Geografía

Río Pilcomayo: recorrido, desembocadura, afluentes, flora


El río Pilcomayo es un afluente de América del Sur que recorre Bolivia, Paraguay y Argentina. Forma parte de la cuenca de La Plata y se extiende por un territorio aproximado de 290.000 km².

Nace en la cordillera boliviana y se constituye como un afluente del río Paraguay, al que aporta sus aguas en su desembocadura. Debido a la variedad de los relieves que atraviesa en sus 1.000 km de recorrido en dirección noroeste – sureste, es un curso de agua con un comportamiento muy variado, con presencia de caídas, rápidos y llanuras de inundación.

Historia

Formación

Su historia se inicia en el Pleistoceno, época en la que participó en la formación del Gran Chaco Americano, depositando sus aguas en un gran lago ya desaparecido que dio paso a las actuales llanuras de desbordamiento, con sus bañados y sus esteros.

Primeros registros

El primer registro de su recorrido fue realizado en 1721 por el jesuita paraguayo Gabriel Patiño, quien formaba parte de la comisión ordenada por el gobierno civil de la provincia de Tucumán. La compañía del padre Patiño estaba conformada por religiosos españoles y setenta guaraníes evangelizados. Su misión oficial era encontrar un paso que conectara los asentamientos de Paraná y de Chiquitos, mientras los jesuitas buscaban nuevas etnias indígenas para evangelizar.

Aunque esta misión no tuvo éxito, el padre Patiño logró dibujar un mapa de la región, con el que determinaron que el río Pilcomayo y el Bermejo constituían corrientes diferentes. Así descubrieron el Estero de Patiño, que ocupaba 1.500 km2 de terreno inundado con una longitud aproximada de 100 km.

Otras expediciones

Una nueva expedición fue emprendida en 1741 por el padre Castañares, otro jesuita que se puso al frente de la compañía con el objetivo de terminar la misión inconclusa del padre Patiño. Su misión tuvo un final trágico, en 1742 murió junto al resto de sus acompañantes en manos de los tobas, una etnia que habitaba en el Chaco Central.

Muchos intentos fueron emprendidos por los gobiernos de la región buscando cartografiar un paso franco que uniera los territorios por el río. En 1882 el gobierno boliviano encargó al explorador francés Jules Crevaux un viaje que partió desde San Francisco de Pilcomayo, buscando una salida hacia el Atlántico. Esta expedición sufrió la misma suerte que la del padre Castañares y sus integrantes murieron en manos de los tobas bajo circunstancias que no fueron aclaradas.

Al año siguiente, el gobierno boliviano organizó otra expedición comandada por el doctor Daniel Campos, quien retomó los pasos del explorador francés seguido por un gran contingente armado. En un paraje entre Teyú y Caballo Repotí -actual territorio de Weenhayek- fundaron la Colonia Crevaux.

El gobierno argentino organizó una exploración del río Pilcomayo con naves de distinto calado, especialmente preparadas para salvar los obstáculos que para la fecha ya eran muy conocidos. Al mando de la escuadrilla colocaron al capitán de fragata Juan Page, quien partió de Buenos Aires en enero de 1890. El 12 de mayo habían alcanzado el río Pilcomayo e iniciaron su exploración con dos barcos: el Bolivia y el General Paz.

En su camino río arriba, los pasos estrechos y poco profundos hicieron que el capitán Page tomara la decisión de abandonar el General Paz. Con muchos contratiempos y haciendo uso del ingenio para construir diques que pusieran a flote su embarcación, Page siguió avanzando hasta el 20 de julio, cuando fue obligado a volver enfermo, río abajo en una canoa. Murió antes de poder alcanzar un puerto el 2 de agosto de 1890.

Muchos otros exploradores encontraron su muerte en el temible río y concluyeron que el Pilcomayo no era navegable en ninguna época del año, debido a que sus crecientes y su cauce no eran regulares.

Los asuntos alrededor del cauce de río no se limitan a su exploración. El establecimiento de las fronteras binacionales marcadas sobre su cauce debieron ser revisadas y remarcadas por la variabilidad que presenta entre los períodos húmedos y secos, en los que muchas veces ha desaparecido por completo.

En 1933, el río Pilcomayo abandonó su cauce tradicional entre Argentina y Paraguay al internarse en territorio argentino. En ese momento, se evidenció un proceso de desecación que afectó el estero de Patiño y culminó en 1980.

Aparición del Bañado La Estrella

Hacia 1964 empezó a surgir un humedal del lado argentino: el Bañado La Estrella. Paradójicamente su formación ocurrió de forma paralela a la desaparición del estero de Patiño, por lo que los especialistas afirmaron que se trataba de un comportamiento normal del río.

