Cultura general

Las 8 Leyendas y Mitos de Cajamarca Más Populares


Algunas de las leyendas y mitos de Cajamarca más populares son la del Cerro Campana, de la pampa de la culebra o el oro perdido de Atahualpa. Cajamarca es uno de los veinticuatros departamentos que, junto con la Provincia Constitucional del Callao, conforman la República del Perú.

Su capital, Cajamarca, es una de las provincias más antiguas de la sierra norte del Perú, y su capital, la ciudad de Cajamarca, forma parte del Patrimonio Histórico y Cultural de Las Américas desde el año 1986, declarado así por la Organización de Estados Americanos.

Sus mitos y leyendas provienen de una extensa tradición quechua, la cual se remonta a la expansión del imperio incaico en el siglo XV. Se caracterizan por tratar temas relacionados a la formación de paisajes y tesoros perdidos.

Estos relatos no dejaron de evolucionar y difundirse hasta mucho después de la independencia del Perú en 1821 y forman parte de la cultura y tradición cajamarquina.

Principales leyendas y mitos de Cajamarca

La Leyenda del Cerro Campana

El Cerro Campana es una colina ubicada al norte de la Provincia de San Ignacio. Cuenta la leyenda que aquí se ubicaba una importante ciudad, cuyos pobladores estaban en guerra con el jefe de una tribu cercana.

Este, en arranque de cólera, decidió buscar la ayuda de un brujo, el cual lanzó un hechizo sobre la población y los convirtió en roca.

Después de este suceso todos los jueves o viernes santos pueden escucharse gallos cantar, una banda de músicos y el sonido de una campana en esta colina.

Sobre la cima del cerro se encuentra la figura en piedra de una mujer sentada en un sillón, encantada por el hechizo del brujo cientos de años atrás. Bajo las rocas que rodean la figura se encuentra un manantial de agua cristalina que nunca enturbia.

Se dice que en este manantial se puede encontrar, a veces, una pequeña avecilla de oro, y quienes la ven enloquecen con su captura.

La laguna de Shururo

Según este mito, la laguna de Shururo se formó con las aguas que quedaron luego de que los genios del mal hicieron desaparecer la laguna sagrada.

Entonces, el dios Inti dispuso que un puma negro fuera la madre y que protegiera sus aguas de otros ataques.

Un día el puma salió a tomar sol y un cóndor lo elevó en el aire para matarlo. La laguna se elevó y lo defendió en medio de los truenos y la tempestad que se desató.

Al final ganó la laguna, pero redujo sus aguas y el puma herido no salió nunca más a tomar sol.

La aparición del hombre Huanca

De acuerdo con esta leyenda, Con Ticsi Viracocha creó al mundo y a sus pobladores. La pareja huanca —Atay Imapuramcapia y Uruchumpi— salió de un manantial que hizo brotar.

Ellos formaron el primer pueblo. Sin embargo, sus descendientes comenzaron a adorar al dios Huallallo Carhuancho.

Como castigo, Viracocha hizo que los invasores los sometieran y convirtió a Huallallo en el nevado Huaytapallana.

Los arrepentidos huancas construyeron el templo de Huarivilca para honrar nuevamente a su creador.

Leyenda sobre la aparición la Dolorosa de Cajamarca

Muchos mitos y leyendas de Cajamarca se entremezclan con las tradiciones de la fe católica. Tal es el caso de la devoción de sus pobladores a la Virgen de los Dolores, patrona de esta entidad. Desde 1942, cada 14 de junio sus fieles se reúnen para pedir su bendición.

Ahora bien, existen varias versiones en cuanto al origen de esta imagen. Una de las historias más divulgadas es que los carpinteros que la tallaron eran realmente ángeles convertidos en humanos.

Estos pidieron tallar a la Virgen donde no pudieran ser molestados y nunca comieron los alimentos que les traían. Cuando terminaron la imagen, desaparecieron sin dejar rastros.

Leyenda del Pampa de la Culebra

Esta leyenda nace de la tradición quechua y se remonta a épocas prehispánicas. La leyenda dice que los dioses de la selva enviaron a una serpiente, en épocas de cosecha, rumbo a Cajamarca, para mostrar su poderío sobre los pobladores debido a sus pecados.

Esta serpiente se iba acrecentando paso a paso al trepar la cordillera, devastando árboles y sembradíos, dejando a su paso ruina y destrucción.

Cientos de pobladores abandonaron la ciudad asolados por el pánico. Los que quedaron imploraron piedad a los dioses.

Calmados por los ruegos, los dioses resolvieron detener a la serpiente, dejando caer un rayo sobre ella. Esta dejó reposar su cadáver por toda la cordillera convirtiéndose en pampa.

