Hidrozoos: características, hábitat, reproducción, alimentación
Los hidrozoos (Hydrozoa) son animales que pertenecen a una orden del filo cnidaria que abarca casi en su totalidad organismos coloniales. Estos pueden encontrarse fijos al sustrato, o bien desplazándose libremente por las aguas.
Los hidrozoos fueron descritos por primera vez en el año de 1843 y a partir de allí se han descubierto un total de 3000 especies aproximadamente, las cuales se distribuyen en los cinco órdenes que integran al grupo.
Este es un grupo bastante diverso y variado en lo referente a formas y colores, encontrándose organismos tan pequeños que solo abarcan unos cuantos centímetros, hasta grandes colonias con varios metros de longitud.
Así mismo, al igual que ocurre con la mayoría de los miembros del filo cnidaria, los hidrozoos poseen células urticantes (cnidocitos) que sintetizan y secretan una sustancia tóxica que utilizan tanto para defenderse como para conseguir a sus presas.
Índice del artículo
- 1 Taxonomía
- 2 Características
- 3 Morfología
- 4 Hábitat y reproducción
- 5 Alimentación
- 6 Reproducción
- 7 Clasificación
- 8 Referencias
La clasificación taxonómica de los hidrozoos es la siguiente:
– Dominio: Eukarya.
– Reino: Animalia.
– Filo: Cnidaria.
– Subfilo: Medusozoa.
– Clase: Hydrozoa.
Teniendo en cuenta que los hidrozoos pertenecen al dominio Eukarya, todas las células que los conforman son de tipo eucariota. Esto quiere decir que su ADN se encuentra encerrado en un organelo llamado núcleo celular, delimitado por la membrana nuclear.
De igual forma, durante su proceso de desarrollo, sus células experimentan un proceso de diferenciación y especialización que les permite desempeñar funciones específicas como la nutrición, reproducción y producción. Debido a esto se puede afirmar que los hidrozoos son organismos pluricelulares.
Así mismo, se caracterizan por presentar forma de pólipos y medusas, aunque hay especies que solo presentan pólipos y otras que solo presentan forma de medusa.
Una de las características más resaltantes de este grupo de seres vivos, es que no son un solo individuo, sino que en la mayoría de los casos están conformados por varios individuos. De esta manera constituyen una colonia, dentro de la cual cada uno cumple funciones específicas y detalladas.
En lo referente a su ciclo biológico, en los hidrozoos se pueden apreciar dos tipos de ciclos: metagenético, que es el que tiene alternancia de generaciones (pólipo y medusa); y el hipogenético en el que solo se observa una forma (pólipo o medusa).
El tamaño de los organismos que pertenecen a esta clase es variado. Se han descrito pólipos que apenas alcanzan las 500 micras y medusas con un diámetro de 40 cm, en tanto que las grandes colonias de pólipos pueden llegar a alcanzar los 30 metros de envergadura.
Para poder estudiar y comprender la morfología de los hidrozoos, es necesario estudiar al pólipo y la medusa por separado.
Se conocen con el nombre de hidropólipos, y en la mayoría de los casos establecen grandes colonias. Solo unas pocas especies como la hydra son solitarios.
Al igual que ocurre con los pólipos de otras especies de cninadrios, los pólipos de los hidrozoos se encuentran fijos al sustrato a través de una estructura conocida como hidrorriza, que se asemeja en gran medida a las raíces de las plantas terrestres. A partir de ese primer pólipo que se fija al sustrato se desarrollan los demás pólipos que conforman a la colonia.
Estructuralmente están conformados por varias capas: ectodermis (epidermis), gastrodermis y mesoglea. El conjunto de estas tres capas se conoce con el nombre de cenosarco. A su vez, el cenosarco se encuentra protegido por una especie de exoesqueleto constituido por quitina, que recibe el nombre de perisarco.
Es importante destacar que la porción del perisarco que recubre al pólipo en su totalidad se llama teca. Existen tres tipos de teca, dependiendo de la parte del pólipo a la que recubre: gonoteca (cubre los gonozoides), hidroteca (cubre a los gastrozoides) y dactiloteca (cubre a los dactilozoides).
