Discriminación cultural: concepto, causas, tipos, consecuencias
¿Qué es la discriminación cultural?
La discriminación cultural consiste en la consideración de que ciertas costumbres, creencias o hábitos son inferiores a otras. Esto conlleva que se trate de manera desigual, desde un punto de vista negativo, a aquellos que poseen esos rasgos diferenciados. En la sociedad actual la discriminación cultural está muy asociada a la étnica o al racismo.
En muchas ocasiones, la parte mayoritaria de una población mira con recelo a aquellas minorías que representan lo diferente. De acuerdo con los expertos, existen varias causas de que se produzca la discriminación, siendo habitual que se presenten simultáneamente. Uno de los aspectos que suele disparar esta conducta es la situación socioeconómica.
En épocas de crisis es frecuente buscar a un culpable, que no es otro que el diferente. Indígenas en Latinoamérica, gitanos o musulmanes en Europa y otros grupos minoritarios con culturas distintas a la de la mayoría de la población, son ejemplos de discriminación. Las consecuencias son muy negativas, tanto personalmente como para la sociedad.
Causas de la discriminación cultural
Los antropólogos señalan que la discriminación cultural, definiéndola en un sentido amplio, ha estado presente en el ser humano desde su aparición. Así, se considera que en épocas prehistóricas el rechazo a los ajenos al grupo tribal, era una especie de forma de defensa ante lo que consideraban un peligro a su existencia.
Sin embargo, el paso del tiempo no ha conseguido eliminar esa aversión a los diferentes. Las leyes se han convertido en una manera de intentar mitigar sus consecuencias al establecer la igualdad entre los seres humanos.
Las causas profundas de que siga existiendo esa discriminación son motivo de debate permanente, aunque existen algunos puntos en los que los expertos coinciden.
Situación económica o social
En época de crisis económica siempre se incrementan los episodios de rechazo hacia otras culturas. Se trata de una manera de buscar un culpable de la situación personal de cada individuo, siendo más sencillo achacar el problema a los que son más débiles que a los poderosos.
Igual ocurre en zonas de exclusión social donde, paradójicamente, se suele rechazar a los diferentes aunque estén en la misma situación. Hay teóricos que unen este fenómeno con unos índices educativos menores que en otras áreas.
Ideología
Ciertas ideologías tienen como elemento que las caracteriza el rechazo a otras culturas. Cuando se produce hacia grupos con costumbres diferentes dentro de un mismo país, es muy frecuente que tenga una base identitaria, que aboga por la homogeneización de la población tanto racial como culturalmente.
En ciertos casos estas ideologías van aún más allá, y establecen una escala jerárquica de las culturas según su supuesta superioridad.
Por último, dentro de la discriminación cultural también se encuentra la producida directamente por motivos ideológicos. Esto es, cuando se considera que aquellos que tienen ideas minoritarias deben ser perseguidos o anulados.
Miedo
No se debe menospreciar el miedo, ya sea consciente o inconsciente, de la existencia de cualquier tipo de discriminación. El temor a los que actúan de manera diferente es algo muy común entre los que discriminan.
Como factor importante, hay que reseñar que los medios de comunicación (incluido el cine) ha establecido unos estereotipos culturales que acaban alimentando ese miedo.
Personalidad
Aquellos con personalidades débiles son más proclives a ejercer la discriminación cultural. Dada su forma de ser, suelen dejarse llevar por las actuaciones de otros con mayor capacidad de liderazgo, sin plantearse si están comportándose de manera negativa o no.
Tipos de discriminación cultural
Dado que la cultura es un concepto que abarca todo comportamiento humano como ser social, casi todo tipo de discriminación tiene un componente cultural. De esta forma, se podría afirmar que se trata de un tipo de maltrato transversal.
Por poner un ejemplo, la discriminación por razón de género no podría sostenerse sin una construcción cultural que considera que el papel de la mujer es inferior en la sociedad.
Discriminación religiosa
Como se afirmaba antes, en la mayoría de las ocasiones confluyen varios tipos de discriminación. En la religiosa —la que afecta a grupos minoritarios que practican una religión diferente a la de la mayoría— en muchas ocasiones se une la racial. Es frecuente que sean otras etnias los practicantes de esas creencias.
Discriminación por costumbres
De nuevo se suele presentar junto con la racial o la religiosa. Determinadas comunidades pueden ver cómo sus costumbres son discriminadas por la mayoría de la población, como ocurre en muchos pueblos indígenas latinoamericanos.
Esto puede suponer que, por la presión social, sus hábitos acaben desapareciendo, con la consiguiente pérdida de riqueza cultural.
Discriminación ideológica
Este tipo de discriminación puede llegar a estar recogida incluso por las propias leyes de un país. Es importante aclarar que, al hablar de las que sufren esta discriminación, no se hace referencia a aquellas potencialmente peligrosas como el nazismo; la libertad de ideología es una de las bases de la sociedad democrática.
Discriminación por orientación sexual
A pesar de contar con características propias, la discriminación por orientación sexual tiene una gran contenido cultural. Es mucho más frecuente en sociedades cerradas, que no aceptan que exista variedad de opciones en ese campo.
Consecuencias de la discriminación cultural
Para los discriminados
Obviamente, son los que sufren de manera más directa la discriminación. Las consecuencias para ellos pueden presentarse de múltiples formas.
Psicológicamente es devastador el sentirse aislado y condenado por sus creencias o ideas. Esto puede llevar a que sufran graves depresiones, o incluso al suicidio.
Por otra parte, también se van a ver limitados a la hora de conseguir un trabajo. No es infrecuente que padezcan el rechazo para poder colocarse en el mercado laboral.
Esto ha llevado a que, en cada vez más lugares, las leyes opten por potenciar los currículos ciegos, sin datos personales que lleven a una temprana eliminación del proceso.
Aunque más infrecuentes, también se dan casos de agresiones físicas. En algunos países grupos de ultraderecha han sido protagonistas de varias palizas a personas de otras culturas.
Para los grupos sociales que la padecen
Una de las reacciones más comunes entre los que sufren la discriminación es que abandonen su cultura. Haciendo esto, pretenden asimilarse a la forma de vida de la mayoría y evitar los problemas.
También provoca la aparición de guetos en los que pueden seguir manteniendo sus costumbres. Al final, al ir unido a una menor esperanza de encontrar trabajo y a una baja riqueza, se crean barrios problemáticos.
Para la sociedad
La sociedad también padece sus propias consecuencias negativas. Generalmente, esta se traduce en una pérdida de riqueza cultural, sin que se produzca ningún intercambio favorecedor.
De igual manera, las prácticas discriminatorias empobrecen al limitar el acceso a individuos con mucho talento a puestos importantes.