Este cambio generó un conflicto entre Argentina y Uruguay, centrado en la necesidad del agua por parte de las poblaciones existentes en territorio uruguayo. El evento produjo construcciones de ambos lados que buscaron captar el agua del Pilcomayo para su aprovechamiento.

En 1989 los gobiernos de Argentina y Uruguay llegaron a un acuerdo y diseñaron el “Proyecto Pantalón”, que propició la construcción de dos canales, uno a cada lado y al mismo nivel, para llevar agua a ambos territorios.

Características del río Pilcomayo

El río Pilcomayo cuenta con características que lo hacen único. Ha sido objeto de intensas investigaciones científicas para entender su comportamiento, además de su lugar e importancia dentro de la cuenca de La Plata.

Río internacional

La cuenca del río Pilcomayo es compartida por tres países, por lo que es considerado un río internacional. Nace en Bolivia, en la Cordillera de los Andes desde donde desciende para servir de frontera entre dicho país y Argentina. En la llanura del Gran Chaco Americano dibuja algunos tramos de la frontera entre Paraguay y Argentina.

Crecientes

El Pilcomayo posee un período de crecida que está marcado por la temporada de lluvias en su cabecera, comprendida entre diciembre y enero.

Su crecida inicia en febrero y alcanza sus niveles máximos en abril. Presenta los registros mínimos a finales del invierno y principios de la primavera. Sus meses de bajante son entre mayo y diciembre.

Su caudal varía considerablemente entre los períodos de crecidas y estiaje y dependen en gran medida del lugar donde sea medido. En territorio de Bolivia el caudal es mucho más impetuoso, llegando a registros máximos de 6.500 m3/s en el período húmedo; mientras que en el Chaco Central puede llegar a desaparecer durante el período seco.

Bañados y esteros

A su paso por la cordillera de los Andes las aguas del río Pilcomayo arrastran una gran cantidad de sedimentos que transporta en suspensión, para depositarlos sobre las llanuras del Gran Chaco Americano formando con su acumulación y el desbordamiento de sus aguas, bañados y esteros.

El río Pilcomayo es considerado uno de los ríos que más cantidad de sedimento lleva en suspensión en sus aguas, con una impresionante tasa media de 125 millones de toneladas anuales.

Esto se debe a que el terreno sobre el cual se desplaza está constituido principalmente por arcilla, arena y grava, materiales muy erosionables por la acción directa del cauce del río e indirecta por las lluvias que escurren hacia el mismo.

Hasta 1980 existía en el departamento paraguayo Presidente Hayes, cerca de la frontera con Argentina, el estero de Patiño, que por un proceso de desecación dejó de recibir alimentación del Pilcomayo y se secó.

En paralelo, a partir de 1964 se empezó a formar el Bañado La Estrella en la provincia argentina de Formosa, una región muy cercana al extinto estero de Patiño, por lo que los especialistas afirman que ambos eventos están conectados por un cambio en el cauce del Pilcomayo.

El Bañado La Estrella es considerado el segundo humedal más grande de Argentina, contando con una longitud que varía entre los 200 y los 300 km y un ancho de entre 10 y 20 km.

A su salida de la cordillera de los Andes, en su entrada a la llanura del Gran Chaco Americano, a la altura de la ciudad de Villa Montes en la provincia boliviana de Tarija, el Pilcomayo forma una abanico pluvial que abarca hasta su desembocadura en la Asunción, Paraguay.

Tiene una magnitud aproximada de 700 km de longitud y 650 km de ancho, este último se ve modificado de manera considerable entre los períodos lluviosos y secos con registros históricos de retrocesos de hasta 100 km.

Extinción del cauce del Pilcomayo

La sedimentación de la gran cantidad de desechos sólidos, producto de la contaminación que el Pilcomayo transporta en suspensión por medio de su cauce, genera en su desembocadura un fenómeno único en el mundo: la extinción del cauce o atarquinamiento.

Además de las deficientes políticas de conservación del río, la falta de lluvias en Bolivia ha provocado que progresivamente el Pilcomayo se esté secando por completo.

Actualmente es un problema ecológico que ha encendido las alarmas de los países que atraviesa, los cuales han iniciado distintos planes para gestionar acciones en pro de su mantenimiento y para el rescate de los animales que hacen vida en su ecosistema, que se han visto gravemente afectados por la sedimentación.

Nacimiento, recorrido y desembocadura

El río Pilcomayo nace a una altura aproximada de 5.000 msnm en la cordillera de los Frailes, en los Andes bolivianos, específicamente en el Cerro Michaga que está ubicado al oeste del departamento de Potosí.

