Eduardo Mallea: biografía, estilo y obras
Eduardo Mallea (1903-1982) fue un diplomático, narrador, ensayista y escritor oriundo de Bahía Blanca, reconocido en la actualidad como uno de los principales escritores de la literatura argentina del siglo XX.
Cursó estudios en Leyes durante cuatro años en la Universidad de Buenos Aires. Durante este período dio sus primeros pasos de publicaciones con escritos propios con obras como Cuentos para una inglesa desesperada en 1926 y Nocturno Europeo en 1934.
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Sus padres, ambos argentinos, fueron Narciso Segundo Mallea y Manuela Artiria. Su progenitor cursó estudios de medicina en Buenos Aires y sus primeros años como médico se desarrollaron en la provincia Benito Juárez y Azul.
Luego decidió mudarse junto con su familia a Bahía Blanca, donde había mucha más actividad comercial, gracias a la proximidad con la capital Buenos Aires. Hacia 1907, realizaron un viaje a Europa y en su regreso (1910), Eduardo Mallea fue inscrito en un colegio inglés.
En 1927 abandonó sus estudios en Leyes para poder dedicarse de lleno a la escritura, con un trabajo de redactor en el diario La Nación, donde ejerció por muchos años el cargo como director del suplemento literario.
Estuvo al frente del cargo de presidente en la Sociedad Argentina de Escritores (SADE), trabajo que desempeñó junto con su papel de diplomático representando a Argentina ante la Oficina Europea de las Naciones Unidas, en calidad de ministro plenipotenciario.
Hacia 1940 su obra escrita tenía una orientación hacia lo que estaba viendo a nivel nacional. Escribió sobre los problemas de su país, representando a las personas como individuos con valores endebles, con vida social, enfocándose especialmente en la representación de lo intangible del interior.
Eduardo Mallea representó en la gran mayoría de sus obras dos realidades que deseaba resaltar para demostrar su pensamiento. Buscó que se hiciera notable y que se interpretara lo que para él era la crisis espiritual, al mismo tiempo en el que deseaba actualizar la narrativa a las nuevas corrientes del contenido.
Una década después de esta etapa, en 1950, su atención en referencia al estilo se centró en la narrativa con relatos breves, junto con el ensayo. Esto último con énfasis en lo filosófico y lo sociopolítico, gracias a todo el movimiento peronista que rechazaba.
Incluso llegó a ser nombrado como uno de los creadores de la novela urbana, donde desahogó las frustraciones de toda la realidad a la que se enfrentó, quedando así su obra como testimonio de un período histórico para su país.
A raíz de la influencia médica de su padre, Eduardo Mallea tomó la academia como gran referencia para su trabajo. Varios autores coinciden al afirmar que la presencia de enciclopedias y guías educativas lo formaron en la lectura.
En 1916, cuando su familia volvió de su viaje a Europa, Mallea empezó con la producción de sus primeros relatos. En 1920 tuvo la iniciativa de publicar su primer cuento La Amazona. Luego, en 1923 el periódico La Nación publica Sonata de Soledad de su autoría.
Durante sus años de estudios universitarios, a pesar de haberlos abandonado, creó las obras Cuentos para una inglesa desesperada (1926) y Nocturno europeo (1934), enviando un mensaje claro y contundente que despejaba cualquier duda sobre su vocación: estaba hecho para la escritura.
Nuevamente, un espacio de periodismo le abrió las puertas para mostrar su talento, la Revista de Occidente realizó la publicación de su novela La angustia (1932).
La ciudad junto al río inmóvil fue editada en 1936, y un año después en Buenos Aires se publicó lo que sería una de sus obras más importantes: Historia de una pasión argentina.
Por medio de Historia de una pasión argentina, Mallea dejó clara su postura con relación a la coyuntura social y moral por la que atravesaba su país a través de su medio de expresión ya conocido, el ensayo.
Demostrando el alcance al que llegaría, la Revista Sur publicó su cuento Sumersión en Buenos Aires, obra que además fue publicada en Deutsche Zuricher Zeitung en Zúrich, e igualmente en L’Italia Letteraria de Roma, trascendiendo contundentemente las fronteras de Argentina y consolidándolo más allá de los aires de “promesa literaria” que poseía en principio.
La causa de Jacobo Uber, perdida (cuento) elevó a otro nivel su internacionalización tras su publicación en Madrid, España, a través del semanario Diablo mundo (“7 días del mundo”). Posteriormente fue editada en Argentina por la Revista Sur.
Mientras tanto, la novela corta La Angustia fue publicada en la Revista de Occidente en Madrid. Gracias a este tipo de publicaciones internacionales, Mallea comenzó a tener mayor repercusión a nivel mundial como personaje de la literatura latinoamericana.
Su talento llegó a apreciarse en grandes casas de estudio del mundo, como las universidades de Princeton y Yale, donde fue el invitado estelar para ofrecer conferencias a los estudiantes.
En su honor se entrega el Premio Especial Eduardo Mallea, que reconoce obras inéditas sobre tópicos referentes a la Argentina o cualquier otro país de América en las categorías narrativas (novela y cuento) y ensayo.
Cuentos para una inglesa desesperada, 1926.
Conocimiento y expresión de la Argentina (ensayo), 1935.
Nocturno europeo. Buenos Aires, 1935.
La ciudad junto al río inmóvil (novelas breves), 1936.
Historia de una pasión argentina (ensayo), 1937.
Fiesta en noviembre (novela), 1938.
Meditación en la costa (ensayo), 1939.
La bahía de silencio (novela), 1940.
El sayal y la púrpura (ensayos), 1941.
Todo verdor perecerá (novela), 1941.
Adiós a Lugones (ensayo), 1942 (Está incluido en El sayal y la púrpura).
Las águilas (novela), 1943.
Rodeada está de sueño (“Memorias poemáticas de un desconocido”), 1943.
El retorno (narración poemática), 1946.
El vínculo, Los Rembrandts, La rosa de Cernobbio (novelas cortas), 1946.
Los enemigos del alma (novela), 1950.
La torre (novela), 1951.
Chaves (novela), 1953.
La sala de espera (novela), 1953.
Notas de un novelista (ensayos), 1954.
Simbad (novela), 1957.
El gajo de enebro (tragedia en tres actos), 1957.
Posesión (novelas cortas), 1958.
La raza humana (narraciones), 1959.
La vida blanca (ensayo), 1960.
Las travesías (ensayos), volumen 1 en 1962, volumen 2 en 1962.
La representación de los aficionados (teatro), 1962.
La guerra interior (ensayo), 1963.
Poderío de la novela (ensayo), 1965.
El resentimiento (novelas), 1966.
La barra de hielo (novela), 1967.
La red (narraciones y cuentos), 1968.
La penúltima puerta (novela), 1969.
Gabriel Andaral (novela), 1971.
Triste piel del universo (novela), 1971.
- La Nación. “El domingo se recordará a Eduardo Mallea”. Argentina, 2003.
- Lago-Carballo, Antonio. “Eduardo Mallea: una pasión argentina”. Revista Aleph, Colombia, 2007.
- Gerse María. “Niveles narrativos en todo verdor perecerá de Eduardo Mallea”. 2002.
- Rodríguez Monegal, Emir. “Narradores de esta América”. 1992.
- Luis Borges, Jorge. “Textos recobrados (1956-1986)”. España, 2011.
- Baquero, Gastón. “Apuntes literarios de España y América”. 2014.