Cultura general

Cultura japonesa: historia, tradiciones, costumbres, lengua


La cultura japonesa comprende, entre otros aspectos, las tradiciones, el idioma, el modo de relacionarse, la religión y las costumbres de Japón. Este país asiático se encuentra situado en el océano Pacífico, frente a China. Está compuesto de un archipiélago de unas 6852 islas. Su población, según los datos de 2005, es de 127 millones de habitantes.

La proximidad geográfica de China explica su gran influencia sobre la cultura japonesa tradicional. Esta tiene unos 2677 años de antigüedad y se caracteriza por su lengua, sus tradiciones y sus religiones propias. Una de las bases principales de esta cultura es el honor y las relaciones jerárquicas dentro de la comunidad.

El origen de la cultura japonesa fueron las sucesivas olas de inmigrantes llegadas desde al continente asiático y las islas del Pacífico. Tras una etapa de clara influencia china, Japón se aisló del resto del mundo durante el período del shogunato. Su derrota en la Segunda Guerra Mundial hizo que la influencia occidental aumentara de manera notable.

A pesar del aumento de esa influencia de Occidente, especialmente de Estados Unidos, Japón sigue hoy presentando manifestaciones culturales diferentes a las de otras partes del mundo. El sumo, la ceremonia del té, las geishas o el sushi son algunos de los aspectos más conocidos de su cultura.

Origen e historia

La formación de la cultura japonesa comenzó con la llegada de varias olas de inmigrantes procedentes de las islas del Pacífico y de China. Después, fue este último país el que más continuó influyendo en su vecino japonés.

La influencia china fue determinante en la llegada a Japón de la religión budista o de la caligrafía, entre otros aspectos.

Según algunos historiadores, la orografía de Japón fue otro de los aspectos que propiciaron las especificidades de la cultura nipona. Durante mucho tiempo, el país estaba dividido en pequeños estados independientes, con una élite militar, los samuráis, que seguían el código bushido. Este estaba basado en la disciplina, el respeto y la lealtad.

Etapas históricas

Los japoneses dividen su historia en seis grandes etapas. La primera, denominada Senshi, se prolongó entre el 1000 a. C. hasta el 710 d. C. Estuvo caracterizada por la introducción de la metalurgia, la agricultura y el uso de la cerámica.

Este periodo finalizó con la centralización política del país. El poder quedó en manos de la emperatriz Suiko.

En el 710 d. C. comenzó la siguiente etapa, la Kodai. El budismo y el confucianismo se usaron para legitimar y favorecer el poder central. El periodo finalizó en el 1185 d. C., cuando el clan gobernante, el Fujiwara, fue derrocado por la familia Taira.

La familia Taira fue apartada del poder por un shogun, Minamoto, que estableció un gobierno militar en el periodo Shusej (1185 – 1568 d. C.). Los intentos de invasión por parte de los mogoles acabó provocando una guerra civil.

En la siguiente etapa, llamada Kinsei (1568 – 1868 d.C.) se inició en proceso de unificación de Japón bajo un sistema feudal con el poder centralizado en manos de los samuráis.

El periodo Kindai comenzó en 1868 y finalizó en 1926. Durante esta etapa, Japón comenzó a abrirse al resto del mundo. Así, estableció relaciones diplomáticas y comerciales con otros países. Su cultura y su política empezó a sentir la influencia de occidente.

La última etapa histórica, la Gendai, empezó en 1926 y continúa en nuestro día. El acontecimiento más importante fue la participación japonesa en la Segunda Guerra Mundial. Derrotada por los aliados, el país necesitó reconstruirse por completo.

Shogunato

Desde mediados del siglo XVI habían comenzado a llegar a Japón misioneros cristianos procedentes de Portugal. Un siglo después, el gobierno militar de la época, el shogunato, consideró que esas misiones era parte de una estrategia para una invasión militar.

La respuesta de Japón fue cerrar sus fronteras a todo tipo de influencia occidental, lo que propició que la cultura japonesa se mantuviera sin cambios.

La situación de aislamiento se prolongó hasta el siglo XIX, cuando el país abolió el feudalismo y adoptó algunas instituciones políticas occidentales. Sin embargo, en el aspecto cultural los cambios tardaron aún más en llegar.

Tradiciones

Uno de los aspectos en el que los japoneses han mantenido sus tradiciones ha sido en las relaciones personales. El llamado giri, un término que hace referencia las ideas de “deber”, “obligación” y “honor”, ha provocado que la cultura japonesa sea menos individualista que las de los países occidentales.

A pesar de que la rigidez es menor en el ambiente familiar, el trato con los desconocidos o con los superiores está regulado por sus concepciones de “conductas deseables” y “moralidad”.

