Psicología educativa

Educación inclusiva: principios, características de las escuelas, actividades


La educación inclusiva es un modelo de enseñanza que se centra en comprender y cubrir las necesidades de todos los individuos por igual, sin importar cuáles sean sus características diferenciadoras. Así, trata de entender aquello que necesita cada individuo sin importar su sexo, edad, origen, etnia o cultura.

Generalmente la educación inclusiva también pone un énfasis especial en ayudar a los estudiantes que tengan un mayor riesgo de sufrir exclusión social o de vivir episodios de marginalidad. Dentro de este grupo se suelen encontrar individuos de todo tipo de minorías, personas con discapacidad o miembros de familias con pocos recursos económicos.

Una de las características más importantes de la educación inclusiva es que comprende que cada alumno tiene unas necesidades, habilidades, capacidades y rasgos que le hacen diferente del resto. Debido a ello los profesores tienen que ser capaces de modificar los contenidos que imparten y de usar estrategias personalizadas para ayudar mejor a los estudiantes.

Por otro lado, la educación inclusiva va mucho más allá de lo que se ve en el aula durante el día a día. Muchos expertos creen que para poder alcanzar realmente los objetivos propuestos en este ámbito es necesario transformar por completo los sistemas educativos actuales, eliminando barreras y fomentando la participación de alumnos de características de todo tipo.

Índice del artículo

Principios de la educación inclusiva

La educación inclusiva tiene una serie de principios básicos:

– La educación es un derecho, no un privilegio

Uno de los principios más importantes dentro de la educación inclusiva es que considera que el aprendizaje es un derecho universal, que debe cumplirse independientemente de las características de la persona. De esta manera, los sistemas que se rigen según este punto de vista intentan garantizar la educación a todos los individuos.

Generalmente esto produce una serie de consecuencias, como por ejemplo el hecho de que se favorezca la educación pública frente a la privada. Además, también se busca adaptar el sistema educativo de tal manera que los alumnos reciban la mejor enseñanza posible, y se acepta a absolutamente todas las personas sin importar sus características.

– Todos los niños deben tener las mismas oportunidades

Por otra parte, la educación inclusiva considera que un sistema realmente justo es aquel que tiene en cuenta las diferencias de cada estudiante y trata de proporcionarle a todos ellos las ayudas que necesiten para alcanzar un nivel mínimo de aprendizaje. De esta manera, se trata de un modelo educativo flexible y centrado en alcanzar la igualdad.

En la práctica esto generalmente se traduce en un incremento de las ayudas para los alumnos que más dificultades presentan, como por ejemplo aquellos con algún tipo de discapacidad o que tengan graves problemas para seguir el ritmo normal de la clase.

Por otro lado, también se intenta que los alumnos más avanzados colaboren con aquellos que tienen más problemas.

– La educación debe adaptarse a cada alumno

Como ya hemos visto, la educación inclusiva pone su foco en permitir a todos los estudiantes llegar a unos niveles mínimos de conocimiento que se considera que son imprescindibles para el desarrollo de una vida normal. Sin embargo, no todos los estudiantes tienen las mismas facilidades para llegar hasta ellos.

Como consecuencia, una educación verdaderamente inclusiva tendrá que ser capaz de adaptarse a las condiciones particulares de cada alumno para permitirle alcanzar el nivel mínimo exigido con las mayores garantías. Esto puede significar muchas cosas distintas en función de las necesidades específicas de cada estudiante.

Por ejemplo, en el caso de un alumno con discapacidad intelectual probablemente implicará el nombramiento de un profesor de apoyo que le permita trabajar a su propio ritmo y de forma más personalizada. En el caso de un estudiante extranjero, por ejemplo, se le proporcionarán ayudas a la hora de adquirir el idioma en el que se están impartiendo las clases.

– Es necesario proteger a los alumnos en riesgo de exclusión

Por último, en muchos casos la educación inclusiva va mucho más allá de ayudar a los alumnos a alcanzar los niveles mínimos de aprendizaje. En la mayoría de ocasiones, los profesionales de este ámbito también tratan de solucionar no solo los problemas educativos sino también dotar a los estudiantes de los recursos que necesitan para desenvolverse en su día a día.

Generalmente los profesores que siguen un modelo de educación inclusiva colaboran con otros sectores como los servicios sociales, buscando ayudar a los alumnos que tengan un mayor riesgo de exclusión por razones como un bajo poder adquisitivo o la pertenencia a una minoría.

Características de las escuelas inclusivas

Las escuelas que se rigen por los principios de la educación inclusiva suelen basarse en una serie de principios que dirigen su actividad diaria. Aunque cada escuela trabaje de manera ligeramente distinta, en la mayoría de los casos sus características son muy similares:

– En estas escuelas se permite el acceso a todo tipo de alumnos, sin importar sus características o circunstancias personales.

– Persiguen que la calidad de vida de los niños aumente en todos lo ámbitos, y no solo a nivel de aprendizaje.

– Los profesores tienen el rol de guía y de apoyo, en lugar de dedicarse simplemente a transmitir conocimiento en clases magistrales.

– Las escuelas basadas en la educación inclusiva ven al niño como una persona autónoma y capaz, que puede conseguir su propia transformación.

– Se busca fomentar el pensamiento crítico de los alumnos y permitirles desarrollar sus propias ideas a la vez que aceptan aquellas que son diferentes.

– Los profesores deben evaluar el rendimiento de los alumnos no solo en base a sus resultados académicos, sino a otros factores como sus capacidades o su progreso global.

Actividades para fomentar la educación inclusiva

– Debates

Una de las herramientas fundamentales de la educación inclusiva son los debates, ya que permiten que los alumnos se vean expuestos a ideas diferentes a las suyas propias y comprendan los puntos de vista de otros estudiantes.

– Orientación individual

En la mayoría de escuelas inclusivas los alumnos que lo necesitan reciben sesiones de orientación individual, para ayudarles en los aspectos de su vida en los que tengan más problemas. Generalmente los orientadores son los que se encargan de esta tarea, pero también pueden hacerlo los profesores o psicólogos internos.

– Aprendizaje por descubrimiento

La mayoría de tareas de las escuelas inclusivas se basan en actividades más experienciales que las que se pueden encontrar en los colegios normales. Así, se fomenta que los estudiantes exploren el mundo por sí mismos y busquen sus propias respuestas a las dudas que les van surgiendo.

Referencias

  1. “¿Qué significa educación inclusiva?” en: Educación Inclusiva. Recuperado en: 02 Julio 2020 de Educación Inclusiva: inclusioneducativa.org.
  2. “¿Qué es la educación inclusiva y por qué es importante?” en: Educo. Recuperado en: 02 Julio 2020 de Educo: educo.org.
  3. “¿Qué es la educación inclusiva?” en: WebMD. Recuperado en: 02 Julio 2020 de WebMD: webmd.com.
  4. “Escuela inclusiva: 10 características” en: Doble Equipo. Recuperado en: 02 Julio 2020 de Doble Equipo: dobleequipovalencia.com.
  5. “Educación inclusiva” en: Wikipedia. Recuperado en: 02 Julio 2020 de Wikipedia: es.wikipedia.org.