Animales

Cubozoos: características, hábitat, reproducción, alimentación


Cubozoa es una clase del filo cnidaria que está conformada por medusas que se caracterizan por la forma cúbica de su umbrela. También son conocidas como cubozoos, cubomedusas o medusas en forma de caja. La clase fue descrita por primera vez por el naturalista alemán Ernst Haeckel, quien se encargó de dilucidar la mayor cantidad de aspectos referentes a este tipo de medusas.

Estas medusas son propias de ambientes marinos australianos, aunque también es posible encontrarlas en las costas mexicanas. Su principal característica distintiva es la toxina que sintetizan los millones de cnidocitos que plagan sus tentáculos, convirtiéndolas en uno de los animales marinos más temibles de todo el mundo.

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Taxonomía

La clasificación taxonómica de las cubomedusas es la siguiente:

– Dominio: Eukarya.

– Reino: Animalia.

– Filo: Cnidaria.

– Subfilo: Medusozoa.

– Clase: Cubozoa.

– Orden: Cubomedusae.

Características

Las cubomedusas son organismos que, a pesar de pertenecer al filo más primitivo del reino animalia, están conformados por diversos tipos de células especializadas. Así mismo, el material genético (ADN) se encuentra delimitado dentro del núcleo celular. Es por esto que se afirma que son organismos eucariotas pluricelulares.

De igual forma, son animales que presentan una simetría de tipo radial, ya que todas las partes de su cuerpo se encuentran distribuidas en torno a un eje central.

Así mismo, son organismos diblásticos porque durante su desarrollo embrionario solo aparecen dos capas germinativas, una externa llamada ectodermo y una interna denominada endodermo. Esas capas son las que finalmente dan origen a los diversos tejidos y órganos que conforman a la medusa adulta.

Al igual que en otros tipos de medusas, las cubomedusas son dioicas. Esto implica que los sexos se encuentran separados. Es decir, hay individuos de sexo femenino e individuos de sexo masculino.

Por otra parte, las cubomedusas sintetizan potentes toxinas que utilizan para paralizar, inutilizar y finalmente matar a su presa. Sin embargo, en muchas ocasiones la víctima de esa toxina ha sido el ser humano. Está plenamente demostrado que el veneno secretado por algunas especies de cubomedusas es el más potente conocido hasta ahora en el reino animal.

Morfología

La principal característica morfológica de las cubozoas y que le da el nombre a este grupo, es que su umbrela tiene forma de cubo o de caja, presentando cuatro caras planas. En cuanto al tamaño, la umbrela puede alcanzar hasta unos 25cm dependiendo, por supuesto, de la especie.

En el borde de la umbrela se presenta una pequeña prolongación de tejido traslúcido que recibe el nombre de velario. Este participa activamente en el desplazamiento de la medusa.

Así mismo, en cada vértice de la umbrela se presentan unos engrosamientos de tejido denominados pedalia. A partir de estos se desprenden los tentáculos de la medusa. Cada especie tiene un número característico de tentáculos. Por ejemplo, Chironex fleckeri tiene 15 tentáculos en cada pedalia, en tanto que Carybdea sivickisi presenta un solo tentáculo por pedalia.

Entre las pedalias se encuentran unas estructuras de tipo sensorial conocidas como ropalias. Cada una presenta un estatocisto y seis ojos. De esos seis ojos, cuatro son de tipo simple, en tanto que los otros dos son muy complejos, conformados por una córnea epidérmica, una lente compuesta por células esferoidales y la retina vertical.

En la cara interna de la umbrela se presenta una proyección que lleva por nombre manubrio. En el extremo del manubrio se localiza una abertura que corresponde a la boca. Esta se abre a una cavidad que ocupa casi todo el interior de la umbrela: la cavidad gastrovascular.

En esa cavidad no tienen canales radiales. En su lugar presentan las llamadas bolsas radiales que son de gran tamaño. Igualmente presentan unos filamentos gástricos que se proyectan hacia el interior de la cavidad gastrovascular.

Sistema nervioso

El sistema nervioso de las cubomeduzas es mucho más complejo que el de otros miembros del filo cnidaria. Está conformado por una red de nervios que se distribuye por toda la umbrela y que se conecta con un anillo nervioso que se encuentra en la región subumbrelar.

Así mismo, posee receptores especializados, tanto en los estímulos visuales como en lo referente al equilibrio.

Sistema reproductor

Al igual que en el resto de las medusas, su sistema reproductor se limita a las gónadas que producen los gametos, femeninos y masculinos, así como también un pequeño conducto mediante el cual esos gametos son liberados.

Las gónadas se encuentran localizadas en la parte interna de la pared de la cavidad gastrovascular, específicamente en las cuatro esquinas de esta.

Sistema digestivo

Es muy sencillo y rudimentario. Carece de órganos especializados. Contempla una sola abertura, la boca, que cumple dos funciones: el ingreso de los nutrientes y la excreción de los desechos. Así mismo, la boca se abre hacia la cavidad gastrovascular, que es donde se realiza la digestión.