Honor, obligación y deber

Para los japoneses, las relaciones interpersonales deben estar basadas en los ideales de deber, honor y obligación. Son cuatro los principios que deben tenerse en cuenta:

– Verticalidad en las relaciones (tate shakai)

– Culto a la forma ( rei)

– Armonía social (wa)

– Dualidad, lo que supone separar los pensamientos personales con los que se muestran en público.

Jardín japonés

Los jardines japoneses (nihon teien) son una tradición que se mantiene tanto en las casas privadas del país como en los parques, templos o lugares históricos. Uno de los tipos más conocidos son los jardines Zen.

Este tipo de jardín apareció en la era Heian por influencia china. El orden refinado de esos jardines suele esconder una doble lectura: la geográfica, con la que refleja el paisaje y el archipiélago japonés; y la visión de cosmos que ofrece el sintoísmo, con un gran vacío (el mar) y objetos que lo llenan (las islas).

Ceremonia del té

El ritual para preparar el té verde o matcha es otra de las tradiciones con origen chino que fueron adoptadas por los japoneses. Estas ceremonias tienen una gran influencia del budismo zen y se celebran en un entorno relajado y con pocos invitados.

Fueron los monjes budistas procedentes de China los que introdujeron el té en Japón en el siglo IX. La bebida se hizo pronto muy popular y empezó a ser cultivada en el país.

El té matcha comenzó a beberse en el siglo XII como parte de rituales religiosos celebrados en los monasterios budistas. Un siglo más tarde, los samuráis empezaron a consumirlo y establecieron las bases de la ceremonia para servirlo.

Sumo

El sumo es el deporte más tradicional del país y está considerado casi un arte. Este tipo de lucha apareció en el propio Japón relacionado con la tradición sintoísta.

En un primer momento, el sumo era el arte marcial del sumai. Los samuráis que lo practicaban aprendían muchas técnicas de golpeo, estrangulaciones o lanzamientos y, con el tiempo, empezó a ser utilizado en los duelos.

Geishas

Las geishas están consideradas en Japón como auténticas artistas multidisciplinares. Su entrenamiento, que comienza en la adolescencia, está destinado a que sean capaces de entretener en fiestas, banquetes o reuniones.

Su momento de mayor esplendor se produjo durante los siglos XVIII y XIX. Hoy en día, aunque su número ha disminuido mucho, todavía existen escuelas de geishas y estas siguen prestando sus servicios.

Costumbres

Muchas de las costumbres japonesas están determinadas por sus fuertes normas sociales. Estas marcan desde la jerarquía social y las relaciones interpersonales hasta el comportamiento en público o en privado.

Nombres personales

Los nombres personales en Japón se escriben, en su idioma, a la manera occidental, con el nombre propio primero y el apellido después. Esta medida se introdujo a finales del siglo XIX, cuando el país trataba de modernizarse y adoptar costumbres de occidente. En los últimos años ha aparecido propuestas para volver al método tradicional, pero de momento no han prosperado.

Por otra parte, cuando se conoce a una persona la costumbre es dirigirse a ella por su apellido. Tan solo cuando la amistad se consolide se puede usar el nombre propio. Igualmente, es muy habitual incluir un sufijo al hablar con gente poco conocida o de rango superior, -san, y otro para los desconocidos de rango inferior o igual, -kun.

Onsen

El baño supone para los japoneses algo más que un mero asunto de higiene. Para ellos, es todo un ritual destinado a purificar el cuerpo y el espíritu. Además, es también un gran momento para socializar.

Aunque existen varios tipos de baños públicos, los más populares son los onsen. Se trata de baños de aguas termales muy numerosos en el país gracias a que las islas están ubicadas sobre una zona volcánica.

El agua de estos baños tienen varios minerales diferentes, con propiedades beneficiosas para la piel.

Cuando estos onsen se encuentran al aire libre reciben el nombre de rotenburo. Quizás los más populares y espectaculares con los que permiten ver el monte Fuji mientras se usan.

Reverencias

Aunque el occidente se considera que las reverencias son un tipo de saludo solemne, el Japón son ampliamente utilizadas, incluso entre amigos.

Como en otros aspectos de la vida japonesa, la manera en la que se realiza la reverencia está relacionada con la relación entre los interlocutores y la formalidad del momento.

Existen cuatro tipos, con diversos grados de inclinación. Ese factor marca la diferencia entre un saludo entre iguales, uno ante un superior o cliente, uno para pedir perdón y uno para pedir un favor.

Hatsuhinode

Una de las costumbres más populares entre los japoneses en el hatsuhinode o primer amanecer. Se trata de contemplar la primera salida del sol del año.

Esta tradición se traduce en que miles de familias salen para buscar el emplazamiento ideal desde donde disfrutar de ese primer amanecer. Simbólicamente representa el deseo de renovación ante el nuevo año entrante.