Luego discurre en dirección sureste hasta su desembocadura en el río Paraguay. En territorio boliviano toca los departamentos de Potosí, Chuquisaca y Tarija, donde abandona su tramo montañoso y se interna hacia la llanura del Gran Chaco Americano.

En el Chaco forma bañados y esteros que tocan poblaciones pequeñas como Santa Victoria y Misión de La Merced, cerca del Hito Esmeralda que marca la frontera entre Bolivia, Argentina y Paraguay.

Sigue su camino al sur entre Argentina y Paraguay, pasando cerca de las ciudades de Clorinda y la Asunción en los departamentos de Formosa y Presidente Hayes respectivamente. Alcanza el río Paraguay cerca de la Asunción.

Principales ciudades que recorre

Sobre la cuenca del río Pilcomayo se han registrado asentamientos de 20 etnias indígenas distribuidas entre los tres países. Algunas de ellas son los Tapietes, los Tobas, los Guaraníes, los Wichis y los Weenhayek.

Debido al comportamiento errante de su cauce, no existen ciudades colocadas directamente en sus riberas. Sin embargo, pasa cerca de algunas importantes como Potosí y Villa Montes en Bolivia; Formosa y Clorinda en territorio argentino; Villa Hayes y la Asunción en Paraguay.

Afluentes

Entre los afluentes del Pilcomayo están los ríos Camatindi, Tarapaya, Suaruro, Yolanda, Cotagaita, Yamparez, Grande, San Antonio, Chuquiago, Chaco Bañado, Puca Mayu, Huacaya, Caigua y el Puente.

Flora

La cuenca del río Pilcomayo presenta una gran variación de altura que va de los 5.000 msnm en su nacimiento sobre la Cordillera de los Andes, hasta los 50 msnm aproximados de su desembocadura en el río Paraguay.

Presenta temperaturas desde bajo cero hasta los agobiantes 47 °C en el Chaco Central, por lo que su vegetación es muy diversa. En la zona se puede encontrar lengua cumandá, lapacho, algarrobo negro, santo, duraznillo, palo bobo, quebracho blanco, payaguá naranja, palo lanza, quebracho coronillo, labón, sacha sandía, samuhú, palo piedra, sal de los indígenas, espartillo, mistol, cardón, palo negro, pindó, jacarandá y algarrobo blanco.

Fauna

Las especies animales presentes en el río Pilcomayo también son muy variadas y se han adaptado a las condiciones específicas que presenta cada tipo climático.

Entre los mamíferos destacan jaguar, tapir, puma, corzuela, carpincho, lobito de río, mapache sudamericano, pecarí de collar, tatabro, tagua y el oso hormiguero.

Muchas aves habitan las zonas húmedas. Entre las especies más comunes están crestudo, bragado, maracaná cabeza azulada, cigüeña, pato ganso, caserote castaño, cotorrita, ñandú, pájaro carpintero, jabirú, trepador gigante, flamenco, loro hablador y bandurria mora.

También lo habita la garza blanca, picapalo colorado, chajá, garcita bueyera, trepatroncos chinchero​, suirirí bicolor, cardenal, garcita azulada, pato crestudo, pato criollo, cardenilla piquigualda, garza mora, curutié ventriblanco​, hornero copetón​ y cantil.

Los reptiles de la zona son yacaré, anaconda amarilla, serpiente de Wagler, yarará, culebra perico verde, ameiva y tejupyta.

Entre los peces se encuentran buzo, mojarra, cascarudo, dientudo paraguayo, bagre trompudo, tritolo, boga, pequira, madrecita de agua, lenguado de río, pechito, bagre sapo, armado, pejerrey, surubí pintado, chanchita, pacú, morena negra, piraña, blanquillo y sábalo.

Referencias

  1. Cuenca propia del río Pilcomayo en Argentina, Ministerio Interior Gobierno Argentina (2005), tomado de mininterior.gov.ar.
  2. Historia y bravura del Pilcomayo, Versión digital periódico argentino El Tribuno de Salta, 15 de abril 2018, tomado de eltribuno.com.
  3. La problemática de la Cuenca del Pilcomayo, sitio web del Comité Intergubernamental Coordinador de los Países de la Cuenca del Plata, tomado de cicplata.org.
  4. Villalba, L, La naturaleza y riquezadel río Pilcomayo, Iniciativa Chaco Trinacional – Fundación Moisés Bertoni, Asunción (Paraguay, 2015).
  5. Características de la cuenca, Comisión Trinacional para el Desarrollo de la Cuenca del Río Pilcomayo, tomado de pilcomayo.net.