Objeto flexible: qué es y ejemplos
¿Qué es un objeto flexible?
Un objeto flexible es cualquier cosa que se pueda doblar, torcer, estirar, aplastar y, en general, deformar al aplicar una fuerza sin que el objeto se rompa, desgarre o quiebre.
La flexibilidad, que es la propiedad de un objeto de ser flexible, es de gran importancia para muchas aplicaciones. Por ejemplo, los hilos deben ser flexibles para poder tejerse y así crear telas.
Muchísimos materiales y objetos que utilizamos todos los días son flexibles. Desde la ropa que usamos, los cordones de nuestros zapatos, las hojas de un libro y las ramas de un árbol, hasta los cables eléctricos, los resortes y las láminas de acetato, son incontables los objetos flexibles que forman parte importante de nuestras vidas.
Ejemplos de objetos flexibles
Las ramas de un árbol
Las ramas de un árbol, en especial las ramas jóvenes que no son muy leñosas, suelen ser muy flexibles y, además, en muchos casos son elásticas.
Los resortes
Los resortes son objetos tanto flexibles como elásticos.
La tela
La tela es un buen ejemplo de un objeto que es muy flexible. De hecho, se puede doblar de cualquier manera sin que se rompa. Algunas telas son más flexibles y resistentes que otras, pero todas las telas son flexibles.
El bambú
La mayoría de nosotros alguna vez ha visto una planta de bambú con sus tallos largos y altos que se mueven y se tuercen sin romperse bajo el efecto del viento o por el peso de algún oso panda que quiere comer sus hojas.
Una manguera
Las mangueras son objetos flexibles. De hecho, son tan flexibles que pueden enrollarse y desenrollarse sin riesgo a que se rompan.
Una corbata
Si las corbatas no fueran flexibles, sería imposible amarrarlas con distintos nudos alrededor del cuello. De hecho, las corbatas se fabrican con telas las cuales son materiales flexibles, como vimos anteriormente.
Un clavo
Todo el que haya clavado muchos clavos utilizando un martillo, alguna vez le habrá dado un mal golpe a un clavo que termina doblándolo en lugar de introducirlo en la madera o donde quiera que se trata de introducir.
El alambre de cobre
Además de ser capaz de conducir la electricidad muy bien, la flexibilidad es una de las propiedades más importantes de los alambres de cobre que se utilizan para el cableado eléctrico en una edificación. Si no fuera flexible, sería imposible hacerlo pasar por todos los giros y cruces que el cableado debe recorrer al pasar de un cuarto al otro.
Una lámina de cartón
El cartón es flexible lo que permite doblarlo para fabricar cajas.
Las cuerdas de escalar
Las cuerdas de escalar son tanto flexibles como elásticas. Además, son objetos muy resistentes.
Una espada de esgrima
La flexibilidad de la espada de esgrima se pone en evidencia cuando el esgrimista le da una estocada a su oponente. La espada se dobla en forma de arco, pero no se rompe.
El caucho
El caucho es otro ejemplo de un objeto flexible y que además es elástico.
Una cabilla de construcción
Las cabillas se utilizan en construcción como refuerzos para fabricar columnas y bases de concreto armado. Una de las razones por las que se pueden utilizar para tal fin es porque son flexibles.
Una barra de silicón
Si tomamos una barra de silicón y la doblamos con todas nuestras fuerzas, esta se doblará, pero no se romperá, por lo que se trata de un objeto flexible.
Una bolsa plástica
Como su propio nombre lo indica, las bolsas plásticas son objetos flexibles y además plásticos. De hecho, están fabricados de un tipo especial de material denominado termoplástico, ya que al calentarse se pueden deformar con mayor facilidad para darles la forma deseada.
Una liga de hule
Las ligas de hule como las utilizadas en las resorteras son objetos muy flexibles y además muy elásticos. Su elasticidad es justamente lo que las hace útiles para fabricar resorteras.
La diferencia entre flexible, elástico y plástico
Es importante hacer una distinción entre otras propiedades de los materiales que muchas veces se confunden con la flexibilidad. Además de ser flexible, un objeto también puede ser elástico o plástico.
De hecho, los objetos elásticos también suelen ser flexibles, por lo que muchos piensas que son lo mismo. Sin embargo, hay una diferencia importante entre la flexibilidad y la elasticidad.
Objeto flexible y objeto elástico
Un objeto elástico también se puede deformar sin romperse al aplicarle una fuerza, al igual que los objetos flexibles. Sin embargo, lo que hace que un objeto sea elástico, es su capacidad de recuperar su forma una vez se deja de aplicar la fuerza que lo deformó.
Tomemos un resorte como ejemplo. Un resorte es un buen ejemplo de un objeto que es a su vez elástico y flexible. Cuando aplastamos, estiramos o doblamos un resorte, este cede y se deforma.
Esto quiere decir que se vuelve más corto (cuando lo aplastamos), más largo (cuando lo estiramos) o se vuelve curvo (cuando lo doblamos). Sin embargo, a pesar de que le podemos estar aplicando mucha fuerza, el resorte no se rompe.
Como el resorte se puede deformar sin romperse, entonces el resorte es un objeto flexible. Pero ¿qué sucede cuando soltamos el resorte? Este rápidamente vuelve a adquirir su longitud y forma original y queda como si nunca lo hubiéramos tocado. Como el resorte recupera su forma luego de soltarlo, entonces el resorte es también un objeto elástico.
Objeto flexible y objeto plástico
Los objetos plásticos son lo contrario de los objetos elásticos. Estos objetos cambian su forma estirándose o aplastándose o torciéndose cuando les aplicamos una fuerza, pero, a diferencia de los objetos elásticos, estos no recuperan su forma cuando dejamos de aplicar la fuerza.
Muchos objetos plásticos como un clavo, por ejemplo, se pueden deformar sin romperse, por lo que son objetos flexibles. Pero otros, como por ejemplo la plastilina, se rompen al doblarlos o al aplastarlos.