Descalzos en las casas

Para los japoneses, los zapatos solo deben utilizarse en el exterior. En cuanto llegan a casa, lo adecuado es quitárselos y dejarlos en la entrada.

Regalos

Los japoneses consideran que ser invitado para ir a una casa es un gran honor, ya que los hogares son el lugar más íntimo para ellos.

La costumbre establece que el invitado lleve un regalo para los anfitriones como muestra de agradecimiento. Aunque se valora más el significado del obsequio que su precio, no llevar el obsequio está considerado como un acto de mala educación.

Lengua

El japonés es actualmente el noveno idioma más hablado del mundo. Los filólogos lo catalogan como una lengua aglutinante, con un complejo sistema de escritura.

Existen tres modos de representar los glifos: los kanji, caracteres chinos introducidos en Japón en el siglo V; el silabario hiragana, surgido en el país en el siglo V; y el silabario katakana, con el mismo origen que el anterior.

Por otra parte, el vocabulario está basado en palabras nacidas en Japón, denominadas wago, y en otras provenientes del chino, las kango.

Caligrafía japonesa

La caligrafía japonesa o shodo está considerada como un arte de muy difícil dominio. En los colegios se enseña desde la educación primaria como una asignatura más.

Como otros aspectos de su cultura, esta caligrafía proviene de China. Se práctica de la manera tradicional, con un tintero, un pincel y papel de arroz.

Vestimenta

La vestimenta que se puede encontrar en Japón es de dos tipos: la tradicional y la moderna. La influencia estadounidense también se ha dejado notar en este campo.

Vestuario tradicional

La prenda tradicional japonesa más conocida es el kimono, cuyo significado literal es “cosa para vestir”. Se trata de una prenda larga que pueden usar tanto hombres como mujeres y que consta de un forro, un fondo y una parte superior muy llamativa.

Aunque aún se utiliza en ocasiones especiales, la dificultad de su uso ha provocado que sea cada vez menos habitual.

Otras prendas tradicionales son la yukata, una especie de kimono más ligero usado en verano, la hakama, reservada para las ceremonias y el jinbei, usado por los hombres como pijama.

Vestuario moderno

Una de las tendencias que han ganado presencia en Japón ha sido el denominado ganguro. Esta moda femenina va más allá del uso de prendas determinadas, ya que también incluye la necesidad de broncearse la piel. La ropa, por su parte, debe ser de diseñadores reconocidos y va acompañada de muchos accesorios.

El cosplay, otra moda moderna en Japón, consiste en disfrazarse de personajes de anime, videojuegos, vídeos musicales o famosos.

Estas dos modas, más alguna otra del mismo cariz, no son, sin embargo, mayoritarias. Los japoneses actuales suelen vestir de manera bastante formal, tanto hombres como mujeres.

Religión

La mayor parte de los japoneses no siguen una religión en concreto. Lo más habitual es que incorporen elementos de varias creencias en su vida cotidiana, un proceso denominado sincretismo. Esto también se refleja en la celebración de ceremonias de varias religiones diferentes, especialmente sintoístas, budistas y cristianas.

Sintoísmo

El sintoísmo o shintoísmo es una religión nacida en Japón y que es exclusiva de ese país. Antes de la llegada del budismo, era la única existente y hoy en día sigue siendo una de las más practicadas. Sus fundamentos marcaron de manera notable la mitología japonesa.

El nombre de esta religión puede traducirse como “camino de los dioses”. Según los expertos, es una forma muy sofisticada de animismo naturalista en la que se veneran a los antepasados.

Su culto se realiza en los templos shinto o jinja y está basada en cuatro factores fundamentales: amor a la naturaleza, tradición y familia, celebración de sus festividades y purificación.

Esta religión no tiene ningún libro sagrado ni tampoco un carácter proselitista, lo que explica que no se haya extendido a otros países.

Budismo

A pesar de que el sintoísmo nació en el propio Japón, la religión mayoritaria en el país es el budismo. Este llegó al archipiélago en el siglo VI procedente de Corea y durante el siglo siguiente fue adoptado mayoritariamente por la población.

Desde su llegada comenzaron a aparecer varias escuelas y tendencias diferentes. La que causó más impacto en el país fue el budismo zen

El budismo se ha compenetrado en muchos aspectos con el sintoísmo, hasta el punto de que, en ocasiones, ambas religiones se han fundido en solo una.

Otras religiones

El cristianismo fue introducido en Japón por los misioneros europeos en 1549. Los gobernantes japoneses trataron de limitar su desarrollo y en el siglo XVII apenar estaba presente en una zona del país, cercana a Nagasaki.

A finales del siglo XIX, el cristianismo vivió un renacer y fue extendiéndose poco a poco. En la actualidad se estima que alrededor de 1,4 millones de japoneses practican esta religión.

