Riesgo reproductivo: factores, valoración, prevención
El riesgo reproductivo se define como la probabilidad, bajo condiciones de embarazo no ideales, de muerte o de enfermedad que tiene tanto una mujer como su hijo(a) antes, durante y después del parto. Abarca, por lo tanto, todos los factores, condiciones y circunstancias que pueden alterar el curso normal de un embarazo y su culminación.
El riesgo reproductivo toma en consideración varios aspectos que incluyen los peligros potenciales, la intensidad de los mismos y el tiempo de exposición a estos. La estimación y cuantificación de los peligros brinda una medida del riesgo.
Existen riesgos presentes antes de la concepción (preconcepcionales), y otros que son posteriores al hecho biológico de la fecundación exitosa. Estos incluyen el riesgo obstétrico (marcha del embarazo), el riesgo perinatal (durante el parto) y el riesgo infantil (post parto).
El riesgo reproductivo varía en cada mujer, y en la misma, es distinto para cada embarazo. Finalmente, también se han creado índices que permiten valorar el riesgo reproductivo de una mujer de acuerdo a su país de residencia.
Índice del artículo
Factores de riesgo reproductivo
Son muchos los factores que pueden afectar negativamente el desarrollo de un embarazo. Entre ellos contamos:
Biológicos
- Edad: menor a 18 y mayor a 35 años.
- Desnutrición materna.
- Talla inferior a 150 cm.
- Afecciones asociadas a la salud de la madre: hipertensión arterial, asma bronquial, cardiopatías, endocrinopatías (diabetes, hipotiroidismo, etc.), neuropatías, epilepsia, etc.
- Aporte reproductivo de la pareja masculina. Vale decir, condición genética y epigenética de los espermatozoides, así como presencia de algún tóxico reproductivo en el semen de la pareja.
- Condición genética y epigenética de los óvulos, particularmente si la mujer es portadora de mutaciones que pudiesen afectar el desarrollo y término del embarazo.
- Calidad y condiciones de la lactancia biológica.
Obstétricos
- Abortos previos
- Número de partos previos
- Periodo intergenésicos cortos (tiempo entre dos nacidos vivos consecutivos)
- Defunciones neonatales y fetales previas
- Bajo peso del neonato al nacer
- RH sensibilizado
- Cesáreas previas, particularmente en los últimos dos años
Socioambientales
- Madre soltera
- Bajo nivel educativo
- Hábitos sexuales incompatibles con el embarazo
- Tabaquismo
- Alcoholismo
- Exposición a agentes bióticos y abióticos riesgosos para el feto o recién nacido, incluyendo fármacos prescritos a la madre.
Valoración del riesgo reproductivo
El riesgo reproductivo al que está expuesto una mujer se mide de acuerdo a índices como el PAI: tarjeta de reporte de “Population Action International”.
De acuerdo con este criterio aceptado internacionalmente, el riesgo reproductivo de una mujer se mide de acuerdo a la valoración de 10 indicadores, cada uno evaluado en una escala de 100 puntos, y luego promediado con todos para calcular el valor por persona.
Estos y otros indicadores, ayudan a estimar posteriormente el valor de riesgo por país. Es decir, cuán riesgoso es el embarazo en el país de residencia de la mujer embarazada.
De acuerdo con esto, los países son considerados como de muy alto (60 o más puntos), alto (45-59 puntos), moderado (30-44 puntos), bajo (15-29 puntos) y muy bajo riesgo (menos de 15 puntos).
Aunque cada caso individual es distinto, el PAI brinda una valoración general basada en el aporte numérico que aporta cada caso particular. Los indicadores cuantitativos que considera el PAI para medir el riesgo reproductivo de una mujer (y globalmente, del país donde vive) incluyen:
- Prevalencia del VIH (Virus de Inmunodeficiencia Humano) entre adultos de 15-49 años de edad
- Fertilidad adolescente
- Fracción femenina cursando estudios secundarios
- Porcentaje de analfabetismo femenino
- Cuidado antenatal (al menos 4 visitas previas)
- Porcentaje de prevalencia contraceptiva
- Nacimientos atendidos por personal calificado
- Razones que permiten el aborto legal (las razones ordinales se transforman en valores numéricos)
- Mortalidad materna
- Mortalidad infantil
Prevención
Un embarazo deseado es una de las principales condiciones para garantizar una adecuada disposición emocional y psicológica de la mujer gestante. En tales condiciones, la propia mujer es aliada en la valoración de las medidas a tomar para contrarrestar el riesgo reproductivo.
Cuidar a la futura madre es cuidar a la mujer y su hijo(a). Lo que se le recomienda a cualquier persona para mantener su salud es más aplicable aún a la mujer embarazada, con sus excepciones. Estas son algunas de las medidas más importantes de prevención:
- Una dieta balanceada, y que sea alta en fibras y baja en grasas.
- Beber abundante agua.
- Ejercicio regular, adecuado para la condición. Sin embargo, en ciertos casos, el reposo (incluso absoluto) es lo indicado.
- Mantener un peso saludable.
- Atender adecuadamente cualquier condición médica previa.
- Dormir y descansar lo suficiente.
- Evitar a toda costa el consumo de tóxicos, así como hábitos como el tabaquismo
- Un manejo amigable del estrés, que no incluya, por ejemplo, el consumo de fármacos u otras drogas.
Se deben reducir al máximo los riesgos ocupacionales de la madre. Si esta trabaja, debe considerarse, por ejemplo, evitar o minimizar el contacto con agentes tóxicos, el trabajo pesado, el estrés innecesario.
Finalmente, la atención al infante debería llevarse a cabo atendiendo a la naturaleza única de cada nuevo individuo. Pero este es también un individuo dependiente de un vínculo que, obedeciendo a su funcionamiento, incidirá en la salud de ambos.
Al momento de nacer, debe hacerse las valoraciones necesarias mínimas para estimar la salud general del recién nacido. Las medidas de peso, talla, ritmo cardíaco, tasa respiratoria, por ejemplo, son fundamentales para tal fin.
Más adelante, el seguimiento del crecimiento (en términos de peso y talla) indicará si se va por buen camino.
Los estudios genéticos básicos, así como los específicos atendiendo a los antecedentes de los progenitores, son fundamentales para garantizar la vida y bienestar del recién nacido. Estos podrían significar la adopción de dietas especiales, tratamientos o terapias particulares, etc.
Referencias
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