Así mismo presentan una cavidad en común que se conoce con el nombre de cavidad gastrovascular. Estas estructuras son propias de cada pólipo. Sin embargo, cada pólipo se encuentra conectado a otro a través de ellas.
La cavidad gastrovascular es un espacio que conecta a todos los pólipos de la colonia. En ella se realiza la parte final del proceso digestivo.
En realidad, las colonias están conformadas por organismos denominados hidroides, cada uno con una morfología específica, así como también con funciones específicas. Los tipos de hidroides que se observan en estas colonias son: dactilozoides, gonozoides y gastrozoides.
Dactilozoides
Estos hidroides tienen la función de defender al organismo. No presentan estructuras especializadas como tentáculos o boca. Están repletos de cnidocitos, células que sintetizan sustancias urticantes que, al contacto con otros animales, pueden causar graves daños.
Los dactilozoides se encuentran ubicados muy cerca de los gastrozoides, ya que son los encargados de neutralizar a las posibles presas para que puedan ser ingeridas.
Gonozoides
Los gonozoides son hidroides que se encargan únicamente del proceso reproductivo del pólipo. A pesar de que su forma puede ser variada, con mucha frecuencia tienen forma de botella y se encuentran rodeados por una cubierta protectora denominada gonoteca. Igualmente cuentan con una estructura llamada blastostilo, la cual, conjuntamente con la gonoteca, conforma lo que se conoce como gonangio.
El tipo de reproducción que se observa en los gonozides es de tipo asexual, estando representada por la gemación.
Gastrozoides
Son hidroides especializados en la digestión de nutrientes. Estructuralmente están conformados por una gran cantidad de tentáculos que contienen cnidocitos urticantes.
Presentan además una cavidad gastrovascular rudimentaria, en la que se sintetizan enzimas digestivas que contribuyen en la digestión inicial de las presas que son ingeridas.
De todos los hidroides que conforman a las hidropólipos, los gastrozoides son los que se encuentran en mayor cantidad, pero además son los que presentan un menor grado de especialización.
Es la fase que menos predomina en el ciclo de vida de los hidrozoos. Generalmente se trata de medusas de pequeño tamaño, alcanzando hasta los 6cm de diámetro. Son las medusas más pequeñas del filo cnidaria.
Presentan la forma característica de seta de algunas medusas. Al igual que las cubomeduzas, este tipo de medusas también presenta en el borde inferior de su umbrela una prolongación de tejido que se conoce como velo. Esta estructura es importante, ya que desempeña un papel fundamental en el proceso de desplazamiento del animal.
Igualmente, en la parte subumbrelar presentan una prolongación que recibe el nombre de manubrio. En el extremo de ese manubrio se localiza un orificio o abertura que se conoce como boca.
La boca se abre hacia la cavidad gastrovascular o estómago. A partir del estómago surgen una serie de conductos (4 en total), que se denominan radios. Estos se comunican con un anillo que recorre el borde la umbrela.
Sistema digestivo
El sistema digestivo de estas medusas es bastante rudimentario. Está conformado simplemente por la boca y un esófago primitivo que desemboca en el estómago. Allí se sintetizan enzimas digestivas que ayudan a digerir las presas capturadas. La boca también cumple la función de liberar los desechos de la digestión.
Sistema nervioso
El sistema nervioso de las hidromedusas es sencillo. Está conformado por dos plexos nerviosos, uno subumbrelar y otro exumbrelar (subgastral). De ambos plexos, el subumbrelar es el que se encuentra más desarrollado y participa activamente en el movimiento y desplazamiento de la medusa.
Sistema reproductor
Está conformado por las gónadas, que es donde se producen los gametos. Las gónadas presentan una localización ectodérmica, específicamente sobre el manubrio o sobre los canales radiales.
Las hidromedusas se encuentran ampliamente distribuidas por todo el globo terráqueo. Son animales casi netamente marinos. Sin embargo es posible encontrarlos en ecosistemas dulceacuícolas.