Dicen los pobladores que cuando caen rayos sobre la pampa, son los dioses quienes los ocasionan, azotando a la pampa para que no vuelva a convertirse en serpiente.

Hoy día se ubica en la hacienda de Polloc, donde efectivamente parece que la forma de una serpiente reposara sobre la pampa que la envuelve, y cuya cabeza apunta a la ciudad Cajamarca.

Esta pampa ha servido durante siglos como pararrayos por razones desconocidas, lo que devino en cientos de versiones de esta misma leyenda.

El Oro Perdido de Atahualpa

En el año 1533, el último soberano inca, Atahualpa, era prisionero del imperio español en la ciudad de Cajamarca.

Este ordenó, para su rescate, una cuantiosa cantidad de oro, plata y gemas preciosas a su imperio, para ser entregada a su captor, el comandante Francisco Pizarro, y así conseguir su libertad.

Sin embargo, Pizarro falló a su promesa y condenó a Atahualpa a muerte antes de que se entregara el último cargamento de estos tesoros.

Se tiene entonces la creencia de que todas estas riquezas están escondidas en una cueva secreta, en la ruta en las que fueron llevadas estas mercancías hacia Cajamarca.⁵

Gentil Hualash

Una de las figuras míticas más difundidas del Perú es la de los gentiles. Huesos de los primeros indios que poblaron la tierra, adquieren apariencia humana durante la noche.

Asisten a las fiestas que se celebran en los pueblos cercanos para alegrarse. Antes del amanecer vuelven al cerro donde está su hogar, y se convierten nuevamente en huesos viejos de los primeros pobladores.

En Cajamarca se cuenta la historia de un gentil que bajó de los cerros llamado por las jarachupas y los añases para la trilla de Marcavalle, donde bailaban los mozos hualash con energía sobre las eras. Era un gentil alto y fino. Vestía poncho y sombrero de lana blanca.

Bailaba tan bien que cuando el gentil propuso su partida antes del amanecer, fue rodeado por un grupo de mujeres implorando que no se abandonara la fiesta.

En la fiesta nadie sabía que era gentil, por lo que lo rodearon entre cantos y bailes evitando su partida e ignorando sus advertencias.

El gentil gritaba “gentil tullo shallallan”, que significa “¿No escuchan cómo sonajean mis huesos de gentil?”.

Al salir el sol, el gentil cayó al suelo hecho huesos y polvo, junto con el poncho y el sombrero blanco, vacíos en el suelo.⁶

La Campana Perdida de Rodeopampa

Rodeopampa es una población rural ubicada en la provincia de San Miguel. Cuentan sus habitantes que hace mucho tiempo ya, un pastor se encontraba conduciendo su rebaño de ovejas por los pastizales de las afueras del pueblo, cuando de pronto escucho el sonido de una campana.

Siguiendo el sonido, descubrió que esta se hallaba bajo tierra, así que decidió llamar a sus vecinos para que lo ayudaran a cavar.

Luego de cavar todo el día, la encontraron a tres metros bajo tierra. Era una espléndida campana de oro.

Decidieron llevarla al pueblo y celebrar una gran fiesta, pero era tan pesada que ni la cantidad de fuerza de diez bueyes podía moverla. Resolvieron montarla sobre el lomo de una mula, la cual la cargaba sin esfuerzo alguno.

Al llegar al pueblo se encontraron con una gran celebración, llena de bandas de músicos y fuegos artificiales que asustaron a la mula.

El sonido de los cohetes aterró a la mula y, en un instante se convirtió en fuego, huyendo a la laguna de Mischacocha, donde se hundió junto con la campana.

Los habitantes creen que esta campana de oro sólido aún se encuentra al fondo de esta laguna.

Referencias

  1. Cajamarca. (s/f). United Nations Educational, Scientific and Cultural Organization. Recuperado el 20 de noviembre de 2017, de whc.unesco.org
  2. Arguedas, J. M. y Izquierdo Ríos, F. (Editores) (2009). Mitos, leyendas y cuentos peruanos. Madrid: Ediciones Siruela.
  3. El cerro campana (2014, mayo). En Una Leyenda Corta. Recuperado el 20 de noviembre de 2017, de unaleyendacorta.com
  4. Delgado Rodríguez, N. S. (2016). Condiciones que presenta el distrito de Celendín, provincia de Celendín, región Cajamarca para la práctica del turismo vivencial. Trabajo de grado presentado para optar al título de Licenciada en Turismo. Universidad Nacional de Trujillo, Perú.
  5. La aparición del hombre Huanca. (s/f). En IPerú. Recuperado el 20 de noviembre de 2017, de iperu.org
  6. Asencio, L. (2012, marzo 23). Madre de los Dolores, reina y patrona de Cajamarca. Recuperado el 20 de noviembre de 2017, de rpp.pe