Este proceso es posible gracias a la secreción de algunas enzimas digestivas que permiten procesar y transformar los nutrientes.

Sistema muscular

De acuerdo a los diversos especialistas, se cree que las medusas pertenecientes a la clase cubozoa tienen un sistema muscular más desarrollado que el del resto de las medusas. Esto aún no ha sido comprobado del todo, por lo que aún se realizan estudios al respecto.

La aseveración anterior se debe a que las cubomedusas se desplazan sumamente rápido por el mar y parecen poder controlar la dirección en la cual se desplazan. Su rapidez es tal que alcanza hasta el metro en un tiempo de cinco a diez segundos.

El sistema muscular de estas medusas se encontraría localizado en la región subumbrelar.

Hábitat y distribución

Las cubomedusas son propias de ambientes marinos. Así mismo, tienen predilección por aguas cálidas de ubicación tropical o subtropical.

Este tipo de medusas son particularmente abundantes en algunas zonas de los océanos Pacífico, Índico y Atlántico. Se dan detectado especies en la costa australiana, especialmente en la gran barrera de Coral, en las costas de Filipinas y en el Golfo de México.

La observación y estudio de estas medusas en su hábitat natural ha resultado bastante difícil, ya que ante cualquier perturbación de su entorno tienden a nadar muy rápido y alejarse con bastante facilidad. Sin embargo y pese a esto, se ha determinado que durante el día prefieren ubicarse apenas por encima del lecho arenoso, en tanto que durante las noches tienden a subir a la superficie.

Estas medusas solo se ubican en aguas de temperaturas elevadas. Hasta ahora no hay registros de especies de cubomedusas en aguas frías.

Reproducción

A pesar de que la reproducción en las cubomedusas no está lo suficientemente bien estudiada, los especialistas coinciden en que el tipo de reproducción es sexual, ya que implica la fusión de gametos sexuales masculinos y femeninos.

De igual forma, en la mayoría de las especies la fecundación es de tipo externo, aunque hay unas pocas especies en la que se ha observado una especie de cópula con la consiguiente fecundación interna.

Para que se inicie el proceso reproductivo, lo primero que ocurre es la liberación de los gametos, óvulos y espermatozoides al agua. Allí se encuentran y ocurre la fusión de los gametos. Como producto de esto se forma una pequeña larva que presenta unos pequeños cilios en su superficie y tiene forma plana. Esa larva se denomina plánula.

Durante un período corto de tiempo la larva plánula se desplaza libremente en las corrientes marinas hasta que finalmente encuentra un lugar idóneo en el lecho marino y se fija en el sustrato. Allí fija se transforma en una estructura conocida como pólipo, que es similar a los pólipos que conforman a las anémonas de mar.

Posteriormente, el pólipo experimenta una transformación o metamorfosis y se convierte en una pequeña medusa juvenil. Finalmente esta se desarrolla y crece hasta llegar a ser una medusa adulta capaz de reproducirse.

Alimentación

Como el resto de los integrantes del filo cnidaria, las cubomedusas son carnívoras. Se alimentan de pequeños invertebrados acuáticos como crustáceos (cangrejos), pequeños peces y algunos moluscos (caracoles, mejillones y calamares).

Una vez percibe a la presa, la medusa le envuelve con sus tentáculos, inoculándola con su toxina, la cual causa dolor, parálisis e incluso la muerte casi instantánea. Posteriormente la presa es ingerida por la medusa a través de la boca y pasa directamente a la cavidad gastrovascular.

Allí es sometida a la acción de las diversas enzimas y sustancias digestivas que comienzan a degradarla para así poder absorber los nutrientes necesarios. Finalmente, las partículas que no fueron aprovechadas por el animal son excretadas a través de la boca.

Es importante destacar que estas medusas son depredadores muy eficaces en los ambientes marinos, ya que se desplazan muy rápido, pueden identificar posibles presas a través de sus receptores visuales y además cuentan con una de las toxinas más letales del reino animal.

Clasificación

Este tipo de medusa se encuentra clasificado en dos grandes órdenes: Carybdeida y Chirodropida.

Carybdeida

Este orden de medusas corresponde a ejemplares que, de manera general, presentan solo un tentáculo por cada ropalio, para un total de 4 de manera general.

Este orden abarca un total de cinco familias, entre las que se cuentan: Alatinidae, Carukiidae, Carybdeidae, Tamoyidae y Tripedaliidae.

Algunas medusas pertenecientes a este orden son: Carybdea arborífera y Carybdea marsupialis.

Chirodropida

Es un orden de cubomedusas que se caracteriza básicamente porque presenta bases musculares en cada esquina de la umbrela, de las cuales se desprenden varios tentáculos. Igualmente presentan pequeñas cápsulas asociadas a la cavidad gástrica.

Comprende unas tres familias: Chirodropidae, Chiropsalmidae y Chiropsellidae. Entre sus especies más conocidas destaca la Chironex fleckeri, mejor conocida como la avispa de mar, el ser vivo con el veneno más tóxico sobre la faz de la Tierra.

Referencias

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