo, en Estados Unidos la clase baja consume más comida rápida (repleta de azúcares y carbohidratos simples, como las patatas fritas, hamburguesas, pizzas y donas).

Por otra parte, hay cierta clase de alimentos que son más costosos dependiendo del país. Por ejemplo, el pescado suele ser más caro.

¿Cuáles son las consecuencias de una mala alimentación?

Obesidad o sobrepeso, cansancio y menor capacidad de trabajar

La obesidad que sufren algunas personas es genética, aunque gran parte de ella es debida a una mala alimentación y al sedentarismo.

A continuación te dejamos algunos datos que indican la importancia del problema:

  • Desde 1980, la obesidad se ha más que doblado en todo el mundo.
  • Para 2016 había más de 1.900 millones de adultos con sobrepeso, y más de 650 millones eran obesos.
  • En 2013, más de 42 millones de niños menores de 5 años tenían sobrepeso.
  • En 2014, más de 1.900 millones de adultos de 18 o más años tenían sobrepeso, de los cuales, más de 600 millones eran obesos.
  • En 2014, el 39% de las personas adultas de 18 o más años tenían sobrepeso, y el 13% eran obesas.

Alta presión arterial (hipertensión)

Según la OMS (Organización Mundial de la Salud), las complicaciones de la hipertensión causan anualmente 9,4 millones de muertes. La hipertensión es la causa de por lo menos el 45% de las muertes por cardiopatías, y el 51% de las muertes por accidente cerebrovascular.

La hipertensión se puede prevenir modificando factores de riesgo relacionados con el comportamiento, como la dieta malsana, el uso nocivo del alcohol o la inactividad física. El tabaco puede aumentar el riesgo de complicaciones de la hipertensión. 

Enfermedades cardiovasculares

Según la OMS:

  • 17 millones de personas murieron por enfermedades cardiovasculares en 2008.
  • 23,3 millones de personas podrían morir por ECV en 2030.
  • El consumo de tabaco, una dieta inadecuada y la inactividad física aumentan el riesgo de infartos de miocardio y accidentes cerebrovasculares.

La realización de actividad física durante al menos 30 minutos todos los días de la semana ayuda a prevenir los infartos de miocardio y los accidentes cerebrovasculares.

Comer al menos 5 raciones de frutas y hortalizas al día y limitar el consumo de sal a menos de una cucharilla al día también ayuda a prevenir los infartos de miocardio y los accidentes cerebrovasculares.

Depresión

Está demostrado que el exceso de peso se asocia con un mayor riesgo de sufrir cuadros depresivos.

  • La depresión es un trastorno mental frecuente que afecta a más de 350 millones de personas en el mundo.
  • La depresión es la principal causa mundial de discapacidad y contribuye de forma muy importante a la carga mundial de morbilidad.
  • La depresión afecta más a la mujer que al hombre.
  • En el peor de los casos, la depresión puede llevar al suicidio.
  • Hay tratamientos eficaces para la depresión.

Diabetes

  • En el mundo hay más de 347 millones de personas con diabetes.
  • Se prevé que la diabetes se convierta en el año 2030 en la séptima causa mundial de muerte.

30 minutos de actividad física de intensidad moderada al menos 5 días a la semana y una dieta saludable pueden reducir drásticamente el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. La diabetes tipo 1 no puede prevenirse.

Cáncer

Más del 30% de los cánceres se podrían prevenir, principalmente evitando el tabaco, tomando alimentos sanos, realizando alguna actividad física y moderando el consumo de alcohol. 

  • En 2012 murieron de cáncer 8,2 millones de personas. 

Mal funcionamiento cerebral

Las dietas ricas en vitaminas B, C, D y E y ácidos omega-3 se recomiendan para un buen funcionamiento cerebral, mientras que las altas en grasas trans aceleran el envejecimiento cerebral, empeorando, por tanto, su correcto funcionamiento.

Especialmente, las dietas altas en azúcar son sumamente tóxicas; disminuyen el nivel de vitamina E en sangre, pueden provocar somnolencia, irritabilidad o incapacidad de concentrarse.

Además de una correcta alimentación, el ejercicio mejorará la circulación de la sangre hacia el cerebro y en consecuencia su correcto funcionamiento.

Envejecimiento acelerado

Comer en exceso y alimentos inadecuados produce una aceleración del envejecimiento celular. 

Alimentos con alto contenido en azúcar, la bollería, carnes rojas y cualquiera que esté excesivamente frito pueden acelerar el envejecimiento. Los alimentos con un alto nivel de antioxidantes, como el maní o el té verde, protegen a las células de los radicales libres y previenen el envejecimiento prematuro.

Problemas de sueño

Tanto irse a la cama con apetito como irse habiendo comido demasiado, pueden causar problemas de sueño. 

Además de comer en exceso, se debe evitar también los alimentos muy picantes, los altos en grasas y los que puedan producir gases o indigestión.

Menor autoestima

Un buen físico ayuda a una autoestima positiva, al igual que tener sobrepeso la puede disminuir.

Por otra parte, comer en exceso puede provocar sentimientos de depresión, culpa o vergüenza e interferir con los niveles de azúcar en sangre, lo cual altera los estados de ánimo positivos.

Problemas de indigestión 

La indigestión, la sensación incómoda que se da en la parte superior del abdomen tras comer, puede producirse por comer alimentos altos en grasas, bebidas con gas, alcohol o cafeína.