Música

Los hallazgos arqueológicos han permitido constatar que varias tendencias e instrumentos musicales llegaron a Japón desde el continente asiático a partir del 400 d. C.

Existen más datos sobre el tipo de música presente en el país a partir del 700 d. C. Se sabe, por ejemplo, que Japón adoptó un tipo de teatro musical coreano o chino llamado gigaku. De China también llegó el sangaku, otro tipo de teatro musical que evolucionó hasta convertirse en el sarugaku.

Aparte de estos dos géneros, la recitación budista también jugó un papel importante en el desarrollo de los estilos musicales.

Ya durante el periodo Edo, desde 1603 hasta 1868, se desarrollaron tres de los instrumentos tradicionales más importantes del país: el koto, el shakuhachi y el shamisen. Los tres empezaron a hacerse muy populares entre las clases urbanas japonesas.

Influencia occidental

Cuando Japón empezó a abrirse a occidente, primero a finales del siglo XIX y después tras la Segunda Guerra Mundial, empezaron a cobrar popularidad nuevos estilos musicales.

De esta forma, la música clásica occidental ha pasado a formar parte de la educación en el país y la ópera ganó enorme popularidad.

Después de la Segunda Guerra Mundial, los más jóvenes se aficionaron a la música de los Beatles y los Rolling Stones. En los años 60 apareció un género denominado Grupo Sound y en la década siguiente el rock tuvo mucha repercusión.

Hoy en día existen numerosos grupos japoneses que han adoptado la música occidental dándole su propio estilo. Entre los géneros más destacados se encuentran el J-pop, el J-rock, el J-ska o el jazz.

Gastronomía

Uno de los ámbitos culturales que han ganado presencia internacional durante las últimas décadas ha sido la gastronomía. Japón ha aunado sus recetas tradicionales con las técnicas más actuales.

La gastronomía japonesa destaca por sus platos estacionales y está basada en cinco ingredientes ricos en carbohidratos.

Una comida japonesa estándar incluye una taza de arroz, una sopa y un plato principal (okazu) de pescado, carne o verduras.

Ramen

El ramen es uno de los platos más populares en el país, hasta el punto de que hay un museo en su honor. Se trata de una sopa con fideos elaborados con un caldo muy sabroso y a la que se añade carne, pasta de pescado, huevos y/o verduras.

Udon

Estos fideos gruesos de trigo se sirven con una salsa denominada tsuyu, elaborada a base de caldo de pescado (dashi), mirin y salsa de soja. A la mezcla se añaden ingredientes como la cebolla, el tofu o los langostinos. Como sucede con el ramen, existe una gran cantidad de variantes de este plato.

Tempura

La tempura es una técnica japonesa para freír mariscos, verduras y, aunque menos frecuente, carnes. La clave de esta receta es la elaboración de la masa en la que deber rebozarse los alimentos, siempre cortados para tener el tamaño de un bocado. Lo más habitual es que ese rebozado incluya cerveza o agua muy fría.

La mayoría de los expertos afirma que la palabra tempura proviene del portugués “tempero” (condimento en español”. En el siglo XVI, los misioneros cristianos portugueses introdujeron el hábito de tomar pescado y verdura en Cuaresma, durante el periodo “tempora ad quadragesima” (tiempo hacia la Cuaresma”.

Otra explicación, sostenida por algunos cocineros japoneses, es que el origen del tempura se remonta a la llegada de Marco Polo a China.

Sushi

Es sushi es, probablemente, el plato japonés más conocido internacionalmente. Se trata, básicamente, de una porción de arroz a la que se añade una pieza de marisco, pescado o verduras. Existen varios tipos de sushi, como el maki, el nigiri, el temaki o el uramaki. .

Los japoneses empezaron a consumir este alimento hace más de cuatro siglos. Su origen fue un método para mantener durante más tiempo el pescado fresco sin que se estropeara: fermentar el pescado usando arroz y sal.

Los marineros salaban las piezas capturadas y las almacenaban en contenedores con capaz de arroz. Este sistema conservaba el pescado durante meses. Según algunas versiones, el método fue llevado a Japón desde China por los monjes budistas.

Wagashi

Uno de los dulces más populares entre los japoneses en el wagashi, que se elabora con papel de arroz glutinoso (mochi), pasta dulce de judías azuki (anko) y varios tipos de fruta.

El wagashi se consume normalmente junto al té, por lo que es un elemento muy presente durante las ceremonias en las que se sirve esta bebida.

Referencias

  1. Ecured. Cultura de Japón. Obtenido de ecured.cu
  2. Japonpedia. Cultura Japonesa. Obtenido de japonpedia.com
  3. Japón-Secreto. La ceremonia del té en Japón: tipología, rituales y utensilios utilizados. Obtenido de japon-secreto.com
  4. Every Culture.  Culture of Japan. Obtenido de everyculture.com