Los pólipos se encuentran fijos al sustrato, en tanto que las medusas están libres, desplazándose tranquilamente en las aguas; y pueden encontrarse tanto cercanas a la superficie como en la profundidad.
En lo referente a la temperatura, los hidrozoos prefieren aguas de temperatura cálida y tropical. Sin embargo, algunos especialistas han llegado a describir especies que son asiduos habitantes de la región ártica.
El proceso digestivo va a ser diferente en los pólipos y en las medusas. En estas últimas, las presas son paralizadas y neutralizadas con la toxina que secretan los cnidocitos. Una vez hecho esto, entran en la boca y son pasadas al estómago, donde sufren la acción de las enzimas digestivas que se secretan allí. Posteriormente, los nutrientes son absorbidos y lo que queda, los desechos, son liberados a través de la boca hacia el exterior.
Por otra parte, el proceso digestivo en los pólipos ocurre en dos etapas. En la primera, la predigestión extracelular, los tentáculos de los gastrozoides capturan a la presa y la introducen en la cavidad gastrovascular. Allí es sometida a las enzimas digestivas, formando una especie de papilla.
Esa papilla, posteriormente, es distribuida hacia la cavidad gastrovascular común de la colonia de pólipos. Allí se da la digestión intracelular, donde los nutrientes son finalmente absorbidos y los desechos son liberados al medio.
En los hidrozoos se observan los dos tipos de reproducción: asexual y sexual. La reproducción asexual se observa en los pólipos, en tanto que las medusas se reproducen de manera sexual.
La reproducción asexual en los pólipos ocurre mediante la gemación. De acuerdo a este proceso, en la superficie de los gonozoides se forman una especie de yemas o gonóforos, que experimentan un proceso de diferenciación celular hasta formar un nuevo pólipo. Ese pólipo formado puede desprenderse de la colonia o bien permanecer unido a ella.
Es importante destacar que de las yemas que crecen sobre los pólipos también es posible que se formen medusas.
Este tipo de reproducción sexual ocurre solo en la fase de medusa. La reproducción sexual involucra la unión de dos gametos, masculino y femenino.
Dependiendo de la especie, la fecundación puede ser de tipo externo o interno. La más frecuente es la fecundación externa. Lo que ocurre aquí es que los gametos son liberados al mar y allí se encuentran. El óvulo es fecundado por el espermatozoide.
Como producto de esa fecundación, se forma una larva plánula (plana) que tiene la capacidad de nadar libremente hasta que consigue un lugar idóneo en el sustrato y se fija. Allí experimentará un proceso de diferenciación tisular, creando primero las diversas capas que forman al pólipo, hasta finalmente dar paso a la cavidad gastrovascular de este y a otras estructuras.
La clase hydrozoa se clasifica en cinco órdenes: Hydroida, Actinulida, Chondrophora, Trachylina y Siphonophora.
Es el orden que presenta la mayor cantidad de especies. Se caracteriza por presentar ambas formas: pólipo y medusa. Así mismo estos animales tienden a formar colonias cuyos pólipos pueden ser todos de la misma forma o de diferentes formas.
Se puede decir que son los hidrozoos más simples que hay. No presentan forma de medusa, sino solo forma de pólipo. No establecen colonias y sus pólipos solitarios presentan una superficie con cilios.
Tampoco presentan forma de medusa. Forman organismos coloniales flotantes que se deslizan libremente gracias a la acción de las corrientes marinas. Es importante destacar que, a pesar de que son colonias flotantes, no presentan neumatóforo.
No presenta forma de pólipo, sino solo de medusas. Es quizás la clase más primitiva dentro de los hidrozoos. La medusa se desarrolla directamente a partir de una actínula. Además, su ciclo de vida comprende una fase pluricelular y otra unicelular.
Los individuos de este orden forman colonias que se desplazan libremente por el mar. Una característica propia de esta orden es que presentan una estructura llamada neumatóforo, la cual no es más que una especie de campana rellena de gases que se mantiene por encima del nivel del mar. Ese neumatóforo es el responsable del desplazamiento del organismo, gracias a la acción del viento.
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